El círculo más cercano a Miguel Ángel Gil Marín ha tomado el control del Real Zaragoza y ha colocado a algunos consejeros, como Mariano Aguilar, exfutbolista del Atlético de Madrid, Marbella, Leganés, Getafe, Racing, Fuenlabrada, Manchego o Cádiz CF. 

Aguilar va a tomar los mandos deportivos del Real Zaragoza junto al también consejero 'gilista' Emilio Cruz y al nuevo director deportivo del club maño, Fernando López, recién fichado para sustituir en el cargo a Raúl Sanllehí tras haber dirigido una franquicia colchonera (el Atlético Ottawa). 

Aguilar es propietario del Club del Deportista, que nació en 2004 y, según palabras del consejero, "es una agencia de marketing, absolutamente vinculada a la industria del fútbol, en la que hacemos muchísimas cosas: activaciones de patrocinios, relación con los jugadores, trabajamos con LaLiga en España… Hacemos muchísimas cosas relacionadas con los jugadores y las empresas. somos el vínculo y el nexo de unión entre ellos". 

"Nació teniendo en cuenta las necesidades que tenía yo en ese momento como futbolista, que no estaban satisfechas. Y cuando me retiré, empecé a trabajar en una empresa de representación y lo propuse: que había un vacío en el negocio del fútbol, en el de la representación en este caso, que era cuidar de los jugadores, pero cuidar de verdad, estar pendiente de lo que necesitaban en su día a día. Creamos juntos la compañía, luego me independicé y emprendí el camino solo. Y así fue el inicio de esta maravillosa aventura", aseguró. 

Mariano Aguilar y el 'caso Doyen'

El investigador Luis Serrano explica que Mariano Aguilar es consejero del Real Zaragoza, exjugador del Atlético de Madrid y apoderado mancomunado de Alianza Sport (que es una empresa cuyo objeto social principal es la representación, de deportistas y los derechos de imagen de deportistas) y administrador único de Identity People Business, dedicada a la representación de deportistas. 

Aguilar está salpicado por el caso judicial que afecta a Doyen Sports, que es el fondo de inversión deportivo de Doyen Group, propiedad al 80% del kazajo Malik Alí, quien se hizo rico en plena desintegración de la URSS e invirtió en EEUU. 

Según Serrano, el exjugador del Atlético de Madrid y consejero del Real Zaragoza Mariano Aguilar López es uno de los principales investigados por el 'caso Doyen', un proceso iniciado por el Juzgado Central de Instrucción número cinco de la Audiencia Nacional —cuyo titular es José de la Mata— que coordina la operación que investiga un fraude fiscal de 5 millones de euros solo en 2013 por la compraventa de jugadores y el traspaso de derechos de futbolistas antaño ligados al Atlético, como Falcao

Doyen Sports se creo en 2011 y tenía como principal función proporcionar el dinero que los clubes de fútbol necesitaban para que pudiesen hacer frente a fichajes de jugadores. Es decir, que actuaba como inversor. Y solo en 2013 obtuvo unos ingresos superiores a 19 millones de euros. 

Mariano Aguilar. 

El fondo liderado por el emblemático exjugador y representante Juanma López tenía la sede en Malta e invertía en la compra de jugadores con proyección, quedándose con un porcentaje de los derechos económicos de estos y obteniendo beneficios cuando eran vendidos. 

Posteriormente comenzó a financiar fichajes y a facilitar liquidez a clubes con dificultades económicas. Y también actuó como intermediario en la venta de derechos audiovisuales y gestionando los derechos de imagen de deportistas. 

Doyen Sports financió a clubes como Atlético de Madrid, Valencia, Sevilla, Sporting de Gijón, Getafe Cádiz, Granada, Éibar o Besiktas turco, y al expresidente del Sevilla José María del Nido, entre otros

Según Serrano, el conjunto colchonero pidió un préstamo de 10 millones de euros para hacerse con Falcao en 2011. Dos años después, fue vendido al Mónaco por 43 millones y el fondo se llevó 15, un beneficio limpio de 5 millones de euros. Así, en el fichaje de Falcao por el Atlético de Madrid Doyen le financió el 55% del pago al Oporto prestándole al equipo rojiblanco 22 millones de los 40 de la operación. 

Modus operandi

Los clubes disponían de tres años para pagar su deuda con el fondo Doyen Sports, y para ello elegían únicamente entre dos opciones: Quedarse al jugador y pagar su deuda o revender al jugador para cubrir el compromiso

Además, el club al que se le vendía un jugador asumía que debería venderlo en cuanto apareciese una oferta superior a la realizada por su compra. Lo mismo en el siguiente destino y mientras durase el acuerdo de representación. 

Es decir, se embolsaban un porcentaje de los derechos económicos del jugador más los intereses correspondientes al capital prestado al club que disfrutaba el futbolista (además de un porcentaje ante una eventual venta). 

El problema surgió cuando en 2015 la FIFA prohibió que un jugador pudiera estar en manos de una entidad diferente a la de un club. De esta manera prohibieron la actividad de los fondos como Doyen, que acabó reconvirtiéndose en una agencia tradicional de representación y de gestión de derechos de imagen de deportistas. 

Aguilar, consejero del Real Zaragoza por designación de Pablo Jiménez de Parga

El máximo accionista del Real Zaragoza, Pablo Jiménez de Parga, ejerce como mano derecha de los empresarios Miguel Ángel Gil Marín y Joseph Oughourlian, y controla de facto el club maño a través de consejeros vinculados al club colchonero, como Emilio Cruz y Mariano Aguilar. 

Pablo Jiménez de Parga, máximo accionista del Real Zaragoza

La Ley del Deporte, en su artículo 71, relativo a órganos de administración, señala que "los miembros del consejo de administración y quienes ostenten cargos directivos en estas sociedades (las deportivas) no podrán, ni por sí ni mediante personas vinculadas, entendidas tal y como las define el artículo 231 del texto refundido de la Ley de Sociedades de Capital, aprobado por Real Decreto Legislativo 1/2010, de 2 de julio, ejercer cargo alguno ni ostentar la titularidad de una participación significativa en otra entidad deportiva que participe en la misma competición profesional o, siendo distinta, pertenezca a la misma modalidad o especialidad deportiva". 

El artículo podría presuntamente estar incumpliéndose por Jiménez de Parga, secretario del Consejo de Administración del Atlético de Madrid y, según El Periódico de Aragón, propietario del 88% de Global Tavira SL, que es dueña del 51% de las acciones del Real Zaragoza

El 12% restante de Global Tavira SL pertenece a Joseph Oughourlian, presidente del Grupo Prisa (en el que Pablo Jiménez de Parga también ejerce como secretario del Consejo de Administración) e íntimo de Miguel Ángel Gil Marín.