La Policía Nacional, en colaboración con otros organismos internacionales como la DEA, autoridades togolesas y el Centro Operativo Internacional de Análisis de Inteligencia Marítima para los Estupefacientes (MAOC-N), han incautado en nuestro país un cargamento de 4,5 toneladas de cocaína que viajaba en un carguero procedente de Colombia y con destino Beirut. 

El carguero, de nombre Orion V, portaba bandera de Togo y contaba con 28 personas en la tripulación de diferentes nacionalidades que han sido detenidas, según fuentes de la investigación. 

Parte del material incautado.

En esta operación desarrollada en aguas internacionales, cerca de las Islas Canarias, han descubierto, además de las 4,5 toneladas de cocaína, un elevado número de cabezas de ganado, que podrían haber sido la carga inicial de la embarcación a la que se sumó la cocaína en ruta. La droga había sido escondida entre los silos de pienso de las 1.750 vacas.

Una vez detenida, la embarcación fue conducida hasta el puerto de Las Palmas de Gran Canaria.

Críticas recibidas por esta práctica

La congresista Andrea Padilla, miembro del Partido Verde, llama a estas embarcaciones “barcos de la muerte” y se alza como voz de los animalistas que rechazan este tipo de comercio con las reses que, según ellos, está en alza entre el país y África o Asia. Asegura que en estos viajes los animales son maltratados y muchos mueren antes de llegar al destino. Según declaró a la revista colombiana Semana, "los animales van muriendo por el camino y los van arrojando al mar".

El aprovechamiento de este negocio comercial entre continentes para mover droga internacionalmente añade más polémica a este asunto. 

Andrea Padilla

Por su parte  el presidente de la federación colombiana de ganaderos José Félix Lafaurie, criticó duramente dichas acciones, argumentando la mala imagen para los diferentes negocios del país, la merma de confianza por parte de los mercados internacionales y la posibilidad de pérdida económica del sector, en su desarrollo comercial. “El país está lleno de cocaína”, “todos los sectores exportadores están en riesgo”, declaró. Estas palabras demuestran las dificultades del país para implantar un sistema de observación y rapidez que evite la comercialización y distribución de los cargamentos de cocaína.

El Orión V, ya había estado en el punto de mira en otras ocasiones, debido a las mismas cuestiones, sin embargo, este buque de transporte, ha realizado numerosos viajes transportando diversas mercancías y hasta ahora nunca había sido detenido por encontrarse en su carga esta sustancias estupefacientes.

La buena comunicación entre los distintos países implicados ha llevado a la detención de los 28 tripulantes. En cuanto al ganado, no ha trascendido que se va a hacer con él aunque posiblemente sea sacrificado por cuestiones sanitarias.