25 de abril de 2024
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FIN DE SEMANA

Trucos para conservar las manzanas para que duren más tiempo

Vivimos en la sociedad del consumo inmediato. Usar y tirar. Desgraciadamente, esto también es cierto respecto a nuestros hábitos alimentarios. Sobreexplotamos la tierra para extraer de ella productos con los que llenar la despensa. Sin embargo, a nuestra dieta le sobran grasas, procesados, azúcares ...y le falta fruta y verdura. 

Mientras producimos más de lo que necesitamos, también malgastamos comida. Alrededor de 1300 millones de toneladas de alimentos (⅓ de la producción mundial) termina en el contenedor. Buena parte se desperdicia en la fase de distribución, y otra en la de consumo. ¿Cuántas sobras tenemos que tirar a la basura cada día? Cada pocos días debemos limpiar la nevera de productos caducados o que prácticamente se pudrieron dentro del frigorífico. 

Así pues, ¿cómo evitarlo? ¿De qué manera conservar en buenas condiciones aquello que no consumimos a tiempo? Piensa en las frutas, por ejemplo. Nos referimos a ellas porque todos los expertos en nutrición, así como organismos internacionales dedicados a la prevención y mantenimiento de la salud, recomiendan una ingesta diaria de fruta en la mayor variedad posible. 

Centrémonos en la manzana. Como es lógico, al comprar manzanas deseas que las piezas que no has consumido a tiempo resulten apetecibles transcurridos unos días desde que las adquiriste. Esperas que no hayan perdido sabor y/o propiedades. 

En ese sentido, la manzana es una fruta climatérica. Eso significa que sigue madurando después de la recolección, pero lo hace a un ritmo más lento que otras frutas, por lo que aguanta en buen estado si se aplican determinadas técnicas de conservación. Más adelante hablaremos de ellas. 

Supongamos que te has dedicado a comprar manzanas de calidad, y que para ello has recurrido a la frutería online. Acabas de hacer un pedido generoso porque, aunque durante casi todo el año puedes encontrar alguna variedad de manzana, se trata de una fruta de temporada otoñal e invernal. Y es precisamente en estos meses de frío cuando más apetece consumir manzanas, sea consumo en crudo, naturales y frescas, o en compota, en tarta, horneadas... Si después de comprar manzanas quieres saber cómo conservarlas, sigue leyendo.

Cómo conservar las manzanas: características y variedades

Empezaremos diciendo que la manzana es una fruta que madura lentamente. Esto hace que desprenda etileno. El etileno es un gas que producen de forma natural las frutas y verduras. La llaman hormona del envejecimiento. Este gas afectará a otras frutas que se encuentren almacenadas junto a las manzanas. 

El consejo es, después de comprar manzanas, guardarlas separadas. Claro, no debes seguir esta recomendación si lo que buscas es que causen justo ese efecto, es decir, el de acelerar el proceso de maduración de las frutas que estén cerca de ellas.

¿Verdad que hay frutas que suelen presentarse duras, como los kiwis o los aguacates? Pues en esos casos, tenerlas cerca puede hacer que el "envejecimiento" vaya más rápido.

Por otra parte, no todo tipo de manzana es igual de duradera. Puedes comprar manzanas de sabor ácido o menos dulce, más pequeñas y de piel gruesa, ya que son las que aguantan mejor. Así como variedades de manzana de piel fina, del estilo Red Delicious, tienden a echarse a perder pronto, otras aguantan bien durante semanas, e incluso meses.

Son resistentes la manzana Granny Smith, la Gala, la Pink Lady... pero sobre todo lo son las manzanas Fuji, de las que mayor surtido encontrarás. Además, otra de las ventajas de hacer tu pedido online es que al comprar manzanas podrás despreocuparte de la elección de los ejemplares de manzana, ya que serán los propios productores quienes seleccionen por ti las piezas más aptas.

Métodos de conservación de la manzana

Cuando hablamos de los métodos de conservación de la manzana, debemos diferenciar principalmente entre el método profesional y el doméstico. Empezaremos haciendo referencia al profesional, pero nos centraremos sobre todo en el doméstico, que es el que realmente puede interesarte.

Método profesional

Quienes trabajan de forma profesional con la fruta usan sus propios métodos de conservación para asegurar su larga vida útil. En el caso de las manzanas, estas se conservan a lo largo de meses a una temperatura constante de 0 - 5º en atmósferas controladas de alta humedad y reducción de oxígeno.

Método doméstico

En el ámbito doméstico, la conservación de las manzanas puede darse tanto a temperatura ambiente como en el frigorífico. Vamos a hablarte de ambas.

A TEMPERATURA AMBIENTE

Tratándose de una conservación que no sea demasiado prolongada en el tiempo - es decir, corto y medio plazo - sería suficiente con que, tras comprar manzanas, las guardaras en un lugar poco caluroso de la casa.

Recomendamos sobre todo aquellos rincones oscuros y con cierta humedad, como por ejemplo un sótano. Si no cuentas con él ni con ningún espacio que se le parezca, puedes aumentar la humedad colocando recipientes con agua o paños humedecidos. 

Si vas a dejar las manzanas durante semanas en un sitio como el que acabamos de indicar, te sugerimos que, después de comprar manzanas, las envuelvas en papel. El papel deja respirar a la manzana, pero la protege de agentes externos como los insectos, y también de que una manzana estropeada pudiera dañar al resto.

Otra recomendación: procura que exista algo de espacio entre las manzanas.

EN FRIGORÍFICO

Cuando se trata de mantener el máximo tiempo posible las manzanas en condiciones óptimas de consumo, la opción preferente es almacenarlas en el frigorífico.

Estos son los mejores trucos para conservarlas de esta manera:

  • Tras comprar manzanas guárdalas secas, metidas en una bolsa
  • Suponiendo que las manzanas estuvieran peladas o cortadas, sumérgelas en agua con 1/3 de limón. Luego cúbrelas con papel film en la nevera.
  • Elimina los trozos de las manzanas que puedan tener golpes o lesiones para que no se extiendan al resto de la pieza.

Beneficios de comprar manzanas

An apple a day keeps the doctor away.  Este es el dicho original, que traducido significa "una manzana al día mantiene al doctor en la lejanía". Y no podemos estar más de acuerdo con esta idea.

La manzana tiene un alto contenido en fibra soluble. Esta característica debemos sumarla a su riqueza en vitaminas B y C, antioxidantes o minerales. Esta fruta también contiene ácidos como el málico o el tartárico, que convierten a la manzana en un alimento de efectos terapéuticos. 

Por si fuera poco, la manzana es saciante, drenante, protege el sistema cardiovascular, regula el tránsito intestinal, fortalece los dientes y las encías... En definitiva, comprar manzanas trae un sinfín de beneficios que abarcan todos los ámbitos de la salud.

Lo más aconsejable es realizar un consumo en crudo de la fruta, a fin de que aporte la mayor cantidad de nutrientes a tu organismo. No obstante, la manzana ofrece alternativas de cocinado muy diversas. Es una de las frutas más versátiles en la gastronomía.

Te recomendamos comprar manzanas que hayan sido recogidas y conservadas de manera que ninguna de sus propiedades disminuya. Serán también esas las que mejor conservación garanticen. Lo que no debes permitir es que se estropeen en el frutero o la despensa. Esperamos con estos trucos ayudarte a conservar tus manzanas para que puedas disfrutar de ellas durante mucho tiempo.

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