Denuncian precariedad en clases de infantil en el CEIP Andrea Casamayor

En los últimos años las familias del Colegio público de Educación Infantil y Primaria (CEIP) Andrea Casamayor de Paracuellos de Jarama (Madrid) han denunciado en varias ocasiones el “calvario” que viven desde que empezó la construcción del centro en 2017. Ahora, a pesar de que el centro está rehabilitado y tiene espacio suficiente para albergar varias clases de infantil de 3 años, solamente cuenta con permiso para abrir una, lo que está generando problemas de desplazamiento a numerosas familias que, en algunos casos,  tienen que recorrer casi tres kilómetros en transporte público para poder llevar a sus hijos al CEIP Virgen de la Ribera.

Según relatan algunos padres afectados por esta situación en conversaciones con elcierredigital.com, los problemas del colegio de primaria Andrea Casamayor comenzaron hace siete años:  “Construyeron dos aulas para niños de tres y cuatro años, pero el edificio del colegio en sí no estaba construido y muchos alumnos tuvieron que dar clase en el CEIP Virgen de la Ribera, cuya directora es la concejala de Educación de Paracuellos”, señala una de las madres afectadas consultadas por este medio. 

Con el paso del tiempo,  el tamaño del centro educativo ha ido aumentando con ‘aulas prefabricadas’ pero sigue sin contar con un edificio propio. Durante la pandemia, al parecer algunos niños tuvieron que dar clase en el comedor, delimitando las ‘aulas’ con pizarras y biombos, en unas condiciones que los padres consideran “indignantes y lamentables”. 

En febrero de 2021 el director de Infraestructuras de la Comunidad de Madrid aseguró en la Asamblea de Madrid que las obras del colegio comenzarían en junio 2021 y que el centro estaría operativo en septiembre de 2022. Estas obras —que en principio contaban con un presupuesto de 8.426.127,51 euros— dotarían al colegio de varias aulas para educación infantil y primaria, incluida un aula de música, una biblioteca, un gimnasio y dos pistas deportivas.

Sin embargo, las obras no comenzaron en la fecha marcada y en los presupuestos del año 2022 solo se dotó la construcción con 140.000 euros, una cantidad ínfima para un proyecto de 7 millones.

Ahora,  tras varios retrasos en las obras, el CEIP Andrea Casamayor podrá contar con su propio edificio desde el próximo 2 de junio, fecha en la que está previsto que finalicen las obras en el centro. Sin embargo, y a pesar de contar con espacio suficiente de nueva construcción, la Dirección del Área Territorial Madrid Este solo le ha otorgado permiso al centro para habilitar un aula para el curso de infantil de 3 años, “generando problemas entre varias familias”, según lamentan algunos padres. 

Esta decisión, que puede cambiar hasta hacerse efectiva el próximo 22 de mayo, afecta a varias familias que se ven obligadas a recorrer más de dos kilómetros a través del centro histórico de Paracuellos del Jarama para llevarlos al CEIP Virgen de la Ribera, lo que obliga a los niños de 3 años a levantarse con mucha antelación a su entrada a clase y propicia que en muchas ocasiones lleguen tarde. Según lamentan los vecinos, desde el Ayuntamiento de Paracuellos de Jarama justifican la decisión por "motivos de prevención".

En este sentido, Gema, una de las madres con hijos en el centro contactadas por elcierredigital.com, se queja: “En la localidad hay tres centros públicos y dos concertados. Entre los tres públicos suman 5 aulas de infantil y entre los dos concertados 7, son datos que no nos cuadran, y más cuando tiene fácil solución, porque en nuestro centro hay espacio para más aulas y hay varias familias que preferirían tener a sus hijos matriculados en este centro por proximidad y no pueden. Este tipo de medidas solo benefician a los centros concertados”.

Los padres afectados del CEIP Andrea Casamayor continúan argumentando que en su centro únicamente se ofertan 20 plazas para niños de infantil de 3 años cuando hay 27 solicitudes. Mientras que en el CEIP Virgen de la Ribera se ofertan 40 plazas y tienen 16 solicitudes. En este sentido, Gema, una de las madres con hijos inscritos en el CEIP Andrea Casamayor, señala para este medio: “Pedimos que la oferta de plazas en los colegios públicos se adapte a la realidad demográfica y geográfica de Paracuellos y se tenga en cuenta la zona donde las familias prefieren llevar a sus hijos. Existe el derecho a la libre elección de centro y consideramos que no se está teniendo en cuenta".

Ante las denuncias de algunos padres del CEIP Andrea Casamayor, elcierredigital.com ha contactado con el Ayuntamiento de Paracuellos de Jarama para conocer más detalles del caso desde su punto de vista. Sobre este asunto, el Departamento de Prensa del Ayuntamiento de Paracuellos ha señalado que la concejal de Educación, María José Pérez de Vargas, se ha reunido con los representantes del AMPA del colegio Andrea Casamayor y con familias que lo han solicitado.

Por otra parte, sostienen que “también  se han mantenido reuniones y conversaciones periódicas con la Dirección de Área Territorial Madrid-Este,  con la Viceconsejería de Organización Educativa y la Dirección General de infraestructuras para hacer el seguimiento de las obras y la oferta de plazas escolares”.

Sobre la adjudicación de plazas, el Ayuntamiento de Paracuellos argumenta que “depende de la comunidad y se nos ha notificado que únicamente se ha ofertado una unidad del nivel de 3 años, ya que las obras no han concluido y solo disponen de ese espacio. Si fuese necesario ampliar el número de grupos en el C.E.I.P. Andrea Casamayor se estudiará en función de los espacios disponibles y de la marcha de las obras”, lo que abre la puerta a que el número de plazas ofertadas en el CEIP Andrea Casamayor varíe hasta el próximo 22 de mayo, fecha en la que se oficializa el número final de plazas.

