Guerra en la educación: Las seis universidades públicas de Madrid dan un ultimátum
En su nota, las universidades de Madrid aseguran vivir una crisis de "infrafinanciación" por parte de la Administración
En un momento crítico para la educación superior en España, las seis universidades públicas de la Comunidad de Madrid han levantado la voz. Concretamente, en defensa de su papel como motores esenciales del desarrollo social, económico y cultural.
En sendos comunicados emitidos tras la aprobación del proyecto de presupuestos de 2025 por el Consejo de Gobierno de la Comunidad, las instituciones académicas expresan una profunda preocupación por la creciente precariedad que amenaza su funcionamiento y su capacidad para cumplir su misión pública.
Las universidades públicas de Madrid atienden a cerca de 220.000 estudiantes y emplean a 30.000 profesionales. Según comunican, operan “en condiciones de infrafinanciación crónica”.
Según los Consejos de Gobierno, la situación se ha agravado tras la crisis financiera de 2008. Con recortes presupuestarios que aún no han sido revertidos.
Mientras otras comunidades autónomas han implementado modelos de financiación plurianuales y estrategias de recuperación, "Madrid sigue rezagada", se quejan. Destinando a sus universidades públicas una proporción del PIB regional que la sitúa a la cola de España.
El proyecto de presupuestos para 2025, aprobado el pasado 30 de octubre, refleja esta tendencia. La partida destinada a subvenciones no contempla recursos adicionales para enfrentar el impacto de la inflación. Tampoco para cubrir incrementos salariales acordados a nivel estatal, ni para cumplir con las nuevas exigencias de la Ley Orgánica del Sistema Universitario (LOSU).
Según explican, en términos reales las universidades recibirán menos fondos que en años anteriores. Profundizando un déficit estructural que compromete su sostenibilidad. Un déficit que, según las universidades, se habría agravado más en la autonomía madrileña.
Uno de los puntos más alarmantes señalado por las universidades es la congelación de la partida anual para inversiones desde 2014. Limitada a 7,6 millones de euros para las seis instituciones.
Es importante recordar que las seis universidades públicas de la Comunidad de Madrid son: Universidad Complutense de Madrid (UCM). Universidad Politécnica de Madrid (UPM), Universidad de Alcalá (UAH), Universidad Autónoma de Madrid (UAM), Universidad Carlos III de Madrid (UC3M) y Universidad Rey Juan Carlos (URJC).
Según las universidades, este presupuesto es "insuficiente para mantener unas infraestructuras que albergan diariamente a miles de personas". La falta de inversiones no solo pone en riesgo la seguridad de los usuarios. También “limita la capacidad de las universidades para modernizarse y adaptarse a las necesidades tecnológicas del siglo XXI”.
En el ámbito del personal, la situación no es menos preocupante. Las universidades han tenido que reducir la carga docente de ciertos profesores, como exige la LOSU. Algo que les deja sin poder contratar suficientes efectivos para compensar esta medida.
Esto ha generado un impacto directo en la calidad de la enseñanza y la investigación, según han comunicado. Las universidades alertan sobre la precariedad laboral, la imposibilidad de reponer jubilaciones y las limitaciones en promociones, lo que dificulta atraer y retener talento académico.
El papel “estratégico” de las universidades públicas
A pesar de las dificultades, las universidades públicas madrileñas se han mantenido “como pilares fundamentales del desarrollo regional”. Reconocidas tanto a nivel nacional como internacional por su calidad académica e investigadora.
Estas instituciones no solo forman a las futuras generaciones de profesionales. También contribuyen al progreso científico y tecnológico, la innovación y el bienestar social. Representan, en palabras de sus Consejos de Gobierno, “el motor principal del desarrollo y el ascensor social más eficiente”.
No obstante, las universidades públicas de Madrid advierten de que sin un compromiso firme por parte de la Comunidad para garantizar una financiación adecuada, este modelo está en riesgo de colapsar.
En sus comunicados, hacen un llamado a la Administración de Isabel Díaz Ayuso para que asuma su responsabilidad en la financiación del sistema universitario público. Asegurando su sostenibilidad y su capacidad de competir con otras comunidades autónomas.
Propuestas y demandas de las universidades públicas
Frente a este panorama, las universidades han planteado una serie de propuestas concretas para revertir la situación:
-Revisión de los presupuestos: Exigen que durante el trámite parlamentario se incrementen las partidas destinadas a garantizar la suficiencia financiera del sistema universitario público.
-Plan de infraestructuras: Solicitan un aumento significativo en la financiación para el mantenimiento y mejora de los edificios universitarios.
-Modelo de financiación plurianual: Piden la creación de un sistema que asegure una inversión constante y predecible, "clave para la sostenibilidad a largo plazo".
-Adaptación a la LOSU: Demandan un plan específico para autorizar y financiar nuevas contrataciones de profesorado. Sin que ello recaiga sobre las ya mermadas subvenciones nominativas.
En el comunicado, las universidades subrayan que la educación superior no debe verse como un gasto. Sino como una inversión estratégica que beneficia a toda la sociedad.
Destacan la necesidad de “un pacto social renovado que permita proteger y fortalecer la universidad pública como espacio de conocimiento, investigación y diálogo, alejado de debates partidistas que trivialicen su importancia”.
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