Mientras el resto de funciones relacionadas con la restauración se han ido profesionalizando, la de camarero mantiene formatos tradicionales.  Recepción de  hoteles, cocineros.... las escuelas de hostelería y cocina han profesionalizado el sector lo que ha influido en la mejora del servicio y la atención al cliente. Por ello, ya el año pasado, el Gobierno balear planteó exigir a los camareros una titulación para desarrollar su trabajo.

Algunos centros ofrecen formación a camareros en cursos especializados que rondan los 1.000 euros

La necesidad de  profesionalizar el sector respondía también a la propuesta  de una asociación de restauración, que deseaba garantizar en los bares de la región  un buen servicio. De hecho, el turismo es uno de los motores de su economía. Numerosos empresarios exigen altos niveles de calidad a sus trabajadores porque es lo que quieren ofrecer a sus clientes y en lo que pretenden diferenciarse de la competencia.

Algunos jóvenes acaban en la hostelería y abandonan sus estudios. 

El Gobierno balear tampoco   vio mal  la propuesta de pedir titulación a los camareros, ya que esta iniciativa también serviría para que  muchos jóvenes dejaran de considerar la hostelería como un sector en el que pueden abandonar sus estudios. Son pocos los que una vez metidos en este tipo de trabajo pueden continuar con sus estudios, debido a las horas y esfuerzo que requiere el servicio de hostelería.

En los últimos años hay una especial atención y concienciación de que el turismo es un recurso económico al que se le deben dedicar esfuerzos. Por ello, es posible que cada vez más establecimientos comiencen a exigir cierta preparación o estudios a sus camareros. Existen ya en el mercado cursos especializados y diferenciados del resto de formación de hostelería. Cursos que oscilan entre los 1.000 y 1.500 euros para acreditarse como camarero.