El hombre fue abatido de 26 disparos con un rifle de asalto cuando se disponía a entrar en el garaje de su casa, situado en una conocida urbanización de Marbella. Con este son ya 20 los crímenes de sangre registrados en lo que va de año en la Costa del Sol. Todo apunta a que se trata de un nuevo ajuste de cuentas, que supondría el octavo, además de los 38 intentos de homicidio en este 2018.

Según el balance de criminalidad del último trimestre (enero-septiembre) que realiza el Ministerio del Interior, los homicidios y asesinatos han crecido un 87 por ciento en esta zona del sur de España con respecto al año 2017. Hasta septiembre se habían cometido 15 asesinatos comprendidos entre los municipios de Fuengirola y Marbella, indicios que apuntan al crimen organizado.

Los datos incluidos en las estadísticas del Ministerio del Interior recogen el secuestro de un ciudadano de origen sueco al que torturaron hasta la muerte el pasado 14 de agosto en la localidad de Mijas. La Policía encontró el escenario del crimen lleno de sangre y salpicaduras con los restos de la víctima.

El 'Maradona' de la cocaína

En el mes de mayo también se produjeron tres crímenes a sangre fría, como el del asesinato de David Ávila, alias el ‘Maradona’ de la cocaína, un conocido narco de 36 años de edad al que tirotearon cuando salía de la parroquia Virgen del Rocío de San Pedro de Alcántara, en Marbella, tras celebrar la comunión de su hijo.   

David y su familia se subieron al un vehículo Audi A3, cuando de repente un sicario con un casco se acercó al coche, rompió la ventanilla del conductor con la culata de una pistola y disparó a ‘Maradona’ cinco veces. Tres disparos fueron en la cabeza, uno le impactó el pecho y otro en el hombro. Tras acribillar al narco se dio a la fuga. Sus hijos se encontraban en el interior del coche y presenciaron toda la escena. La hija iba sentada encima de su mujer y su hijo se encontraba en la parte de atrás. Según contó ABC, David Ávila debía 400 kilos de cocaína a un cartel colombiano.

Un tiempo atrás ya había recibido avisos por parte de sus enemigos, como cuando prendieron fuego al gimnasio de artes marciales que regentaba en Marbella.

Persecuciones y explosiones

Entre los sucesos violentos ocurridos en la Costa del Sol este año, no está incluido en los balances de criminalidad la muerte de un joven, tras una persecución a tiros en Estepona por cuatro individuos el pasado 3 de octubre. Al alcanzarlo lo metieron en un todoterreno y su cuerpo apareció un par de horas más tarde cerca del hospital de Algeciras. Se trataba de Brian Martos Carmona, un hombre de etnia gitana nacido en Valencia, con antecedentes por tráfico de drogas y muy conocido en este mundillo.

Un empresario magrebí, presuntamente relacionado con el 'Maradona' de la cocaína sufrió el ataque en dos de sus locales. A finales de octubre, se produjeron dos explosiones: la primera frente a la urbanización Mirador de la Alquería del municipio de Benahavís y la segunda en un polígono industrial de San Pedro de Alcántara, situado en Marbella, ambas en las naves propiedad de dicho empresario

Hamza Ziani, el narco experto en explosivos

En octubre también ocurrió un asesinato sangriento en las calles malagueñas de Torremolinos. El 27 de octubre un joven holandés fue abatido cuando cenaba en un restaurante de esta localidad. El fallecido era Hamza Ziani, un narco con bagaje internacional y experto en explosivos que había sido detenido varios días antes de su asesinato por su relación con un artefacto que fue detonado por los Tedax. Ziani, según la Policía Nacional, pertenecía a una organización criminal que usaba los explosivos contra los miembros de las bandas rivales.

En su casa había coches de alta gama, dinero en metálico un subfusil, tres pistolas y munición.

El crimen organizado parece haberse adueñado de la Costa del Sol y cada vez es más frecuente que se produzcan ajustes de cuentas en mitad de la calle e incluso a plena luz del día. Una situación cada vez más insostenible para muchos de los ciudadanos de esta comarca malagueña.