Federico y Mary de Dinamarca revelan su mejor secreto: la foto que lo confirma

Los Reyes de Dinamarca, Mary y Federico X, comenzaron a disfrutar en mayo de su residencia estival en la Cancillería de Fradensborg, un lugar lleno de historia y significado para ellos. Esta mansión, ubicada en una finca con 30 habitaciones y áreas ecuestres, fue su primer hogar tras casarse. En esta ocasión, la pareja estrenó un anexo renovado que refleja su compromiso con la sostenibilidad, el diseño funcional y la conexión con la naturaleza.

Un proceso de renovación basado en la sostenibilidad

La renovación del anexo —un antiguo taller circular que forma parte de la residencia privada— se llevó a cabo con un fuerte enfoque ecológico. La Casa Real danesa reveló que los monarcas participaron activamente en cada fase del proyecto. Trabajaron junto a arquitectos, contratistas y paisajistas para lograr un resultado que combinara estética y responsabilidad ambiental.

Este anexo fue construido utilizando materiales reciclados y de origen local: se reutilizaron elementos del antiguo taller y se aplicaron maderas tratadas que tienen un bajo impacto ambiental. Durante la remodelación, encontraron piezas de mármol verde de Groenlandia, que fascinó a Mary y Federico, quienes decidieron incorporarlo generosamente. También restauraron antiguas vigas de madera que aportan calidez y un carácter histórico muy especial al espacio moderno.

Un interior luminoso y un jardín en armonía con la naturaleza

El diseño del anexo destaca por un estilo escandinavo limpio y luminoso, con ventanales muy amplios que conectan el interior con el jardín y permiten la entrada de luz natural. El salón multifuncional es amplio y abierto, con tonos neutros que incluyen beige, gris claro y blanco roto, combinados con tejidos de lino que aportan textura sin romper la armonía general.

El paisaje exterior fue diseñado para reflejar la naturaleza autóctona, sin artificios, inspirado en los jardines del Romanticismo. Según el paisajista Waage Rasmussen, esta corriente buscaba cultivar la naturaleza idealizada y auténtica. El resultado es un jardín que invita a la relajación y que se integra perfectamente con el entorno natural del palacio.

Un reflejo de la personalidad y valores de los reyes

Más allá de la estética, esta renovación pone de manifiesto el compromiso de Mary y Federico con un estilo de vida sostenible y práctico. Mary, reconocida internacionalmente por su elegancia y buen gusto, demuestra ahora también su sensibilidad por el diseño de interiores.

La reina expresó que el proyecto es un ejemplo de innovación sostenible. Espera que sirva de inspiración para futuros proyectos tanto en Dinamarca como en el extranjero, mostrando que la modernidad puede convivir con la tradición y el respeto por el medio ambiente.

Con la reforma del anexo, la Cancillería de Fradensborg se convierte en un refugio ideal para los reyes durante la temporada de verano. Allí disfrutan de un ambiente íntimo, cómodo y conectado con la naturaleza, lejos del protocolo habitual y rodeados de naturaleza y de un diseño que combina historia, funcionalidad y belleza.