A pesar de las circunstancias, la cantidad de envíos se ha visto reducida debido al miedo generalizado de realizar una compra de productos que hayan podido estar expuestos al virus.

Una de las prácticas más comunes para reducir el contagio es dejar los productos en la puerta para evitar el contacto con el cliente y que sea este mismo quien tome las precauciones necesarias al momento de recoger su pedido. Las empresas ya no están solicitando la firma del cliente y se recomiendo pagar con tarjeta para evitar la circulación de papel moneda. Como medida especial están dotando a los trabajadores desinfectante, guantes y otros materiales para evitar que manipulen los productos del consumidor lo menos posible y acatar las recomendaciones del Ministerio de Sanidad y al OMS.

Con respecto a las condiciones de transporte, la directora de Seguridad Alimentaria del Govern, Margalida Buades, explica que “la comida preparada tiene que ser introducida en recipientes limpios, estancos y elaborados con material permitido para uso alimentario; así como introducirse en contenedores limpios, estancos, de fácil limpieza y desinfección, y capaces de mantener la temperatura adecuada durante el transporte y hasta que llegue al consumidor. Una vez que llegue al consumidor, este tiene que introducirlo en el refrigerador o congelador, según el caso, y/o calentarlo y consumirlo en el menor tiempo posible”. Es importante señalar que en los envases de cartón el virus puede permanecer hasta un día entero según National Geographic.

Muchos de estos repartidores no pueden dejar de trabajar debido a su situación económica

El peligro del repartidor es casi nulo siempre y cuando mantenga las distancias de seguridad. Mientras la población de a pie se mantiene en cuarentena, las posibilidades de contagiarse como repartidor son escasas debido a que el contacto con posibles infectados se reduce. Según Margalida Buades la comida en sí tampoco es un factor de riesgo: “si la comida servida a domicilio se ha elaborado y transportado de acuerdo a las buenas prácticas de higiene no tiene porqué ser insegura”, explicó.

Se disparan las entregas

Por el lado de los consumidores la cuarentena parece haber disparado las entregas a domicilio, ya que las plataformas de pedido online de muchas empresas se encuentran ahora mismo saturadas y para hacer frente a la creciente demanda se han tenido que expandir las plantillas y ofrecer indemnizaciones de 14 días a los trabajadores que resulten contagiados en el ejercicio de sus funciones.

Los repartos a domicilio se siguen realizando durante el coronavirus

En cuanto a las categorías de “parafarmacia” de distintas plataformas de envío a domicilio, se ha optado por suspender los costes de envío con el fin de instar al consumidor a que siga ordenando de manera regular y pueda garantizar que los que sufren de alguna dolencia mantengan su suministro de medicamentos siempre cubierto.