Este lunes, los agentes de la Policía Nacional de Palma atendían la llamada de un hombre de 43 años que solicitaba sus servicios porque su mujer, de 29 años y nacionalidad guineana, le había echado de casa. Una situación aparentemente surrealista pero cuyo trasfondo escondería un presunto delito de malos tratos en el ámbito doméstico.

De hecho, según relata el digital Última Hora, la mujer, tras mantener discusiones muy acaloradas con su pareja, habría decidido echarle de casa y no dejarle entrar. Para ello, habría supuestamente recurrido a la agresión, propinándole empujones, lanzándole cubos de agua o mojándole el colchón para que no pudiera descansar. En este sentido, el hombre contó a los agentes que recientemente había presentado dos denuncias por los insultos y golpes que recibía por parte de su pareja. Además, indicó que dos semanas atrás había recibido un empujón que casi le hace caer por las escaleras.

Un coche de policía. 

Ante tal situación, el hombre llamó al 091 y una patrulla se personó en el domicilio de la pareja. Allí, los agentes de Seguridad Ciudadana se entrevistaron con el hombre, que relató que llevaba dos días fuera de casa ya que su pareja le había echado hasta en dos ocasiones.

Preguntada por la disputa, la mujer, en un primer momento, negó los hechos, alegando que no existía ningún problema y que todo era fruto de la imaginación de su pareja.

Los agentes abandonaron el lugar. Sin embargo, minutos más tarde una nueva llamada alertaba de la misma situación y, en esta ocasión, la mujer, supuestamente, habría recibido a las policías en actitud más agresiva, llegándose a producir momentos de tensión entre ella, los agentes y su pareja.

En vista de los hechos, los agentes procedieron a su detención como presunta autora de un delito de malos tratos en el ámbito doméstico, y la UFAM de la Policía Nacional se ha hecho cargo de la investigación. La mujer ha pasado a disposición judicial.