Según ha informado El Correo, la motosierra fue comprada por internet a un comercio dedicado a la venta de herramientas de trabajo en febrero de este año, el mismo mes que desapareció Jesús Mari. A pesar de que los agentes vinculan esta herramienta al crimen no ha trascendido si la compra la hizo la propia sospechosa u otra persona.

María del Carmen fue detenida y enviada a prisión provisional comunicada y sin fianza el pasado septiembre después de que una amiga encontrara la cabeza de su marido en una caja que ella misma le había entregado unos meses atrás. Ésta le dijo que contenía juguetes eróticos. Desde entonces, el caso permanece bajo secreto de sumario.

La detenida pidió a su vecina que le guardara esa caja por pudor, ya que no quería que la Guardia Civil la encontrara en el registro de su domicilio, puesto que los agentes estaban investigando la desaparición de su pareja. María del Carmen, de 61 años y nacida en Utrera (Sevilla), tiene antecedentes por dos estafas cometidas en 2013 y 2017.

Imagen del crimen de Castro Urdiales.

Esta hipótesis se refuerza tras el estudio de las cuentas económicas de la mujer, donde aparecieron unos datos elocuentes para la Guardia Civil: la detenida retiró 12.000 euros en los días posteriores al momento de la muerte de Jesús Mari.

Pero ese dinero no habría sido extraído de sus propias cuentas, sino de las de su marido, a las que ella tenía acceso. Precisamente, la propia Mari Carmen explicó a los agentes en el momento que se inició la investigación por su desaparición que él se había marchado con ese dinero: "Se fue de vacaciones y, al volver a casa, cogió 12.500 euros y se marchó".

El primo de Jesús fue quien denunció en marzo no conocer su paradero. Entonces comenzaron las investigaciones de los agentes, que acudieron a la casa donde María del Carmen residía con él y, sin rastro del desaparecido, ella misma les aseguró que se había ido voluntariamente: "Se ha ido de casa porque ya no me quería".

Otro de los interrogantes a los que se enfrenta la Guardia Civil en esta investigación es saber por qué Mari Carmen pudo acabar con la vida de Jesús. En esa investigación la Benemérita baraja que la detenida pudo matarle porque éste quería dejar la relación con la mujer.

La Guardia Civil también investiga si la acusada pudo tirar a la basura el resto del cuerpo de Jesús y es que la asistenta de la pareja declaró, antes de que apareciera el cráneo, que ayudó a Mari Carmen a tirar unas bolsas "pesadas y opacas".