Caso del mena fallecido en Canarias: Un testigo asegura que "Barrag fue asesinado por sus amigos"

La familia del mena Barrag E., de 17 años, continúa sumida en el duelo por la muerte, en noviembre de 2021, del joven en Gran Canaria. Las circunstancias bajo las que se produjo el fallecimiento están siendo investigadas por la Brigada de Homicidios de la Comisaría de la Policía Nacional de Las Palmas, que espera el examen toxicológico tras informar que ‘tuvo una muerte natural o sin signos de violencia externa’. Después de la autopsia, un familiar del menor se encargó de gestionar la documentación con el Consulado de Marruecos y repatriar el cuerpo de Barrag en enero de 2022 hasta su localidad de origen, en Dakhla, según ha sabido elcierredigital.com. 

Elcierredigital.com ha tenido acceso a un audio en exclusiva de un testigo que se encontraba presente a escasos metros del lugar en el que falleció el menor, en la Playa de Las Canteras. Según su versión, señala: “Barrag, fue asesinado un sábado, no me acuerdo de que día. Estaba yo en la estatua y lo único que oí fueron ambulancias y policías, y los amigos seguro que lo mataron, eso tenlo por seguro”.

Según esta información, el testigo decía estar situado en el momento de la muerte de Barrag en el perímetro de la zona de la playa, muy cerca del cadáver del joven, en una estatua, desde donde pudo observar cómo acudían los servicios de emergencias aquella noche.

Causas de la muerte

El Juzgado de Instrucción número 8 de Las Palmas de Gran Canaria decretó en un auto, dictado el 30 de noviembre de 2021 -al que ha accedido ElCierreDigital.com-, el sobreseimiento provisional y el archivo de la causa en base a diligencias de averiguación, por lo que, según esta resolución judicial, “no aparece debidamente justificada la perpetración del delito que ha dado motivo a la formación de la causa”. Según han manifestado fuentes cercanas a la familia, “se encuentran estudiando la posibilidad de reabrir el caso del menor”.

Fuentes de prensa de la Policía Nacional consultadas, confirmaron que “Barrag falleció por muerte natural, sin signos de violencia externa, pero no se descarta que podría haber sufrido una posible sobredosis de pastillas y alcohol, por lo que se ha solicitado un examen toxicológico”. 

Lugar desde el que el testigo vio lo sucedido con Barrag al lado de la Playa de las Canteras.

La versión de algunos allegados de Barrag -joven de origen saharaui-, apunta a otras hipótesis como “ajustes de cuentas, reyertas entre clanes o peleas con marroquíes” que “venían desde hacía tiempo atrás, cuando este menor era usuario del centro de menas de Puerto Bello, y sufría amenazas”, indican a este medio. Barrag antes de morir, había denunciado “palizas, maltrato y venta de drogas”, contra esta entidad de acogida gestionada por la Fundación Respuesta Social Siglo XXI, al sur de Gran Canaria. El menor había manifestado “tener miedo a represalias”.

Algunos ex trabajadores del centro de Puerto Bello, declaran que “varios monitores, al parecer, tenían antecedentes penales en Marruecos y en España, por lo que sospechan que nunca pudieron presentar certificado de antecedentes penales al ser contratados por esta fundación”. En relación a las presiones que sufría Barrag, estos mismos ex educadores confirman que “uno de los monitores que tenía antecedentes militares le pegaba, entonces, Barrag lo denunció pero en la fundación no le hicieron caso”. 

Perfil del menor fallecido

Fuentes cercanas a la madre de Barrag, confirman a elcierredigital.com que “este menor tenía una vida normal en Dakhla, donde residía con su familia. Era un buen estudiante, estaba sano, practicaba deporte, había obtenido el cinturón marrón de kárate”.

“Barrag no tenía necesidad de viajar a España”, subrayan, pero “una noche, el menor se quedó a dormir en casa de otros amigos adolescentes, con los que partió de madrugada en alguna patera de las mafias desde esta localidad marroquí hasta el sur de Gran Canaria, arribando al Muelle de Arguineguín. Se marcharon sin avisar a las familias, se fueron a la aventura por las oportunidades de vida que ofrece España”.

“Ante la desaparición repentina de los chicos, durante horas buscaron a los menores en Dakhla, hasta que ellos mismos contactaron con sus familias desde Gran Canaria, confesando que se habían trasladado en patera. Desde entonces, la madre de Barrag intentaba que su hijo regresara a casa, pero su gran dificultad fue que el niño viajó sin papeles, no tenía identificación ni pasaporte. Después supieron que los menores habían sido alojados en el centro de menas de Puerto Bello”, relata su entorno.

No obstante, matizan que el momento más duro para el joven Barrag “fue cuando al poco tiempo de llegar a Gran Canaria, el padre del menor falleció. El niño se sumió en una profunda tristeza porque estaban muy unidos”.

Retiró su condición de menor de edad ante la Fiscalía

En su relato ante la Fiscalía, a raíz de un incidente en el centro de menas de Puerto Bello, Barrag insistió en que era menor de edad, según ha podido saber elcierredigital.com. El menor de 17 años declaró que su fecha de nacimiento era 21 de enero de 2004, tal como aparece en su partida de nacimiento. 

Sin embargo, a través de un examen físico realizado en Gran Canaria -pruebas para certificar la edad de los menas-, se determinó que “la edad probable de Barrag era de 19 años”, por lo que se decretó su mayoría de edad. Fuentes consultadas explican que este decreto de la mayoría de edad emitido por la Fiscalía en mayo de 2021, se hizo extensible a la Policía Nacional, Subdelegación de Gobierno en Las Palmas de Gran Canaria, Fiscalía de Menores de Las Palmas y a la Sección de Extranjería de la Fiscalía Provincial de Las Palmas.

Posteriormente, tal como Barrag expresó a elcierredigital.com, “había solicitado una petición de asilo, a la espera de resolución”, a pesar de su minoría de edad. 

Financiación de Puerto Bello

La directora general de Protección a la Infancia y a la Familia del Gobierno de Canarias, Iratxe Serrano, según el Portal de Transparencia del Estado, adjudicó un contrato a la Fundación Respuesta Social Siglo XXI para el centro de menas Puerto Rico-Puerto Bello, en el municipio de Mogán, con fecha de entrada en vigor el 29 de diciembre de 2020 bajo la modalidad de ‘tramitación de urgencia’.

Este contrato está sujeto a regulación armonizada -al contrario que el contrato otorgado a esta fundación para el centro de menas Guiniguada-Vegueta-, negociado sin publicidad, por una cuantía de 451.412 euros para un plazo de ejecución de doce meses. 

Sin embargo, la propuesta que realizó el representante legal de la fundación, Rafael Bautista, ante esta dirección general del gobierno canario el 25 de noviembre de 2020 -documento al que ha accedido este medio-, fue de diez meses para 170 plazas de menas y por un precio de 95 euros por menor al día y 72 euros por plaza desocupada.

Finalmente, ante los altercados acaecidos en este centro, con intervenciones policiales diarias, protestas vecinales, denuncias de trabajadores y los reportajes publicados sobre este asunto por elCierreDigital.com, la entidad cerró estas instalaciones de menores en julio de 2021, meses antes del cumplimiento de esta adjudicación de fondos públicos por parte de la directora general, Iratxe Serrano, motivo por el que algunos juristas consultados se preguntan, “cómo se gestionó la liquidación de fondos públicos por parte de este fundación a tenor del cierre de la actividad”.