El cómico Dani Mateo se ha negado a declarar este lunes ante el juez de Instrucción número 47 de Madrid, después de que este admitiera el pasado viernes una denuncia interpuesta por la organización Alternativa Sindical de Policía.

Este sindicato policial acusaba al humorista por una "ofensa a España, sus símbolos y, por ende, a toda la sociedad democrática", tras un sketch donde Mateo se sonaba la nariz con la bandera de España en el programa de La Sexta, El Intermedio.

El colaborador del programa dirigido por el Gran Wyoming, ha tomado la opción de no declarar. "Como ciudadano de este país estoy preocupado porque estamos llevando a un payaso ante la Justicia por hacer su trabajo y eso me preocupa por la imagen de mi país y mi bandera", indica Dani Mateo. Además, ha señalado que durante todo este tiempo "se ha hablado mucho sobre los límites del humor" y "sobre si ofende o no, el sketch".

Dani Mateo antes de entrar

Antes de entrar al juzgado y no declarar, si que ha manifestado a los medios de comunicación  que ahora "toca callar y escuchar lo que la Justicia tiene que decir. Estábamos en el terreno de la opinión, ahora estamos en el terreno de la Justicia y toca callar y escuchar (…) Como ciudadano de este país, estoy preocupado porque estamos llevando a un payaso ante la Justicia por hacer su trabajo, y eso me preocupa por la imagen de mi país, y de mi bandera".

Dani Mateo se lo ha tomado con humor

A la llegada al juzgado, el humorista ha puesto una foto en Instagram donde sale el personaje de Los Simpson 'Krusty', en un capítulo donde el payaso de la serie fue a juicio acusado de atracar la tienda regentada por 'Apu' llamada 'El Badulake'.

Krusty en el juzgado | Instagram de Dani Mateo

Dani Mateo ha sido citado como investigado por la supuesta comisión de un delito de ofensas o ultraje a símbolos de España o sus Comunidades efectuado con publicidad, correspondiente al artículo 543 del Código Penal, y un delito de odio, correspondiente al artículo 510.

Tras la polémica creada, El Intermedio pidió disculpas durante una de sus emisiones. "No hubo intencionalidad política ni ningún posicionamiento editorial detrás, era simplemente humor", señaló Wyoming. El presentador del programa indicó que si "la broma no ha funcionado" al generar "crispación social en vez de provocar risa" es evidente que se trata de un "gag fallido".