Pérez Tornero catalaniza RTVE con Cuní, Sardà, Mònica López y un largo etcétera

En los principales despachos de RTVE se habla en catalán. En esta ocasión, José Manuel Pérez Tornero (criado profesionalmente en la Universidad Autónoma de Barcelona) está imponiendo una política de fichajes procedentes de Cataluña, que el PSOE ha aceptado.

El presidente de RTVE tiene como jefe de Gabinete al barcelonés Juan José Ruiz, la mano derecha del director de Entretenimiento es la catalana Ana María Bordás, y La 1 acaba de recuperar a Mònica López como presentadora de 'El tiempo' y próximamente estrenará un nuevo espacio liderado por Xavier Sardà. 

RNE habla en catalán

Esta dinámica se nota más en la radio, ya que cuatro de las cinco principales franjas de RNE quedan en manos de catalanes: Samanta Villar lidera el magazine matinal, Carles Mesa el vespertino, Josep Cuní las noches y Pepa Fernández el fin de semana. 

Cuní ha reconocido que su fichaje lo ha propuesto Pérez Tornero: "El hecho de que el presidente de RTVE, José Manuel Pérez Tornero, haya pensado en mí para esto supone una inyección de vitaminas en un momento vital y profesional en el que estoy más cerca del final que del principio. Porque la edad es la que es, aunque esté en plena forma. Uno no puede ser víctima de su edad, pero tampoco obviarla". 

No es la primera vez

El catalán también abundó en la TVE de los ochenta. Y es que varios profesionales catalanes fueron situados en puestos de responsabilidad. Es el caso de Enric Sopena, convertido en jefe de informativos por José María Calviño. O profesionales que se habían criado en Barcelona como Manolo Campo Vidal. 

Pérez Tornero. 

El triunfo de José Luis Rodríguez Zapatero en 2004 también conllevó la contratación de catalanes, en este caso productoras. Algunas de ellas tenían relación accionarial con TVE, tal y como ocurría con la Mediapro de Jaume Roures o El Terrat de Andreu Buenafuente. 

Escándalos para todos los gustos

Esta circunstancia ha provocado el enfado de algunos sectores de RTVE contra Pérez Tornero, que acumula una larga colección de polémicas. Una de las más célebres fue su negativa a que un equipo del 'Telediario' visitase el Sáhara en un viaje organizado por el Frente Polisario. A raíz de esta decisión, dimitieron los responsables de Internacional de RTVE, Juan Tato, Guillaume Bontoux y Sylvia Fernández de Bobadilla. 

Los Consejos de Informativos aseguraron que "estas dimisiones demuestran el incorruptible compromiso de la mayoría de periodistas de RTVE con la información de servicio público. Pero, desafortunadamente, son demasiadas las ocasiones en las que tienen que ser los profesionales de base los que muestren la decencia y dignidad de esta casa".

Y pidieron "que los máximos responsables directivos de nuestra empresa reflexionen profundamente sobre lo ocurrido y qué significado tienen las dimisiones presentadas. Exigimos al Director de Contenidos Informativos de RTVE, Esteve Crespo, y al Presidente de la Corporación, José Manuel Pérez Tornero, que trasladen a la plantilla y a la ciudadanía las razones reales del veto y quiénes fueron sus responsables".

Comisiones Obreras acusó a Pérez Tornero de practicar la censura: "Usted ha impuesto la censura para que no se hable del Emérito, para que no se informe sobre los abusos de las eléctricas. Su dirección en TVE, como denunció el PSOE en el Parlamento, dio órdenes expresas para que no se informara de los tratos de favor de la Sanidad de la Región de Murcia a un familiar de Teodoro García Egea".

Pablo Echenique, de Unidas Podemos, por su parte protestó por la cancelación de 'Las cosas claras' a pesar de su audiencia: "Los resultados desde la cancelación están a la vista. Se ha reducido la pluralidad política y además los programas que han sustituido a 'Las cosas claras', sin entrar en su calidad y sin valorar su contribución al debate democrático, tenían muy poca audiencia". 

"¿En qué sentido la cancelación del programa cumple con la misión de servicio público de RTVE? ¿Le parece ético y correcto que un presidente de RTVE proponga la votación en el consejo de administración sobre la continuidad de un periodista con nombre y apellidos? ¿No le parece que sumado a la campaña política y en medios constituye una persecución y una censura de un profesional del periodismo?", se preguntó. 

Echenique opinó que "desde el principio del programa, el PP y la derecha mediática iniciaron una persecución política de Cintora. Y usted, señor Tornero, decidió darles la razón y hacerles caso. Primero, con una votación para echar a Cintora, y luego, utilizando su potestad personal para cancelar el programa".