El lado más humano de Alicia y Esther Koplowitz: 'Son extraordinarias'

Alicia y Esther Koplowitz gozan de una excelente reputación entre quienes las rodean, especialmente entre todos sus empleados. Recientemente, varias de sus extrabajadoras han compartido unas emotivas declaraciones sobre sus experiencias trabajando para ellas.

“Son extraordinarias. Tendría que haber mucha gente en España como ella es”, aseguró hace unos meses una de sus empleadas en un reportaje emitido en La Sexta. 

Esta mujer, que se dedicaba a atender a Alicia y Esther Koplowitz, también dejó muy claro que estaba “muy a gusto” realizando esas funciones y trabajando para ellas.  

En cambio, otra de sus trabajadoras no pudo contener las lágrimas al recordar los años que estuvo trabajando para las aristócratas. Por otro lado, y visiblemente conmovida, relató cómo Esther la apoyó durante una enfermedad.

Tanto es así que la empresaria fue la que se encargó de llevarla a Pamplona hasta en dos ocasiones para que recibiera su tratamiento. Un gesto que esta mujer jamás ha olvidado. 

Además, la trabajadora mencionó en dicho reportaje que la hermana de Alicia le costeó sus arreglos dentales y tratamiento de varices. Mostrando así una faceta generosa y preocupada por el bienestar de sus empleados.

Alicia y Esther Koplowitz son muy queridas entre las personas que han trabajado en sus hogares

Alicia y Esther Koplowitz siempre han optado por llevar una vida discreta, resguardadas en sus lujosas mansiones. Sin embargo, en el reportaje El quinto hermano: la herencia de los Koplowitz, de Equipo de Investigación, dejó al descubierto su lado más generoso.  

En él, algunos exempleados compartieron cómo fue trabajar para las hermanas, revelando así el lado más humano de estas prominentes figuras de la sociedad española.

Esther Koplowitz, la mayor de las hermanas, tiene una residencia de aproximadamente 900 metros cuadrados y otra de más de 400 en una localidad muy cercana de Madrid. Según el reportaje, la empresaria tiene contratadas a unas 50 personas en el pueblo.

No obstante, y a pesar del gran número de empleados que tiene, la hermana de Alicia jamás se retrasó con las nóminas. Puntualidad que una de sus empleadas quiso poner en valor: “Antes de terminar el mes ya había cobrado”. 

Por otro lado, los reporteros de la Sexta que visitaron la zona pudieron comprobar en primera persona la buena relación que Alicia y Esther Koplowitz mantienen con todos sus vecinos. 

Además, un habitante de dicho municipio aseguró que este vínculo era “cordial” y “bueno”, tanto con ellos como con sus trabajadores. “Yo sé que con las señoras que están trabajando deben de tener buena relación”.