20 de abril de 2024
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FIN DE SEMANA

Crimen Ciudad Lineal: Condenan a 19 años al asesino que mató a Esther Escobar por negarse a ser su pareja

Crimen Ciudad Lineal: Condenan a 19 años al asesino que mató a Esther Escobar por negarse a ser su pareja

Exclusiva Esther Escobar.
Esther Escobar.
El crimen de Ciudad Lineal (Madrid) ya tiene sentencia. La Audiencia Provincial de Madrid ha condenado al asesino de Esther Escobar a 17 años de cárcel y dos años más por tenencia ilícita de armas, frente a los 25 que pedían el fiscal y la acusación particular. El tribunal reduce la pena porque aprecia los atenuantes de confesión y de “arrebato”. La familia de Esther anuncia que recurrirá la sentencia.

En junio de 2019, Antonio Leal entabló una relación de amistad con la víctima, Esther Escobar, de 40 años, que la mujer decidió terminar en febrero de 2020 ante la insistencia del hombre por mantener una relación sentimental. La sentencia, en sus hechos probados, relata que Antonio Leal no aceptó el rechazo de Esther ya que quería a la mujer “sólo para él”. De hecho, Antonio acosaba continuamente a Esther y a sus hermanas por mensajes vía telefónica, con ruegos y amenazas, incluso llegando a presentarse en el club donde trabajaba la víctima y en el establecimiento comercial que regentaba su hermana en el barrio madrileño de Ciudad Lineal.

Precisamente fue en ese barrio donde Esther se citó por última vez con su verdugo para comunicarle que tenía otra pareja, desconociendo que la intención de Antonio Leal era asesinarla a sangre fría. Sobre las 19:10 horas del 26 de febrero la pareja se vio en la calle Virgen de los Reyes de Madrid cuando, de forma sorpresiva para evitar que Esther pudiera defenderse, Antonio Leal sacó un arma de fuego del calibre 6’35 y disparó a Esther en la cabeza a quemarropa, matándola prácticamente el acto.

El autor inició la fuga de inmediato aunque acabó entregándose a la policía local de Albacete cuatro días después, confesando a gritos el crimen en plena calle. “Agentes, yo maté a Esther en Madrid, estaba harto de que se comiera las pollas de otros”, les dijo a los policías. En su coche, los agentes encontraron un arma ilegal, que no era con la que se había cometido el crimen, y la camisa que el asesino llevaba cuando mató a Esther. Las cámaras de vigilancia de la zona le grabaron segundos antes y después del crimen vestido con esa camisa que, posteriormente, dio positivo a la prueba de residuos de disparo. Antes de entregarse, el asesino se había tatuado el nombre de la víctima durante los días en que estuvo fugado.

Imágenes de Esther Escobar y Antonio Leal.

Ahora, tras el veredicto de culpabilidad emitido por el jurado popular, el presidente del Tribunal ha condenado a Antonio Leal a 17 años por el asesinato de Esther y a dos años más por tenencia ilícita de armas, frente a la Fiscalía, que pedía 24,5 años de cárcel, y la acusación particular, que solicitaba 25 años.

Los ocho años de cárcel de diferencia a favor del acusado entre la pena que solicitaban las acusaciones y la sentenciada por el juez se debe a la aplicación de dos atenuantes por parte del tribunal. El tribunal le rebaja la pena al asesino porque el jurado popular da por probado que Antonio Leal estaba obsesionado con la mujer y actuó “ofuscado” cuando la mató por negarse a ser su pareja. Explica la sentencia que la obsesión del asesino con la víctima, junto a que tras matarla se hizo un tatuaje con su nombre, demuestran que se puede apreciar el atenuante de “estado pasional con carácter simple” para rebajarle la pena.

El otro atenuante que aplica el tribunal es de confesión espontánea. La ley es explicita en este asunto cuando exige que la confesión se mantenga durante todo el proceso, desde antes de la detención hasta el final del juicio. Sin embargo, aunque Antonio Leal confesó su crimen en Albacete y negó posteriormente los hechos declarándose inocente durante el juicio, el tribunal opina que su primera confesión espontánea permitió su detención y el hallazgo de la camisa con restos de pólvora, razón por la que le aplica la reducción de pena, ya que fue absolutamente relevante para su condena.

El tribunal sí rechazó aplicar una tercera atenuante que solicitaba la defensa del condenado por actuar el asesino, supuestamente, bajo los efectos de las drogas en el momento del crimen. Igualmente, el tribunal aplicó el agravante de género, redundando en un aumento de la pena.

Familiares de Esther Escobar. 

La sentencia no ha dejado indiferente a nadie. La acusación particular que ejerce Sonia, la hermana de la víctima, a través del letrado Juan Manuel Medina, recurrirá la sentencia en breve. Rechazan que se pueda aplicar al asesino la atenuante “pasional” en un crimen ejecutado a sangre fría con la premisa “o eres mía o de nadie más”, algo que indigna a los familiares de Esther. Igualmente, rechaza que se le aplique la atenuante de confesión al asesino, ya que después de que se entregara se ha negado a colaborar con la Justicia hasta la fecha.

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