Las redes sociales y los trastornos alimentarios: El peligro de alcanzar la perfección

Un escaparate de cuerpos perfectos, caras sonrientes y una vida aparentemente sin preocupaciones. Así es como muchos jóvenes conciben muchos de los perfiles que circulan por las redes sociales con los que se comparan, pudiendo afectarles a la salud tanto psicológica como física. El entorno virtual se percibe como un mundo idílico en el que no hay cabida para la imperfección ni la infelicidad.

La imagen que transmiten estos influencers es el objetivo que se plantean muchos adolescentes, una imagen que perciben como perfecta quienes son más sensibles a este tipo de contenido. La obsesión de muchos adolescentes por conseguir el canon de belleza perfecto ha derivado en que las redes sociales se hayan convertido en el ‘escalón’ hacia los Trastornos de Conducta Alimentaria (TCA)

#Pérdidadepeso, la peligrosa etiqueta de Tik Tok

Un reciente estudio de la plataforma de control parental Qustodio refleja que los menores españoles pasan un total de 1.460 horas al año frente a las pantallas y entre las redes sociales más populares que consumen los adolescentes Tik Tok ocupa el primer puesto. Su uso se llegó a incrementar hasta un 21,3% en 2021. 

Aunque el activismo en torno a la normalización de los cuerpos y el movimiento ‘Body Positive’ es una tendencia bastante notoria en las redes sociales como Tik Tok, Instagram o Facebook parece ser que  muchos de los perfiles vinculados al mundo de la moda pretenden rescatar el ideal de belleza de la década de los noventa: medidas perfectas y cuerpos excesivamente delgados.

Algunas de las cuentas de Tik Tok que promueven el contenido pro anorexia. 

Además de Instagram o Facebook, la plataforma Tik Tok se ha unido a la tendencia de viralizar consejos sobre alimentación o ‘dietas milagro’ para perder peso y llegar a tener un cuerpo perfecto. En dicha plataforma la etiqueta #Pérdidadepeso ha recibido alrededor de 10.000 millones de visitas aunque solo el 1,4% de las pautas nutricionales han sido publicadas por profesionales del ámbito de la alimentación. 

Las publicaciones ofrecen ayuda para perder peso, cambios en el estilo de vida además de consejos para superar el hambre como masticar chicle o beber agua con limón. Estas conductas pueden llegar a ser nocivas para la salud y, según los expertos, en el caso de querer realizar una dieta es crucial seguir las pautas de un profesional médico

Los TCA, una problemática en redes sociales

Las redes sociales son en muchos casos un factor de riesgo para que muchos adolescentes puedan llegar a desarrollar trastornos de la conducta alimentaria como anorexia o bulimia. La adolescencia es una edad complicada en la que las preocupaciones se suelen llevar al extremo por lo que muchos de los menores preocupados con su apariencia buscan en las redes perfiles que "comprendan su problema", dando credibilidad a los consejos de personas sin ningún tipo de conocimiento acreditado que dan consejos y trucos para adelgazar rápido y verse bien.

Para muchos adolescentes las redes sociales son una vía de escape y un espacio donde pueden encontrar la manera de erradicar la insatisfacción que sienten hacia su aspecto físico aunque, en la mayoría de ocasiones, el contenido que consumen es erróneo. Muchos menores siguen  dietas estrictas, realizan tablas de ejercicios extenuantes o incluso han llegado a ingerir fármacos sin prescripción medica por el hecho de que fuera recomendado por un influencer.

El informe Los archivos de Facebook, publicado por 'The Wall Street Journal' reflejó que "un 32% de chicas dicen que cuando se sienten mal con su cuerpo, Instagram les hace sentir peor". Además, el documento también señala que "las comparaciones con lo que ven en Instagram pueden alterar el modo en que las jóvenes se perciben y describen a sí mismas" por lo que hay un alto número de probabilidades para el desarrollo de un trastorno de la conducta alimentaria.