24 de abril de 2024
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FIN DE SEMANA

Pretendían crear "comunidades blancas aisladas y armadas" financiadas con la venta de sustancias psicotrópicas

Detenidos dos supremacistas blancos que querían comenzar una "guerra racial" en España

Las fuerzas de seguridad en la operación contra el supremacismo blanco.
Las fuerzas de seguridad en la operación contra el supremacismo blanco.
Dos hombres han sido detenidos en una operación de la Guardia Civil y los Mossos d’Esquadra, como autores de presuntos delitos contra la salud pública, incitación al odio contra extranjeros, tenencia de armas y explosivos y enaltecimiento del terrorismo racista. Las dos personas están vinculadas al supremacismo blanco y difundieron en redes mensajes en los que aludían a una “guerra racial” y mostraban su intención de abastecerse con armas. Querían crear “comunidades blancas aisladas y armadas”.

La Guardia Civil y los Mossos d’Esquadra han detenido a dos personas de nacionalidad española en el marco de una investigación contra el supremacismo blanco. Los dos detenidos están vinculados con este supremacismo y han perpetrado, presuntamente, delitos de incitación al odio contra extranjeros, tenencia de armas y explosivos, enaltecimiento del terrorismo racista y contra la salud pública.

Esta investigación lleva en vigor desde finales de 2019. En esa fecha, se localizó en Internet un documento publicado por un investigado. Dicho documento servía como un ideario o guía programática. “Tenía muchos elementos en común con otros escritos hechos por terroristas vinculados a la supremacía blanca”, aseguran en un comunicado la Dirección General de la Guardia Civil, los Mossos d’Esquadra y el Ministerio del Interior.

De este modo, a raíz de la investigación en curso, surgieron estas nuevas detenciones. Fue determinante el 11 de septiembre, día en el que se tuvo conocimiento de que uno de los investigados tenía la intención de “suministrar sustancias químicas para inhibir la voluntad de una mujer con el objetivo de mantener relaciones sexuales”. Tras averiguar estos hechos, se montó un dispositivo policial que se saldó con la detención de dos hombres españoles en Pobla de Cérvoles (Les Garrigues) y en Campello (Alicante).

Respecto a la operación actual, las fuerzas de seguridad aseguran que todos los investigados están vinculados “a dicha ideología racista que defiende la superioridad de la raza blanca por encima del resto”. Se ha averiguado que todos los detenidos, tanto los dos de ahora como los de septiembre, incitan a cometer ataques contra personas de otras razas. Las detenciones se han producido en Pamplona y en Ronda, localidad malagueña donde se registró la vivienda de uno de los supremacistas. Allí los agentes encontraron elementos delictivos, como “diversa simbología de carácter nacionalsocialista, sustancias estupefacientes, armas blancas o material informático”.

Comunidades armadas formadas solo por blancos

La investigación policial arroja que los detenidos de ahora pretendían financiar la creación de “comunidades blancas aisladas y armadas”. Para ello, cultivaban y vendían sustancias psicotrópicas. Ambas personas, según la Guardia Civil y los Mossos, dentro de los canales de difusión que empleaban para difundir sus mensajes de odio ocupaban un nivel jerárquico similar al de los primeros detenidos.

Asimismo, los investigadores detectaron tres grandes pilares que caracterizaban el supremacismo blanco de los detenidos. En primer lugar, “su marcado nacionalismo blanco que justifican con una base científica que posiciona a los blancos por encima del resto de razas humanas". El segundo es “su postura antisistema”. El comunicado asegura que los supremacistas consideraban que la clase política actual perjudicaba a propósito a las personas blancas, favoreciendo la “inmigración clandestina norteafricana hacia Europa”. Por último, justificaban el “uso de la violencia”, así como “el enaltecimiento de acciones terroristas producidas hacia inmigrantes o colectivos no blancos".

Respecto a la propagación de sus mensajes, difundían sus ideas en páginas web y canales de mensajería instantánea. Mediante la creación de perfiles en redes sociales lanzaban “mensajes de contenido racista contra otros colectivos por razón de su raza, origen, creencias, manifestaciones políticas, sexo u orientación sexual”. También publicaron mensajes de alabanza a terroristas como Brenton Tarrant, quien asesinó a 51 personas en dos mezquitas en la ciudad neozelandesa de Christchurch a principios de 2019.

Intentaron poner en práctica estas comunidades

El concepto de “comunidades blancas aisladas y armadas” era frecuentemente defendido en sus mensajes en Internet. Apostaban por crear comunidades “autosuficientes en entornos rurales” sin personas de raza negra y manifestaban su intención de proveerse de armas para comenzar una “guerra racial”. “Según decían y defendían, prepararse para este conflicto sería la única forma en que la raza blanca podría sobrevivir a la llegada de otros colectivos de extranjeros que, siempre según sus manifestaciones, actualmente se está produciendo de forma masiva en los países occidentales”, expresan las fuerzas de seguridad.

Para la creación de una de estas comunidades, los detenidos del 11 de septiembre realizaron una especie de proyecto piloto de la experiencia: Vivieron en dos casas aisladas durante varios meses en Pobla de Cérvoles. Gracias a los resultados de la investigación, la Guardia Civil y los Mossos d’Esquadra consiguieron controlar “la supuesta comunidad aislada que pretendían crear”.

“Esta operación es considerada de especial relevancia para los investigadores, dado el creciente extremismo del nacionalismo blanco de ultraderecha, el cual supone una clara amenaza para la seguridad a corto y medio plazo” aseguran las fuerzas de seguridad. Los detenidos han pasado a disposición judicial, quedando en libertad con cargos con la obligación de presentarse a firmar de manera periódica en el juzgado.

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