El Juzgado de Primera Instancia número 13 de Valencia ha rechazado la práctica de una prueba biológica a los hijos de Julio Iglesias para compararlas con el ADN del valenciano Javier Santos, que reclama ser reconocido también como hijo del cantante. Así consta en una providencia del pasado 12 de febrero en la que el juzgado deniega también volver a reclamar que el propio Julio Iglesias se someta a una prueba biológica, al haber sido ello acordado ya en una providencia del 17 de octubre del pasado año y ratificado en un auto del 21 de diciembre.

Con respecto a la realización de las pruebas biológicas a los hijos del cantante, en la resolución se indica que "no ha lugar" por "no ser estos parte en el presente procedimiento y, en tal medida, no recaer sobre los mismos carga alguna de someterse a esta clase de prueba".

Tras conocer esta decisión, el abogado de Javier Santos, Fernando Osuna, ha afirmado a Elcierredigital.com que "el no del cantante a la comparación de su ADN con el de Javier Santos es muy significativo y desfavorable para Julio Iglesias y ya es suficiente ya que esta negativa lo puede convertir en padre de Javier".

En cuanto a la negativa a que los hijos de Julio Iglesias se sometan a la prueba, Osuna afirma que "hay una prueba de ADN que confirma que Javier Santos y Julio José Iglesias son hermanos, tomado por un detective privado de forma legal”.

Javier Santos con su abogado Fernando Osuna tras presentar la demanda de paternidad contra Julio Iglesias. 

"El Juzgado le ha dado validez a esta prueba pese a que ahora no permite que Julio José Iglesias venga a hacerse la comparación de ADN con Javier Santos cuando en este tipo de juicios lo que prevalece por encima de otras cuestiones es descubrir la verdad material o la verdad científica", explica Osuna.

Las pruebas del expadrastro de Javier Santos

El 14 de febrero, Javier Santos y su expadrastro se sometieron a las pruebas de ADN solicitadas por el juez José Miguel Bort, con el fin de descartar que sean padre e hijo. Santos y el señor Sánchez acudieron para tal efecto al Hospital público de Hematología de la ciudad del Turia. Ya en los años noventa se realizó esta misma prueba en una clínica privada, pero, ante la sorpresa de muchos, el Juez Bort no le dio toda la fiabilidad. “Puede tomarse como una falta de respeto a la clínica que hizo en su día el trabajo, pero la justicia puede interpretar que es parte interesada por que al fin y al cabo quien paga es una de las partes interesadas. A la medicina pública le supone la justica mayor imparcialidad. Es como si en un juicio por asesinato ya aporto el estudio de Premio Nobel de Medicina, el juez siempre verá más imparcial al médico forense oficial sin que eso signifique que no respeta el trabajo y la seriedad del otro profesional”, declaró en ese momento Fernando Osuna a Elcierredigital.com.

En unos días se sabrá el resultado de las pruebas de ADN realizadas con lo que se retomará el mediático proceso judicial. El abogado Fernando Osuna se muestra optimista y cree que el juicio dará comiendo el próximo mes de mayo.