La problemática sobre la distribución de las aulas de infantil

Los padres consultados por este medio subrayan que solo buscan “que la distribución de las aulas se haga de manera proporcional a los niños que se beneficiarían de ellas.  En nuestra zona hay numerosas familias que se tienen que desplazar por este problema, lo que evidencia la necesidad de ampliar el número de aulas operativas en infantil en este centro”. 

De igual manera, algunos afectados han recordado que en 2018, cuando el centro aún no contaba con edificio propio, tuvieron operativas hasta tres aulas para niños de tres años, lo que contrasta con la situación actual y deja a los padres con muchos interrogantes, pues consideran que “se debería tener en cuenta las necesidades de los alumnos y facilitarles lo máximo posible su inscripción en un centro público”.

“Ya no son sólo las condiciones, sino que tampoco habilitan aulas. Lo que genera esta situación es que si quieres que tus hijos estén en la zona del colegio Andrea Casamayor tengas que pagar un colegio concertado, que también creemos que puede ser otro de los intereses. Además, el hecho de que haya tan pocas aulas significa que tendrán que despedir a las profesoras. No entendemos el hermetismo que hay, nos sentimos desamparados. Hay un desinterés total por solventar la situación. Lo peor de todo es que se trata de un colegio público, no entendemos nada”, concluye la madre de uno de los alumnos.

La cronología de las obras en el colegio

Tal y como han señalado los padres consultados por este medio, fue durante el curso 2017-2018 cuando la Comunidad de Madrid abrió dos aulas en este colegio, una para el primer ciclo de infantil de tres años y otra para el segundo ciclo de infantil de cuatro años. Sin embargo, no existía un edificio construido y los alumnos inscritos tuvieron que estar desplazados en el colegio Virgen de la Ribera, a más de 2,5 km de su ubicación, con todos los inconvenientes logísticos que esto conlleva. 

Para el curso siguiente el edificio de infantil de CEIP Andrea Casamayor abrió sus puertas en “unas condiciones lamentables, con paredes recién pintadas o colillas en los areneros. Horas antes de abrir sus puertas todavía estaban los obreros trabajando”, señalan los padres de los alumnos. El centro fue calificado por unos periodistas como "el peor centro de toda la Comunidad de Madrid".  Al parecer, los alumnos no tenían comedor y se veían obligados a comer en el aula. Por si fuera poco, muy cerca de los niños continuaban los obreros trabajando.

Situación actual de colegio

Para el curso 2019-2020 se instaló el único trozo de patio que hay para primaria con unos farolillos y cristaleras, lo que resultaba incompatible con algunas actividades de los niños, como jugar a la pelota. En los años posteriores, el número de alumnos fue creciendo sin que se empezara la ampliación. En el siguiente curso —el de la pandemia— se establecieron aulas modulares, es decir, prefabricadas. 

La precaria situación llegó hasta el punto de que los alumnos de 2º de primaria estuvieron hasta febrero de 2021 recibiendo clases en el comedor, separados con biombos y pizarras sujetas a lavabos sin anclar donde la maestra tenía que pedir a las alumnas/os que no se acercaran para evitar accidentes. En febrero de 2021 pasaron a ocupar una de las aulas modulares. Sin embargo, los alumnos de 1º de primaria usaban el aula de psicomotricidad debido a los protocolos COVID.

Con la llegada del curso 2021-2022 pasaron a primaria tres clases más, por lo que el centro se encontraba con cinco aulas de primaria sin edificio para albergarlas. Cuatro clases quedaron alojadas en las aulas modulares y otra se habilitó en el gimnasio, lo que imposibilitó a los alumnos poder recibir clases de educación física. Según señalan los afectados, los alumnos carecían de las características mínimas para poder desarrollar su jornada lectiva y disfrutar del patio, teniendo que jugar en la rampa de la entrada.

Tras numerosas quejas por parte de los padres de los alumnos y varios reportajes que evidenciaban la precaria situación del centro en febrero de 2021 el director de Infraestructuras de la Comunidad de Madrid aseguró en la Asamblea de Madrid que las obras del colegio comenzarían en junio 2021 y que el centro estaría operativo en septiembre de 2022. No obstante, no empezó ninguna obra en la fecha marcada y en los presupuestos del año 2022 solo se dotó la construcción con 140.000 euros, una cantidad ínfima para un proyecto de 7 millones.

Los padres del colegio hablaron con la concejala de Educación de Paracuellos de Jarama, quien les contestó que el proyecto estaba en licitación y con los tiempos burocráticos la obra no empezaría hasta verano. Finalmente, las obras de ampliación no comenzaron hasta febrero de 2023 con un plazo de ejecución de 12 meses que ya se han cumplido. Tras varias gestiones de los padres, la Comunidad de Madrid indicó que el plazo de ampliación de la obra estaba fijado para el 2 de junio por lo que la ampliación del CEIP se entregará el 3 de junio de 2024.

Sobre los problemas de distribución de aulas para niños de 3 años de los cursos de infantil, los padres de los alumnos no se explican “cómo es posible que en nuestro municipio,  teniendo tres colegios públicos y dos concertados, se vayan a abrir para infantil de 3 años solo 5 aulas entre los tres colegios públicos y 7 aulas entre los dos concertados. Queremos soluciones y que se nos cuente la verdad. Pedimos que se nos apoye desde el Ayuntamiento y desde la Comunidad de Madrid y que el próximo curso escolar estos niños, que llevan tantos años sin colegio, tengan su centro al 100% y estas familias del municipio tengan plaza en un colegio cerca de su vivienda”.