Juicio contra Manuel Guerrero, detenido en Qatar por ser gay: exigirá trato justo
Según Alexandra Guasp, la defensa de Manuel Guerrero pedirá reconocimiento de detención arbitraria.
Tal y como viene informando elcierredigital.com, son conocidas las numerosas críticas que reciben ciertos países por el trato que dan al colectivo LGBTIQ+. Uno de ellos es Qatar, que volvió a ponerse bajo el foco de la polémica tras la detención y posterior encarcelamiento el pasado 4 de febrero de Manuel Guerrero, extrabajador de Qatar Airways, homosexual y positivo en VIH, acusado de posesión de drogas al ser detenido gracias a una trampa en una cita de la red Grindr, cuyo juicio comienza hoy.
Aunque las autoridades qataríes lo acusaron de tenencia de droga, sus amigos y familiares llevan meses denunciando que ha sido detenido por su orientación sexual y su condición de VIH positivo. Según afirmaron sus allegados en conversaciones con este medio, Guerrero fue sometido a condiciones inhumanas en prisión, incluyendo tortura psicológica, falta de acceso a su medicación para el VIH y encierro en una celda de aislamiento.
Tanto seres queridos como defensores de derechos humanos se unieron para exigir su liberación y denunciar la actuación de Qatar. Finalmente, el pasado 19 de marzo, tras más de un mes de lucha, Manuel fue liberado por las autoridades qataríes, que le concedieron la libertad provisional a la espera de juicio, que comienza hoy 22 de abril. Guerrero podría enfrentarse a siete años de prisión en Doha, la capital qatarí.
Con motivo de la cita de hoy, elcierredigital.com ha vuelto a contactar con Alexandra Guasp, amiga de Manuel Guerrero, para conocer más detalles sobre su procesamiento judicial y las perspectivas que su familia y allegados tienen para el futuro de Manuel. Después de un mes desde su liberación, Guasp afirma que él sigue “muy preocupado y entre la familia y amigos hay mucha preocupación porque le pueda volver a pasar algo parecido”.
Durante su encuentro con este medio Guasp ha señalado que la defensa de Guerrero —en la que participa su hermano Enrique, que es abogado— se basará en tres puntos fundamentales: “Lo primero que van a exigir a las autoridades es un trato justo durante el juicio. En segundo lugar, que se reconozca que la detención de Manuel se produjo de forma arbitraria y, por último, van a reclamar que se reconozcan las múltiples torturas psicológicas a las que ha sido sometido Manuel”.
En este sentido Guasp ha recordado que “Manuel entró a Qatar hace siete años como ciudadano británico para trabajar en Qatar Airways, de la que fue despedido tras su detención”. La amiga de Guerrero explica que, debido a la doble nacionalidad mexicana y británica de Manuel Guerrero, las embajadas de México y Reino Unido han colaborado para ‘hacer ruido’ sobre el caso y “poder llamar la atención de medios como la BBC”, puntualiza Guasp.
La detención y las condiciones de Manuel Guerrero en prisión
Tras la detención de Guerrero por parte de las autoridades qataríes, Alexandra Guasp, explicó durante una charla con este medio que “Manuel había quedado con un supuesto chico para tener un encuentro a través de la red de citas Grindr, sin embargo, el chico con el que quedó resultaron ser las autoridades, que se estaban haciendo pasar por chicos gays en la red social”, sostuvo Guasp, al tiempo que señaló: “cuando lo detuvieron, le ‘colocaron’ una pastilla de metanfetamina para justificar su detención”.
En la acusación oficial del Estado de Qatar contra Guerrero de momento sólo figuran los cargos de posesión de drogas. Sin embargo, los familiares y amigos de Guerrero opinan que "lo de la pastilla de metanfetamina fue una excusa para poder detenerlo, el motivo real es su orientación sexual. Tampoco le hubieran preguntado si conocía a otros homosexuales para delatarlos, no tendrían sentido ese tipo de preguntas en una detención por drogas. Lo que es un misterio es por qué no lo acusaron de ser homosexual directamente si en Qatar está criminalizado y no necesitan excusas”, argumentó el pasado mes de marzo Alexandra Guasp.
Guerrero llegó hace siete años a Qatar para establecerse. "Allí llevaba una vida completamente normal, trabajaba como mánager de producto para la aerolínea Qatar Airways que, sin embargo, lo ha despedido tras su detención y no ha querido saber nada de él", explicó hace un mes Alexandra Guasp.
Sobre el trato que Manuel recibió en la prisión de Doha en la que estuvo retenido un mes y de la que fue liberado a finales del pasado mes de marzo, Alexandra Guasp asegura que “lo han tratado de manera inhumana en la cárcel, le hicieron tortura psicológica y estuvo incomunicado, además le obligaron a desbloquear su móvil para que las autoridades vieran sus conversaciones, con el objetivo de encontrar otros homosexuales”, señaló Guasp, al tiempo que denunció que “en 25 días no tuvo acceso a su medicación para el VIH y luego se la volvieron a quitar. Además,no ha tenido traductor y ha tenido que firmar documentación en árabe”.
Al parecer, no sólo le habrían negado el acceso a su medicación específica para el VIH —que le proporcionaron ante el escándalo internacional que se podía generar y después volvieron a quitarle—, sino que también lo encerraron en una celda de aislamiento en condiciones infrahumanas: “le negaron comida y le negaron el agua, es muy doloroso para los que lo conocemos pensar en lo que ha pasado allí encerrado”, lamentó Guasp durante su entrevista con elcierredigital.com el pasado mes de marzo.
Ahora Guasp sostiene que desde que liberaron a Guerrero, hace poco más de un mes, los esfuerzos de su hermano Enrique —que se encuentra involucrado también en su defensa legal— y el resto de asociaciones que colaboran con la difusión de su caso se han centrado en organizar los preparativos para el juicio: “Desde hace días todo el mundo está un poco más callado, pero no porque la lucha haya terminado, sino porque precisamente acaba de empezar y tenemos que estar muy preparados para afrontar lo que se pueda venir en el juicio”, concluye Guasp durante su encuentro con elcierredigital.com.
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