Lonnie David Franklin Jr nacido el 30 de agosto de 1952 en California, se convirtió en uno de los asesinos en serie más temido por la población estadounidense, concretamente por los habitantes del sur de Los Ángeles. Durante más de veinte años sembró el terror en la ciudad ya que acabó con la vida de diez mujeres entre 1985 y 2007. Debido al parón de 14 años que hizo en el mundo del crimen, Franklin fue apodado como “Grim Sleeper” o “El dormilón macabro”.

La mayor parte de su vida estuvo trabajando como basurero, por lo que muchos de los cuerpos de sus víctimas aparecieron escondidos entre restos de basura, aunque otros se encontraron en carreteras. Sus crímenes tuvieron como objetivo mujeres negras y pobres de la zona que eran prostitutas o estaban enganchadas a las drogas, razón por la que algunos piensan que los medios de comunicación no le dieron importancia al caso. En sus crímenes siguió el mismo modus operandi: Las disparaba o estrangulaba, las violaba y posteriormente se deshacía de los cadáveres arrojándolos a diferentes lugares.

Lonnie Franklin Jr después de ser detenido por las autoridades estadounidenses

“Grim Sleeper” como también es conocido, fue el autor de una oleada de asesinatos que se produjeron, primero entre 1985 y 1988 y después desde 2002 hasta 2007. La mayoría de los crímenes los llevó a cabo en Inglewood, una ciudad cercana a Los Ángeles y también en los alrededores. Su primera víctima fue Debra Jackson de 29 años, que fue asesinada el 10 de agosto de 1985, su último crimen lo cometió el 1 de enero de 2007 al asesinar a Jenecia Peter, de 25 años. Todas las chicas a las que le quitó la vida eran jóvenes, ya que tenían entre 15 y 35 años. 

Lonnie Franklin mantuvo a la policía estadounidense en vilo durante 22 años pero tras muchas investigaciones que apuntaban que el autor de los hechos era una sola persona, las autoridades le detuvieron en 2010 por evidencias genéticas, después de comparar su ADN con el encontrado en las escenas del crimen y además también se le vinculó por evidencias balísticas. En 2016 se celebró el juicio en el Tribunal de Los Ángeles que duró tres meses. Los fiscales defendieron que Franklin estaba vinculado a otros cinco asesinatos y los investigadores, por su parte, expusieron que creían que era responsable de al menos 25 muertes. Cabe destacar que también se le acusó de intentar asesinar a otra mujer que logró salvarse, Enietra Washington, que declaró como testigo en el juicio.

Lonnie Franklin durante el juicio

Finalmente fue sentenciado a pena de muerte por el asesinato de 10 mujeres  y cumplía condena en la Prisión de San Quintín, al norte de California. “El dormilón macabro” estaba en el corredor de la muerte pero su sentencia nunca había sido ejecutada por orden de Gavin Newsom, el gobernador de Estado de California. 

Lonnie Franklin nunca llegó a cumplir su condena porque fue hallado sin vida el pasado 28 de marzo en su propia celda. Según informaron los operarios de la prisión su cuerpo no tenía signos de violencia.

Las autoridades estadounidenses comunicaron que se le practicaron primeros auxilios y que al ver que no respondía llamaron a una ambulancia, pero el médico tampoco pudo hacer nada por su vida, por los que 20 minutos después de que los operarios de la cárcel lo encontraran, se le declaró muerto. A día de hoy se desconocen todavía las causas reales de su muerte.