Hallado el cuerpo sin vida de Esther López: Hay sospechas de que el cadáver habría sido llevado en las últimas horas al lugar donde ha aparecido

La Guardia Civil ha encontrado el cuerpo de Esther López, la mujer de 35 años desaparecida desde el pasado 12 de enero. Se encontraba en una cuneta y ha sido hallado por un vecino que paseaba por la carretera que une Traspinedo y el polígono industrial cercano a la espera del resultado oficial de la autopsia.

A mediodía intervinieron en rueda de prensa la delegada del Gobierno en Castilla y León, Virginia Barcones, y el coronel de la Guardia Civil Juan Miguel Recio. Este confirmó que el hallazgo lo hizo una persona que paseaba, a las 10:30 de este sábado.

Según el coronel Recio, el cuerpo no estaba enterrado, sino en superficie, en una zona de pinos cercana a la carretera entre el pueblo y el polígono. Esta zona ya había sido inspeccionada por los agentes por lo que la hipótesis que cobra más fuerza es que alguien podría haber dejado el cuerpo allí esta madrugada.

Por su parte, Barcones, que confirmó que la familia de Esther López fue la primera en enterarse del hallazgo, dijo que a lo largo de la tarde se produciría el levantamiento del cuerpo, y mostró su confianza en que la Guardia Civil esclarezca los hechos.

Carreteras cortadas

Tras producirse el hallazgo, la Benemérita cortó este sábado por la mañana los accesos por carretera al pueblo, y los trabajos se centraron en unas parcelas anexas a la carretera de acceso al pueblo, a solo tres kilómetros del núcleo del mismo.

En el lugar de los hechos había agentes de la Policía Judicial, ataviados con monos blancos de protección. En la zona donde se ha encontrado el cadáver ya se habían producido batidas.

Sin rastro desde el 12 de enero

Esther López fue vista por última vez el pasado 12 de enero de madrugada, a las afueras de Traspinedo, una localidad de unos mil habitantes, junto a un cruce la carretera N-122.

La Guardia Civil, tras la denuncia por la desaparición, rastreó las proximidades del pueblo, que dista unos 25 kilómetros de la capital vallisoletana, con distintas unidades del instituto armado, unas labores que se han desarrollado cada día.

Se mantienen abiertas varias líneas de investigación, tras la detención de Ramón El Manitas el 22 de enero, cuya vivienda fue analizada durante varias jornadas con una minuciosa investigación ocular y cuyos resultados están a la espera de las pruebas de laboratorio.

Tras pasar las primeras 72 horas detenido y prorrogar la juez por el mismo plazo, el Manitas quedó en libertad provisional el pasado viernes, aunque debe comparecer todos los días ante la autoridad judicial, no puede salir de España y tiene que comunicar cualquier cambio de residencia.

Además de Ramón, cuya vivienda se encuentra en una urbanización a las afueras de Traspinedo cercana a la zona donde se perdió la señal del móvil de la desaparecida, la Guardia Civil investiga a otro vecino del pueblo del que no ha trascendido su identidad.