La Enfermedad Hemorrágica Epizoótica (EHE) es una afección de origen vírico que está presente en España desde septiembre de 2022, cuando se encontraron casos en el suroeste peninsular, según la información del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA). Desde entonces se ha llevado a cabo un seguimiento para controlarla.

La EHE es una enfermedad vírica infecciosa no contagiosa que se transmite a través de una clase de mosquitos (Culicoides spp.) y puede afectar, además de a rumiantes domésticos, a diferentes especies de cérvidos silvestres, entre ellos a los ciervos, gamos y corzos, como explica el Ministerio.

Corzo

En el ganado vacuno la enfermedad puede producir “clínica moderada y autolimitante durante unas dos semanas”. Por su parte, el ganado ovino es susceptible a la infección, pero poco a la enfermedad clínica, y el caprino es muy poco susceptible a la infección.

La primera alarma saltó con la confirmación de la presencia del virus de la EHE en tres ciervos del municipio de El Pedroso, provincia de Sevilla, el 14 de julio. Seguidamente, se notificaron a los servicios veterinarios ciertas mortalidades de ciervos en cotos, por lo que se abrió la investigación y el seguimiento sobre el posible impacto de la enfermedad en estas especies.

Para ello, el MAPA mantuvo una reunión con técnicos del Instituto de Recursos Cinegéticos (IREC), del sector cinegético (ARTEMISAN) y de las comunidades autónomas primeramente afectadas por la enfermedad (Andalucía, Extremadura y Castilla-La Mancha). Y se estableció un sistema de seguimiento de la EHE para los próximos meses en las poblaciones de cérvidos silvestres.

Además, como indica el Ministerio, “ante la situación epidemiológica actual se ha acordado la recomendación de no realizar movimientos de ciervos desde los cotos localizados dentro de las zonas actualmente afectadas”.

Zonas afectadas primeramente por la enfermedad / Foto: Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación

Una vez iniciado el proceso de investigación, la enfermedad comenzó a extenderse por la península y, paralelamente, el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación también empezó a informar de las actualizaciones. La primera de ellas tuvo lugar el 17 de julio.

En apenas 4 días, el Laboratorio Central de Veterinaria (LCV) de Algete confirmó 8 nuevos casos de enfermedad hemorrágica epizoótica (EHE) en las comarcas de Valle del Guadiato (provincia de Córdoba), Olvera (provincia de Cádiz), Zafra, Herrera del Duque, Castuera y Jerez de los Caballeros (provincia de Badajoz), Cáceres (provincia de Cáceres) y Almadén (provincia de Ciudad Real).

A modo de reacción se implementaron restricciones de movimiento intercomunitario con los animales procedentes de la zona afectada. Además, el Ministerio explica que, en referencia a los movimientos nacionales, “los animales y vehículos deben estar desinsectados para movimientos desde la zona afectada hacia zona libre, con ausencia de sintomatología en ganado bovino”.

Nuevas zonas afectadas por la enfermedad / Foto: Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación

En las actualizaciones sucesivas, publicadas los días 24 y 31 de julio, se reflejó el progresivo aumento de los casos de enfermedad hemorrágica epizoótica (EHE). Nuevas zonas como Sevilla, Toledo, Albacete, Huelva y Jaén entraron en el mapa de afectados.

Las restricciones de movimiento se mantuvieron, pero en el mensaje del Ministerio se mencionó que no se establecía ningún tipo de restricción con relación al movimiento o consumo de productos de estos animales (carne, leche, piel, etc.).

Nuevas zonas afectadas por la enfermedad / Foto: Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación

El 7 de agosto se publicó el comunicado más reciente sobre la situación de avance. En este caso, observamos que la enfermedad continúa expandiéndose hacia el norte de España. El Laboratorio Central de Veterinaria (LCV) de Algete confirmó 8 nuevos casos en las comarcas de Linares (provincia de Jaén), Puebla de Guzmán (provincia de Huelva), Valdepeñas, Villanueva de los Infantes (provincia de Ciudad Real), Mora, Oropesa (provincia de Toledo) y Ledesma (provincia de Salamanca).

La ubicación de estos nuevos focos implicó modificar la zona desde la que se restringe el movimiento, subiendo el límite hasta entrar en Castilla y León. El Ministerio todavía descarta establecer “ningún tipo de restricción con relación al movimiento o consumo de productos de estos animales (carne, leche, piel, etc.)”.

Control de la enfermedad

Como explica el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación en su ficha de la enfermedad hemorrágica epizoótica (EHE), los cérvidos que manifiestan signos clínicos de la infección pueden presentar fiebre, debilidad, inapetencia y pérdida del instinto de huida. En casos menos agudos puede observarse adelgazamiento.

La mortalidad constatada hasta el momento en ciervos “es moderada y no explosiva, siendo de alrededor de un 3 a 4 por ciento”, afirma. Además, es posible encontrar abortos tardíos, problemas durante el parto, y mortalidad de gabatos recién nacidos asociados a la infección de hembras gestantes.

Ciervos

El virus de EHE pertenece a la familia Reoviridae, género Orbivirus, y comparte muchas características morfológicas y estructurales con los otros miembros del género, especialmente con el virus de la lengua azul. Su periodo de incubación va desde los 2 hasta los 10 días.

Con todo ello, es una enfermedad “de declaración obligatoria de acuerdo con lo establecido el Reglamento de Ejecución (UE) 2020/2002 de la Comisión, de 7 de diciembre de 2020, por el que se establecen normas de desarrollo del Reglamento (UE) 2016/429 del Parlamento Europeo y del Consejo relativas a la notificación a la Unión y al envío de informes a la Unión sobre enfermedades de la lista”.

Actualmente no existen vacunas autorizadas en la Unión Europea para controlar la enfermedad, pero se recomienda emplear insecticidas y repelentes en animales, medios de transporte e instalaciones, así como en las posibles zonas de cría.

Para garantizar una desinsectación eficaz, explica el MAPA, es necesario “usar un insecticida que sea efectivo frente al vector en cuestión”, es decir, productos comerciales registrados en el Registro de Entidades y Productos Zoosanitarios del MAPA y en el Registro de Plaguicidas no Agrícolas y Biocidas del Ministerio de Sanidad.