Durante estos días hasta 700.000 árboles están siendo retirados de las calles y los parques de Madrid, dañados o caídos como consecuencia del temporal Filomena. Cientos de camiones los están trasladando al Vertedero Municipal de Valdemingómez para ser incinerados.  Mientras, a escasos 400 metros, malviven estos días sin luz para calentar alimentos, ni calefacción, los habitantes de la Cañada Real, una población muy desfavorecida con más de 2.000 niños, muchos de ellos bebés.

Por ello Fundación Madrina ha solicitado oficialmente al alcalde de Madrid que esta leña sea donada a los residentes de la Cañada Real, para que las familias puedan utilizarla para poder calentarse en estos días tan gélidos. Hasta ahora, la leña la estaban comprando como podían y las bombonas de gas entregadas por la Fundación Madrina se están consumiendo con rapidez, debido a las frías temperaturas que estamos soportando estos días.

               Entrega de víveres en la Cañada Real.

Así mismo Fundación Madrina entregó el pasado viernes agua y alimentos a las familias de la Cañada Real, cuyas tuberías se han congelado y ya no pueden disponer tampoco de agua corriente.

Por otro lado, la Fundación, que continúa con su labor humanitaria, solicita la colaboración de todos para reponer el Banco del Bebé que ha quedado vacío, a fin de poder seguir entregando a miles de niños y madres alimentos, mantas y material de invierno, bombonas y estufas y también para las miles de familias que tienen pobreza energética porque no pueden pagar la calefacción.