El explorador Travis J. King huyó desde Seúl al país asiático cruzando la zona desmilitarizada a mediados de julio y aún no se conoce su estado
Corea del Norte, el 'paraíso' del hermetismo: Sin noticias del militar americano desaparecido

El soldado estadounidense Travis J. King, que se encuentra en paradero desconocido en algún punto de la geografía norcoreana, acumuló varias faltas como militar destacado temporalmente en Corea del Sur, antes de cruzar la frontera hacia Corea del Norte sin autorización y provocar una nueva crisis diplomática entre los gobiernos de Washington y Pyongyang.

Travis J. King
King ingresó al ejército norteamericano en enero del 2021, ocupando el rango de explorador de caballería en la Primera División Acorazada. En septiembre del año 2022, el militar de 23 años fue investigado por presuntamente agredir a un ciudadano coreano en un club nocturno en Seúl, según reportaron diversos medios de comunicación locales.
Posteriormente, King fue multado y obligado a pagar 3.950 dólares americanos por "patear repetidamente" la puerta trasera de un vehículo policial y gritar "palabras obscenas" a los agentes que intentaban detenerlo. Fue puesto en libertad el 10 de julio, después de pasar dos meses en la cárcel por cargos de agresión, precisaron algunos funcionarios a varios medios de comunicación internacionales. King estuvo bajo custodia militar durante una semana en Corea del Sur.
La fuga de King
Debido a su conducta, el soldado fue escoltado hasta el aeropuerto internacional de Incheon, en Seúl, para tomar un vuelo de regreso a Estados Unidos, donde se enfrentaría a medidas disciplinarias. Sin embargo, King nunca llegó a subir al avión. Un funcionario del aeropuerto confesó para el diario The Korea Times que King llegó solo a la puerta de embarque porque no se permitió que agentes de la policía militar lo acompañaran hasta el avión.

Travis J. King
Una vez allí, King se acercó a un empleado de la compañía American Airlines para explicarle que su pasaporte había desaparecido. Un trabajador de la aerolínea lo escoltó fuera del área de despegue de los vuelos. Una vez consiguió separarse de su escolta, King encontró la forma de abandonar la terminal para dirigirse a la Zona Desmilitarizada entre Corea del Norte y Corea del Sur, área que los extranjeros pueden visitar a través de compañías turísticas y que está fuertemente vigilada por ambos países.
El dilema sobre las intenciones del militar
No se ha llegado a esclarecer todavía cómo King logró participar en uno de esos recorridos, dado que generalmente toma entre tres días y una semana que una persona reciba la autorización para realizar esas visitas, que son monitoreadas muy de cerca.
Un testigo presencial en el recorrido turístico fronterizo dijo haber escuchado al soldado reírse a carcajadas antes de cruzar corriendo la frontera. Claudine Gates, madre de King, explicó para diversos medios de comunicación que tuvo noticias de su hijo poco tiempo antes de su desaparición, cuando este le comentó que pronto regresaría a Fort Bliss, su base militar en Texas.

Travis King en el recorrido turístico de la Zona Desmilitarizada
La madre de King aseguró que no podía imaginarse a su hijo cruzando la Zona Desmilitarizada. Hasta el momento se desconocen cuáles eran sus intenciones al cruzar la frontera. Las autoridades estadounidenses precisaron que lo hizo de forma deliberada.
El Comando de las Naciones Unidas que opera en la Zona Desmilitarizada dijo que cree que el soldado ahora se encuentra bajo custodia del ejército de Corea del Norte. Un alto comandante estadounidense dijo que hasta el momento no ha habido contacto con el soldado y que el incidente es investigado por las Fuerzas Armadas estadounidenses en Corea del Sur.
Respuestas insuficientes
El Departamento de Defensa de Estados Unidos indicó el pasado martes día 1 que Corea del Norte rompió su silencio y ha respondido al Mando de Naciones Unidas, que trató de contactar hace más de una semana con las autoridades norcoreanas para intentar recuperar al soldado estadounidense. El portavoz del Pentágono, el general Patrick Ryder, señaló en una rueda de prensa que, a pesar de la respuesta, no hay información sobre el estado del soldado.

Patrick Ryder
"No tengo ninguna actualización sobre el estado del soldado King. El Mando de Naciones Unidas se comunicó a través de canales bien establecidos de la Agencia de Seguridad Conjunta. Puedo confirmar que la República Popular Democrática de Corea (RPDC) ha respondido, pero no tengo ningún progreso sustancial que anunciar", declaró Ryder sobre sus comunicaciones con los líderes norcoreanos.
Ryder explicó también que el mensaje de Corea del Norte al Mando de Naciones Unidas ha sido únicamente un reconocimiento de la existencia de la investigación iniciada por parte de ese organismo, liderado por Estados Unidos.
Diversas fuentes del Ejército de Estados Unidos han señalado a través de varios medios de comunicación que no había indicios de que el soldado estuviera tratando de desertar y que será retirado del servicio una vez aterrice en suelo estadounidense.
El Mando de Naciones Unidas es una fuerza militar multinacional liderada por Estados Unidos que luchó del lado de Corea del Sur durante la Guerra de Corea (1950-1953), una guerra que separó el país en dos mitades, divididas por el Paralelo 38. Controla el lado surcoreano del Área de Seguridad Conjunta, el único lugar donde los líderes de ambas Coreas pueden reunirse para negociar.
Las tensiones entre los bloques
Las relaciones entre el bloque conformado por Corea del Sur y Estados Unidos y el régimen norcoreano no atraviesan su mejor momento. Es más, la creciente tensión ante el lanzamiento de misiles balísticos llevó al gobierno norteamericano a enviar el pasado 18 de julio a las aguas surcoreanas al USS Kentucky.
El Kentucky es un sumergible de propulsión atómica capaz de portar hasta 20 misiles balísticos y con capacidad de lanzarlos a más de 12.000 kilómetros. Es la primera vez desde la década de 1980 que Estados Unidos envía a Corea del Sur una nave de estas características.

Submarino USS Kentucky
La Casa Blanca hizo este envío para aumentar la presión contra el Gobierno de Kim Jong-un y desincentivar el posible uso de armas nucleares en la región. Sin embargo, Pyongyang no vio con buenos ojos la llegada del submarino estadounidense a las costas de su vecino.
El pasado 18 de julio, coincidiendo con la llegada del 'USS Kentucky' a costas surcoreanas, Kim Yo Jong, hermana de Kim Jong-un, afirmó que el envío de este navío estadounidense saca a Corea del Norte de la mesa de negociaciones “más que nunca".
En la madrugada del día 19, autoridades japonesas y surcoreanas reportaron que dos misiles balísticos de corto alcance fueron lanzados desde la capital de Corea del Norte, y aunque ambos dispositivos cayeron en mar internacional y no provocaron daño alguno, Japón condenó el uso de este armamento.