El niño de cuatro años fallecido la tarde del martes en Azpeitia fue víctima de un acto homicida, según las primeras investigaciones realizadas por la Ertzaintza, policía autonómica vasca, y las pruebas practicadas por los médicos forenses del Instituto de Medicina Legal de Donostia.

Todo apunta a que fue la madre del menor la que puso fin a su vida, en medio presuntamente de un brote de enajenación mental. La mujer se autolesionó posteriormente, siendo operada en el Hospital Donostia, donde permanece en la UCI, aunque no se teme por su vida, según publicó ayer el Diario Vasco.

El niño fue encontrado sin vida en una bañera de la vivienda, mientras que la madre permanecía escondida en un trastero. Los investigadores de la Policía se encuentran a la espera de de conocer los resultados de la autopsia para formalizar una acusación más elaborada.

El suceso tuvo lugar en torno a las seis de la tarde, en el caserío Basabe situado a la entrada del municipio procedente de Lasao. A esa hora, el centro de coordinación de emergencias recibió una llamada en el teléfono 112 en la que se informaba de la crítica situación en la que se encontraba el menor.

Efectivos de la Ertzaintza así como sanitarios de una unidad medicalizada se personaron en el lugar de los hechos y prestaron al niño las primeras atenciones. El personal médico sometió al menor a diversas maniobras de reanimación. Todos los esfuerzos, sin embargo, resultaron inútiles.

Al lugar se desplazaron asimismo el médico forense que efectuó una primera exploración al cuerpo del niño, así como de la escena de los hechos, una labor que se alargó hasta entrada la madrugada. Después el cadáver fue trasladado al Instituto de Medicina Legal de Donostia, donde este miércoles por la mañana se le está practicando la autopsia, adelantaba el Diario Vasco.

Agentes de la Ertzaintza de la comisaría de Azkoitia se personaron en el lugar del suceso y llevaron a cabo las primeras diligencias para el esclarecimiento de la muerte del menor. En el marco de estas investigaciones, los agentes recabaron datos sobre lo que pudo haber acontecido de las personas que en el momento del suceso se encontraban en el lugar.

El suceso ha generado gran consternación en esta localidad del Urola. Este miércoles, el Ayuntamiento de Azpeitia ha mostrado su solidaridad con familia y allegados del menos al tiempo que ha pedido que se eviten «especulaciones y rumores» sobre estos hechos.

Ayuntamiento de Azpeitia.

La alcaldesa, Nagore Alkorta (EH Bildu) ha manifestado, en un comunicado, que se trata de «un momento duro para todos» y al mismo tiempo ha ofrecido a la familia todos los medios técnicos y humanos para que sientan el máximo respaldo. La alcaldesa ha pedido que se «deje trabajar» a la Ertzaintza y ha reclamado «respeto» en nombre del Ayuntamiento, de la familia y de la dirección de la ikastola Karmelo Etxegarai. "Dejemos a un lado las especulaciones y los rumores en estos duros momentos porque no hacen bien a nadie, sino que hacen daño", dijo la primera edil.