Famosos como Victoria Beckham o Justin Bieber resucitan una moda de hace tres mil años: 'El cupping'

Hoy las celebrities más reconocidas del mundo se benefician de este tratamiento milenario. Kim Kardashian, Jennifer Aniston y Madonna, entre otras y otros, se aplican unas tazas o cuencos sobre su cuerpo, quemando en su interior un pequeño algodón empapado en alcohol sobre una superficie aislante de la piel, una moneda o un trocito de madera, de forma que al absorber la llama el oxígeno de ese espacio, se produce el efecto ventosa dentro del cuenco, elevando y tensando la piel.

Victoria Beckham. 

Una fanática del cupping es Victoria Beckham o Gwyneth Paltrow que lucen sin complejos los rosetones que les deja esta técnica milenaria en la espalda, las marcas que permanecen unas horas en la piel tras aplicar el cupping. Jennifer Aniston también ha sido vista con marcas redondas en su espalda, al igual que Julia Roberts, Paris Hilton o Geri Halliwell.

Muchas estrellas de Hollywood descubrieron el cupping en la segunda parte de la saga El Padrino (1974), cuando su director Francis Ford Coppola incluyó una escena con una sesión de esta técnica en su guion. Lo cierto es que la técnica funciona, es especialmente efectiva para casos de reuma, dolores articulares y eliminación de toxinas y debe aplicarse siempre en espalda, no en otras zonas del cuerpo. También ellos, como Justin Bieber se han dejado seducir por ella.

Justin Bieber. 

Antiguamente los chamanes lo aplicaban para extraer del cuerpo el espíritu del mal en los enfermos. En la antigua Mesopotamia se utilizaba ya en el año 3.300 a.C. con finalidades curativas. También en Egipto varios papiros fechados del año 2.200 a.C. demuestran su uso terapéutico, incluso la antigua Ayurveda, la medicina antigua practicada en la India, habla de ventosas para el cuerpo, aplicadas para eliminar dolores y enfermedades. El primero en dejar un documento escrito sobre la técnica para aplicar el cupping fue Hipócrates 400 años a.C. en la antigua Grecia y otros médicos como Paracelso o Galileo avalaron sus resultados.

Se divulgaron sus beneficios para la salud por todo el mundo, en los países árabes, se le llamó Hijama, y ha llegado hasta nuestros días sin apenas cambios, aplicándose la misma técnica milenaria que utilizaron nuestros antepasados. El cupping, 3.000 años después, vuelve a ser la terapia de moda.