Las hipotecas a tipo variable que se revisen con el Euribor a 12 meses del mes de junio serán más baratas gracias a la nueva caída que ha registrado este índice de referencia que en el mes de junio ha cerrado en el -0,189%. Esta bajada es la cuarta consecutiva, pero la más importante por acelerar la caída (en su cotización diaria ha roto la cota del -0,20%) y marcar una tendencia que se profundizará en los próximos meses.
El presidente del BCE, Mario Draghi avanzó este mes que todas las opciones están sobre la mesa ante el deterioro de la situación económica en la zona euro y las numerosas incertidumbres, incluida la reactivación de las compras de deuda y nuevas rebajas de tipos de interés. Su efecto en el mercado ha sido arrollador y, en paralelo a las caídas de las rentabilidades de los bonos, el euríbor ha profundizado su descenso en terreno negativo.
Pero estas buenas noticias para los que ya tienen hipotecas no se trasladan a los nuevos préstamos. Todo lo contrario, las nuevas hipotecas son cada vez más caras, que como ha señalado el Banco de España, coincide con el arranque de la Nueva Ley Hipotecaria,
Cómo sacan partido los bancos de una circunstancia beneficiosa para el consumidor
Esta tendencia de subida de precio ya la ha denunciado el Banco de España. Según el máximo regulador de las entidades financieras “entre septiembre de 2018 y abril de este año, los tipos de interés medio aplicados a los nuevos préstamos para la compra de vivienda han aumentado en 30 puntos básicos. Este incremento no se ha observado en el resto de los segmentos en España, ni en el de la compra de vivienda en otros países de nuestro entorno”.
Aunque esta afirmación ha sido contestada por la ministra de Economía, Nadia Calviño, que ha considerado que es “arriesgado” establecer una relación de causalidad entre nueva Ley Hipotecaria y la subida de tipos, elcierredigital.com ha podido comprobar, analizando entre 41 hipotecas comercializadas en el mes de junio, las tres formas en las que se están encareciendo este tipo de préstamos:
- Mantener (o subir) los tipos de interés: A pesar de la bajada de tipos, 8 de cada 10 hipotecas mantienen los tipos de interés, solo un 15% los baja e incluso un 5% los sube, lo que genera una mejora de margen a pesar del claro cambio de tendencia.
- Subir comisiones: Aunque con la nueva Ley Hipotecaria solo se puede cobrar una comisión única de apertura o estudio, esta ha subido en un 30% de los casos, se mantiene en un 62% y solo baja en un 8%.
- Las hipotecas más baratas, las que exigen más vinculaciones: Otro punto de la Ley Hipotecaria es que las entidades tienen que ofrecer al cliente siempre una hipoteca que no obligue a la contratación de ningún producto y si lo desea, otra oferta en la que se bonifica el tipo de interés, pero con la contratación de productos.
En la actualidad la diferencia de interés entre la que obliga contratar y la que no se ha disparado hasta una media del 0,57%. Es decir, para conseguir mejores tipos hay que domiciliar nómina, contratar seguros, tarjetas, planes de pensiones, etc.
Parece claro que con las hipotecas se cumple el principio de que “la banca siempre gana”.