Juan Salazar de "Los Chunguitos" enfermo de coronavirus: Una familia flamenca marcada por la muerte de cuatro hermanos

España ha sobrepasado los 140.000 contagiados y lleva más de 13.000 muertos por el coronavirus COVID-19. De este patógeno no se libranni lo ricos ni los famosos españoles, entre ellos Juan Salazar, la otra mitad de “Los Chunguitos” junto a José. El miembro de este icónico grupo rumbero y flamenco, se enfrenta a sus 68 años a una batalla contra un poderoso virus, que sobre todo causa estragos en la población mayor de 65 años.

Su hermana, Toñi Salazar, integrante de “Azúcar Moreno” junto a su hermana Encarna, fue la encargada de comunicar hace cuatro días la noticia asegurando que "Juan está bien y todos estamos tranquilos porque, de momento, evoluciona favorablemente". No obstante, sigue ingresado y tampoco pueden visitarle, algo que está ocurriendo durante el coronavirus ya que los pacientes tienen que estar completamente aislado sin poder recibir visitas, salvo las de los médicos.

Una vida marcada por la tragedia y el éxito

Los Chunguitos han vivido “de todo”, desde lo meramente musical hasta sobrellevar causas ajenas y externas a los escenarios. Ahora, de nuevo, se enfrentan a una nueva batalla fuera de sus míticas y recordadas canciones. Juan y José Salazar, junto a su hermano Enrique, ya eran conocidos desde pequeños en su Badajoz natal, aunque tuvieron que trasladarse posteriormente a Madrid, en una etapa en la que se afrontaban los últimos años del franquismo en España. La familia se instaló en Vallecas donde vivieron en un complejo de chabolas.

José y Juan Salazar, co n gafas, "Los Chunguitos"

En total eran nueve hermanos, de los que solo quedan actualmente cinco: Juan, José, Toñi, Encarna y Manuel. Los dos primeros, junto con Enrique, fundaron el grupo Los Chunguitos. Salieron a probar suerte en el mundo musical tocando por bares y calles de Madrid. La gente de aquella época recuerda aun sus conciertos en locales pequeños y cercanos a la Plaza Mayor, de Madrid.

La vida de Los Chunguitos dio un giro de 360 grados cuando se cruzan con Ramón Arcusa, del Dúo Dinámico, que les facilitó la grabación de un disco cuyo tema principal fue “Dame Veneno”, un clásico en la España de los ochenta, que desde entonces ha sonado en cientos de ocasiones con un estribillo que reza “dame veneno que quiero morir, dame veneno…”. Aquella canción venía al hilo de la heroína, una droga que se llevó por delante miles de vida en esa España en la década de los 80.

Los Chunguitos sufren la pérdida de Enrique

Los hermanos Salazar vivieron una infancia en la que no recibieron educación, pero su arte e ingenió les sirvió para convertirse en el estandarte musical que hoy en día siguen siendo.

Su hermana Toñi recordó durante una entrevista de 2019 que vendía lotería y a quien no se la quería comprar le avisaba con que le iba a echar una maldición: “Llegaba a casa con toda la lotería vendida”, explicaba. Su hermano Juan también recordaba aquella etapa: “En Badajoz pasábamos mucha hambre. Al llegar a Madrid nos metimos en una chabola que nos costó unas mil pesetas".

Cuando ya eran un grupo prácticamente consagrado, Los Chunguitos sufrieron un golpe muy severo. El 24 de junio de 1982, después de estar varios días hospitalizado, el fundador del trío rumbero flamenco, Enrique, con 25 años, fallecía a causa de una hepatitis. Sin embargo, sus hermanas Encarna y Toñi, reconocieron durante su participación en el programa de Bertín Osborne “Mi casa es la tuya”, que su hermano murió por un cáncer de garganta.

“El médico dijo que no era nada peligroso, hicimos un fiestón en la chabola celebrando que estaba bien... Y a los cuatro días se murió", explicaba Toñi. En el programa “Lazos de sangre” de TVE, también comentaron aquella trágica muerte que sacudió a la familia Salazar. "Le salieron unos bultos en el cuello y a la semana murió. Ha sido lo peor que me ha pasado en la vida”, citaba la misma hermana.

El propio día de la muerte de su hermano, Los Chunguitos tenían que actuar en el municipio madrileño de Parla, por lo que Juan y José reunieron el valor suficiente para actuar. “Tocaron en Parla, lloraron allí arriba, la familia estaba destrozada…”, recordaba uno de los sobrinos de los Salazar. “Yo me quedé sin hablar durante seis meses”, rememoraba Encarna.

Los Chunguitos (Enrique, José y Juan) y Azúcar Moreno (Toñi y Encarna) | RTVE

Por si fuera poco, casi dos años después del fallecimiento de Enrique, la madre de la familia, Candelaria Salazar, moría de manera prematura a los 53. Y dos años después, a la edad de 62,  perdía la vida el padre, José Salazar, más conocido como “El Porrina de Badajoz”. Y así, uno tras otro en el núcleo familiar. Los hermanos Aurelia con 44 años , José con 29 por un infarto y Carlos con 41 por sobredosis de drogas, fueron los siguientes en fallecer.

Los Chunguitos nunca perdieron su esencia

A raíz de la pérdida de Enrique, Manuel fue el elegido para conformar el nuevo trío de Los Chunguitos. Aquella etapa duró desde 1982 hasta 2006, año en el que Manuel decide dejar el grupo y seguir su carrera en solitario. Por su parte, Juan y José pasaron a ser un dúo y fueron de ciudad en ciudad con todo su tradicional repertorio, que tanta fama le ha dado a lo largo de las décadas.

Los Chunguitos con Manuel.

En los últimos años la familia Salazar ha “aparcado” los escenarios para pasar al mundo del “show-entertainment”. Son conocidas son sus colaboraciones en “Vive Cantando” y “Tu Cara me suena 3”, de Antena 3, como su breve y polémica aparición en el reality “Gran Hermano VIP”, de Telecinco, y su participación en “MasterChef” en TVE.

Con todo ello, Los Chunguitos se enfrentan a otro duro percance, con el coronavirus de Juan Salazar, el más divertido de toda la familia, del que sus fans esperan que salga, ya que lo que quieren es verlos de nuevo donde de verdad triunfan: Los escenarios.