Pepe Viyuela deja obra tras denuncia de abuso sexual contra director Ramón Paso.

Desde hace meses la industria de la interpretación nacional se encuentra en el punto de mira debido al aumento de casos de abusos sexuales. El dramaturgo madrileño Ramón Paso ha sido el último rostro denunciado por varias jóvenes y ha sido la Fiscalía Provincial de Madrid la cual ha presentado una denuncia en el juzgado contra el dramaturgo por presuntos delitos sexuales contra varias jóvenes  de entre 18 y 25 años las cuales habrían tenido lugar entre 2018 y 2023. 

Y ha sido hoy cuando las actrices y productoras que forman parte de la compañía 'PasoAzorínTeatro', propiedad del guionista, han mostrado su apoyo al dramaturgo además de solicitar la "máxima discreción" y, también, que se respete la presunción de inocencia. 

Después de salir a la luz esta denuncia, el actor Pepe Viyuela se ha posicionado del lado de las presuntas víctimas y ha abandonado la obra en la que actuaba, dirigida por Paso. Viyuela interpretaba en el Teatro Infanta Isabel de Madrid al escritor Enrique Jardiel Pondela en la obra Jardiel enamorado del ahora señalado dramaturgo. 

Viyuela ha asegurado en declaraciones a los medios: "Yo me he quedado de piedra. Estoy nervioso. No pienso en otra cosa. Estoy conmocionado". Además ha expresado sobre Ramón Paso que "no quiero llamarle. No quiero seguir con la función. Me voy".

Según han revelado desde la agencia EFE, la letrada Luisa Estévez Martínez, es quien representa a 14 mujeres que han denunciado ante la Fiscalía al también guionista madrileño y, además, la denuncia interpuesta por el ministerio público se encuentra ya en el decanato de  los juzgados de instrucción de Madrid a la espera de reparto. Tal y como afirma la letrada, "la denuncia del ministerio fiscal se ha interpuesto por presuntos delitos de agresión sexual, algunos de carácter continuado, acoso, hostigamiento, coacciones o contra la integridad moral"

Fue la abogada quien este pasado mes de noviembre puso en conocimiento los hechos que se han denunciado y, además, aportó documentos así como informes psicológicos que se realizaron a las 14 víctimas a quienes el dramaturgo había conocido durante las audiciones teatrales a las que se presentaban. 

Este es el último caso de presuntos abusos sexuales en la industria de la interpretación ya que, tal y como publicábamos en elcierreddigital.com,  tan solo hace unos meses  los directores de cine Carlos Vermut y Armando Ravelo también eran denunciados por acoso sexual.

Ramón Paso, el dramaturgo denunciado por presunto abuso sexual

Como hemos mencionado, el dramaturgo Ramón Paso ha sido el último rostro vinculado a la interpretación que ha sido denunciado por la Fiscalía por presuntos delitos sexuales contra varias jóvenes. Un hecho por el que Paso ha saltado a la palestra mediática. Pero, ¿quién es Ramón Paso?.

Dramaturgo, guionista y director de escena nacido en Madrid en 1976. Nieto del dramaturgo  Alfonso Paso y bisnieto del escritor Enrique Jardiel Poncela. Finalista del Premio Valle-Inclán de Teatro 2019 por la dirección y dramaturgia de Las leyes de la relatividad aplicadas a las relaciones sexuales, es responsable de éxitos como Usted tiene ojos de mujer fatal... en la radio – que versiona y dirige – estrenado en el teatro Fernán Gómez; El reencuentro, en el teatro Maravillas, dirigido por Gabriel Olivares e interpretado por Amparo Larrañaga y María Pujalte; La importancia de llamarse Ernesto de Oscar Wilde, estrenada en el Teatro Lara (Sala principal), y posteriormente representada en el Teatro Maravillas, donde firma la versión y la dirección; o El mensaje del que es autor y director, y que se estrena en el Teatro Lara (Sala principal), protagonizado por  Natalia Millán y Ana Azorín en 2021. 

Su primer estreno profesional, El Tesoro, tiene lugar en el Teatro Español de Madrid en 1998. Cuenta a sus espaldas con más de cincuenta montajes teatrales, ya sea como dramaturgo, director de escena o en ambas funciones. Independientemente de este trabajo, ha colaborado como asesor de dramaturgia en Tratos de Miguel de Cervantes, y Jardiel, un escritor de ida y vuelta de Enrique Jardiel Poncela, ambas dirigidas y versionadas por Ernesto Caballero, además de en La autora de las Meninas, texto y dirección de Ernesto Caballero; y Un soñador para un pueblo de Antonio Buero Vallejo, con dirección de Ernesto Caballero, todas ellas para el Centro Dramático Nacional; y en el trabajo dramático respecto a la dirección de actores en Eloísa está debajo de un almendro de Enrique Jardiel Poncela, dirigida por  Mariano de Paco Serrano, donde también firma la versión del texto.

Además de su amplia trayectoria en teatro, ha trabajado como guionista de televisión, tanto en el desarrollo de proyectos propios como en la escritura y coordinación de guiones para algunas de las más destacables series del panorama audiovisual, colaborando con las principales productoras del país, llegando a más de cien capítulos emitidos. Sus últimos trabajos para televisión han sido Los habitantes de la casa deshabitada, donde firma el guion y la dirección de actores, en una producción de Focus audiovisual para TVE; y El crédito de Jordi Galcerán, donde firma el guion junto a Galcerán, en una producción de Focus audiovisual para TVE y TV3.

