La historia del matrimonio de científicos que ha inventado la vacuna contra el COVID
BioNTech y Pfizer han desarrollado el remedio más efectivo hasta ahora.
La empresa alemana Pzifer daba la noticia esta semana de que posee una vacuna que responde al 90 por ciento de efectividad contra el coronavirus. Lo han hecho gracias a su alianza con BioNtech, fundada por un matrimonio de científicos de origen turco.
Uno de los fundadores de BioNtech, el doctor Ugur Sahin nació en Iskenderun, Turquía en 1965. A los 4 años emigró con su familia a Colonia, Alemania. Desde pequeño quería ser doctor y, cumpliendo sus objetivos se graduó en medicina por la Universidad de Colonia. En 1993, consiguió el doctorado gracias a su investigación sobre la inmunoterapia en las células tumorales.
Prácticamente al inicio de su carrera, conoció a la doctora Özlem Türeci, nacida en Alemania pero de ascendencia turca, se graduó también en medicina y actualmente es la cofundadora de BioNTech y jefa del departamento médico de la empresa.
Ambos doctores se casaron y, en un principio, estaban enfocados a la investigación y la enseñanza en centros universitarios, como la Universidad de Zurich, donde Sahin trabajó en el laboratorio de Zinkernagel quien, en 1996, ganó el Premio Nobel de Medicina.
En 2001, Sahin y Türeci fundaron Ganymed Pharmaceuticals, donde desarrollaron varios medicamentos para el tratamiento del cáncer. Pero, después de varios años, fundaron la actual BioNTech buscando ampliar la gama de tecnologías para el tratamiento del cáncer. Antes de la pandemia, la empresa ya ganaba cientos de millones de dólares y tenía en plantilla más de 1800 trabajadores repartidos entre sus sedes de Berlín, Cambridge y otras ciudades alemanas.
La historia detrás de la vacuna
En 2018, el doctor Ugur Sahin dio una conferencia en Berlín donde aseguraba que su compañía podría ser capaz de desarrollar una vacuna efectiva en caso de una pandemia mundial gracias a las técnicas tecnológicas y de investigación que emplean (messenger RNA technology). Este discurso resultó ser una predicción de lo que pasaría en este 2020.
En ese momento, BioNTech, la compañía que fundó el doctor Sahin junto con su esposa la doctora Özlem Türeci, era una empresa conocida únicamente dentro del mundo de la biotecnología europea y se dedicaba principalmente a la investigación de tratamientos contra el cáncer.
BioNTech empezó a trabajar en la vacuna del coronavirus en enero después de que Sahin leyera un artículo en un diario especializado en medicina sobre el avance del virus en China. Pensó que al estar expandiéndose a esa velocidad por el país asiático podría llegar a convertirse en una pandemia que afectaría a todo el mundo, y no se equivocó. En ese momento la compañía comenzó a trabajar en el proyecto llamado ‘Lightspeed’.
Después de haber producido varias posibles vacunas, el siguiente paso era testar todas las posibilidades para, finalmente, sacar al mercado la más efectiva. La farmacéutica Pzifer quién ya colaboraba con la empresa de Sahin y Türeci desde 2018 en el desarrollo de una vacuna contra la gripe, decidió en marzo empezar a colaborar en la búsqueda de la vacuna contra la Covid-19.
“No hay muchas compañías en el mundo que tengan la capacidad y la competencia de hacer esto tan rápido como nosotros, por lo que no lo veo como una oportunidad sino como un deber que tenemos que hacer, porque nos hemos dado cuenta que podríamos estar entre los primeros en dar con una vacuna efectiva” declaró el fundador en una entrevista.
El pasado lunes 9 de noviembre, BioNTech y la farmacéutica Pfizer anunciaron que la vacuna que estaba desarrollando el doctor Sahin y su equipo tenia más de un 90% de efectividad en la prevención de la enfermedad.
Estos resultados ponen a Pzifer y BioNTech a la cabeza en la carrera por encontrar la cura para esta enfermedad que ya se ha cobrado la vida de más de un millón de personas en el mundo. “Puede ser el principio del fin de la era Covid” ha declarado Ugur Sahin.
Más noticias: