
El estado del árbitro de fútbol agredido en Aranda: 'Su evolución es favorable'
El colegiado de 59 años se está recuperando de varias fracturas craneales tras ser atacado por el padre de un jugador
En la tarde del pasado domingo, Aranda de Duero (Burgos) fue escenario de una lamentable agresión a un árbitro durante un partido de fútbol. El incidente ocurrió en el marco de una competición local, cuando el árbitro, tras sancionar una jugada, fue atacado por un espectador que se encontraba en las gradas.
De acuerdo con los informes proporcionados por la Policía Nacional, el presunto agresor, un hombre de unos 40 años, ya mostraba un comportamiento alterado antes de la agresión.

Durante el transcurso del partido, el sujeto comenzó a proferir insultos hacia los árbitros, lo que desembocó en la violenta acción posterior. Tras el incidente, el agresor fue detenido y se le investiga por un posible delito de lesiones, ya que la víctima sufrió golpes que requirieron atención médica.
El estado actual del árbitro agredido
El árbitro agredido, José Luis García, de 59 años, se encuentra pendiente de evolución. Entre las lesiones sufridas se incluyen varias fracturas craneales, de mandíbula y una fisura en la clavícula, además de molestias en un oído. Por todo ello, ha pasado la noche en observación en el Hospital Universitario de Burgos (HUBU).
Aunque se espera que su recuperación sea favorable, aún se desconocen las medidas adoptadas contra su presunto agresor. El supuesto responsable prestó declaración en dependencias policiales este domingo. Además, el comité de árbitros local ha expresado su condena ante lo sucedido. Y ha asegurado que tomarán medidas para proteger la seguridad de los oficiales en futuros encuentros.

Por su parte, el club Riber CD, equipo implicado en el encuentro, ha publicado un comunicado oficial en sus redes sociales. En él lamentan profundamente la agresión sufrida por el árbitro y reiteran su compromiso con el respeto a la figura del árbitro y la deportividad en el fútbol.
En su mensaje, el club asegura que este tipo de comportamientos son "inaceptables". Y solicita la colaboración de todos para erradicar la violencia en el deporte.
Este suceso ha reavivado el debate sobre la seguridad en los eventos deportivos y la necesidad de medidas más estrictas para prevenir la violencia. No solo dentro del campo, sino también en las gradas.
La investigación sobre este suceso en Aranda de Duero continúa. Y se espera que en los próximos días se definan las consecuencias legales para el presunto agresor.
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