La intervención de Bankia fue "una decisión absolutamente política", señaló durante la segunda sesión de juicio, del miércoles, Rodrigo Rato, expresidente de la entidad. "A mí me echó el presidente del Gobierno",  insistió en referencia a Mariano Rajoy, que era el presidente del gobierno, cuando la entidad bancaria fue intervenida por el FROB.

Asimismo, a preguntas de la fiscal Carmen Launa, Rodrigo Rato explicó que la salida a Bolsa de Bankia en julio de 2011 se realizó con un importante descuento en el precio de las acciones, porque el objetivo prioritario de la entidad era salir a Bolsa antes de septiembre para evitar la nacionalización.

Rodrigo Rato, durante su comparecencia en el juicio.

En su defensa, Rato ha insistido en que el Banco de España no parecía preocupado por el precio de las acciones sino por la salida a Bolsa antes de una determinada fecha. "El mensaje del Banco de España y de la vicepresidenta, que era la que mandaba en el Gobierno y la que tenía influencia sobre nosotros era tenéis que salir antes de septiembre", aseguró durante el interrogatorio de la Fiscal. Rato también añadió que el Fondo de Reestructuración de Ordenación Bancaria (FROB) estuvo de acuerdo en que era mejor salir a Bolsa a un precio más barato que no hacerlo. 

Un agujero de 5.000 millones de euros

La fiscal también leyó un correo de un inspector del Banco de España, José Antonio Casaus Lara -exjefe de la Inspección de la entidad- en el que tras reunirse con el interventor de Bankia, Sergio Durá, afirmó: "A ver quién es el guapo que le manda una carta al FROB diciendo que hay un agujero de 5.000 millones". La fiscal insistió: "Parece que el problema sí existía, que sí había incidencia". 

El tribunal decidió el pasdo martes mantener a todas las acusaciones, populares y particulares en el caso, y a los acusados, que son 34, tres personas físicas 31 gestores. De momento, formalmente la Fiscalía solo acusa del delito de estafa a inversores al que fuera presidente de Bankia, Rodrigo Rato, al ex consejero delegado de la misma entidad, Francisco Verdú y a los consejeros José Manuel Fernández Norniella y José Luis Olivas, aunque durante el acto de juicio puede ampliar sus acusaciones a otros implicados.