A falta del respaldo por parte de todos los clubes, LaLiga ha llegado a un preacuerdo con CVC, una empresa de capital riesgo británica, en la que esta se compromete a aportar 2.700 millones de euros para salvar la situación económica del fútbol español. Para intentar convencer a los equipos españoles, LaLiga ha querido dejar claro que los clubes van a mantener el control. La competición futbolística italiana se negó a un acuerdo con esta misma empresa por la duda de las escuadras italianas sobre el papel que iban a tener. Se llegó incluso a pedir la dimisión del máximo mandatario de la liga italiana.

Como ya he comentado anteriormente esta venta de participaciones por parte de LaLiga se debe a la pésima situación económica en la que se encuentra el fútbol después de la pandemia. Los estadios vacíos durante una temporada completa, la disminución del interés por parte de los jóvenes en este deporte y la bajada en los ingresos han llevado a que gran parte de los clubes hayan tenido números rojos. 733 millones de euros se perdieron en total. El Barcelona es una de las entidades con una peor situación económica. Una deuda superior a mil millones persigue a los blaugrana.

Las gradas completamente vacías en un partido de Champions League en el Camp Nou

Estos datos económicos han llevado a muchas personas a buscar soluciones. La propia liga ya tomó decisiones para la nueva temporada que comenzará dentro de unos días. Javier Tebas disminuyó el límite salarial de la competición a 160 millones, 27 millones menos que la campaña anterior. No obstante, esta medida no era suficiente para atajar un problema económico de estas características por eso desde el primer momento ha buscado inversores que aportasen capital a los clubes que lo necesitan.

CVC y su pacto con Javier Tebas le podría convertir si los clubes dan el visto bueno, en el primer accionista financiero de LaLiga. Su participación será del 10% por una inversión de 2.700 millones de euros. Esta gestora ya ha estado inmersa en el negocio deportivo con anterioridad. Se hizo con los derechos del torneo de Seis Naciones de rugby a cambio de una participación del 14%. También ha intentado poner su dinero en el tenis.

El dinero de CVC irá destinado principalmente a los clubes. El 90% de los 2.700 millones de euros se concentrarán en los equipos profesionales masculinos, fútbol femenino, fútbol semi-profesional y no profesional y al Consejo Superior de Deportes. Para poder llevar a cabo esta inyección de capital con ese dinero se creará una nueva sociedad a la que LaLiga aportará todos sus negocios, filiales y joint Ventures. En esta sociedad es en la que CVC tendrá una participación del 10%.

La Superliga para salvar el fútbol

Con este acuerdo Tebas y LaLiga consiguen un apoyo económico ante un momento económico del fútbol español complicado. Además, la máxima competición española contaba con la presión de la Superliga. Florentino, en su presentación de esta nueva copa europea, la había definido como necesaria para salvar económicamente este deporte. Las previsiones de ingresos y pérdidas del presidente del Real Madrid eran desastrosas por ello se necesitaba una revolución.

Florentino Pérez, presidente de la Superliga y el Real Madrid

Florentino y su equipo de trabajo ya habían conseguido inversores para su nuevo proyecto. JP Morgan, una empresa financiera, había asegurado a los doce clubes que conformaban esta competición un pago de 3.250 millones de euros a cada equipo. Estas cantidades desorbitadas y prácticamente irrenunciables para los clubes hacían que LaLiga tuviese aún más necesidad por conseguir un inversor cuanto antes. Finalmente, han encontrado a este inversor. Veremos si los clubes españoles son favorables a esta aportación, se puede imaginar que sí por el contexto económico.