Armando Ravelo, señalado por supuesta violencia sexual

Este pasado mes de enero el director Armando Ravelo también era denunciado por supuesta violencia sexual. Era la artista canaria Koset Quintana  quien acusó al realizador en sus redes sociales de haberla incitado al sexo en 2015, cuando la joven tenía solo 15 años. Además, en esta publicación Koset remarcaba, “no solo me incitaba a tener sexo con él, sino que me hablaba de drogas y porno". A raíz de la publicación de la joven son varias las mujeres que han decidido denunciar la actitud del director.

La actriz canaria  Laura Perdomo también ha asegurado vivir años de acoso por parte de Ravelo, algo que también ha querido compartir la cantante y actriz Nati Vera, señalando que sufrió más de una insinuación por parte del realizador. También una de las actrices que formó parte del rodaje de ‘Érase una vez en Canarias’ a principios de 2022 ha explicado a El Diario que Ravelo le insistió en varias ocasiones para verse en privado tiempo antes del rodaje y que durante el rodaje mantuvo las distancias y el director empezó a tener comportamientos y decir comentarios “misóginos".

El director de cine reconoció a Efe los hechos denunciados por Koset Quintana, sin embargo, ha asegurado que "no se pueden considerar violencia sexual". En dicha conversación señaló que los hechos se produjeron en una época en la que se creía “impune”. Sin embargo, las denuncias realizadas a posteriori se remontan tan solo a hace apenas un año.

Ravelo también afirmó que  era adicto al sexo, adición que asegura haber superado tras ir a terapia, pero que, según él, le llevó a “hacer mucho daño a muchas mujeres”. Respecto a las consecuencias que tendrán estas denuncias públicas, Ravelo ha asegurado a Radio Nacional España que ya las tiene. "Yo mismo las he asumido y tomado y me retiro del cine y la vida pública, de la vida como la conocía hasta hace poco”. 

Las denuncias contra Carlos Vermut

La decisión de Koset Quintana de denunciar públicamente los hechos la tomó a raíz de lo ocurrido con el director de cine Carlos Vermut. Tal y como reveló una investigación publicada por El País, tres mujeres pertenecientes a la industria del cine o la cultura han acusado de violencia sexual a este director de cine, conocido por películas como ‘Mantícora’ o ‘MagicalGirl’.

Los actos denunciados presuntamente ocurrieron a lo largo de un período de ocho años, desde 2014 hasta 2022. Hasta el momento, las identidades de las mujeres se mantienen en el anonimato, aunque se sabe que una de ellas era una estudiante, otra una empleada en una de sus producciones y la tercera una trabajadora del ámbito cultural. El director habló con el citado medio y ha afirmado que no era consciente de haber ejercido violencia sexual contra ninguna mujer.

En el momento en que ocurrieron estos supuestos hechos, ninguna de las mujeres presentó denuncia ante la policía. Según el reportaje, dos de ellas no lo hicieron por temor a perder su empleo, y la otra, por el temor de no conseguir trabajo en el futuro. Las tres mujeres han firmado una declaración jurada testificando sus testimonios y han presentado pruebas al respecto, según informa El País.

El primer caso ocurrió en 2014. La mujer involucrada relata que después de conocer a Carlos Vermut en un bar de Madrid y besarse en la entrada de su casa, él la invitó a subir. Una vez dentro de la casa, él la atacó y comenzó a estrangularla. A pesar de que ella le dio patadas y logró que él parara por un momento, volvió a atacarla. Además, ella le pidió que usara condón, pero él no lo hizo. Después del incidente, la mujer le contó lo sucedido a una amiga, a través de un mensaje, y esa misma mañana también se lo contó a otra amiga. Esta segunda amiga le recomendó que fuera a la policía y al hospital, pero ella decidió no denunciar por miedo, ya que Carlos Vermut estaba relacionado con su entorno y su trabajo. Aunque continuaron teniendo una relación esporádica, siempre involucraba forcejeos y violencia en el sexo, según relata la mujer. 

El segundo caso, que tuvo lugar dos años después, involucra a una estudiante de 21 años a quien Carlos Vermut le ofreció trabajo. Fue él quien la contactó y le ofreció su ayuda para entrar en la industria. Después del primer encuentro, hubo una serie de llamadas y mensajes, hasta que él propuso que fuera a su casa para ver una de sus películas. Al terminarla, sin su consentimiento, él se abalanzó sobre ella y la dejó paralizada, lo cual provocó la ira del cineasta. Más tarde, ella recibió un correo electrónico de Vermut hablando como si nada hubiera pasado. Ella le respondió diciéndole que no quería tener nada más que ver con él.

A finales de 2019 tuvo lugar el tercer caso, en el que otra denunciante y Carlos Vermut mantuvieron relaciones sexuales prolongadas y no consensuadas durante varios años. La mujer afirma que hubo actos físicos humillantes y comentarios denigrantes que la hicieron sentir desfavorecida e inferior. Además, Carlos Vermut le ofreció un trabajo que finalmente no se materializó. En su último encuentro, en 2022, Carlos Vermut impidió que la mujer abandonara la casa para no quedarse solo y, según el relato de la mujer, al día siguiente él le envió un mensaje poniendo fin a su relación.