Un año sin Lorenzo Sanz, la vida del histórico expresidente del Real Madrid víctima de Covid-19

Empresario y vicepresidente del club blanco en los años 80, el que fue sucesor de Ramón Mendoza logró la ansiada séptima Copa de Europa en 1998, trofeo que no conseguía desde 1966, y la octava en el año 2000. Bajo su mando, el Real Madrid también logró una Liga en 1997, una Supercopa de España en 1997 y una Copa Intercontinental en 1998.

Lorenzo Sanz con la Champions League

Pero a pesar de estos éxitos deportivos la trayectoria económica del club no fue nada positiva, un punto que ha repetido en sus negocios personales, con diferentes problemas judiciales y polémicas.

En aquella época, con Ramón Mendoza, le tocó el papel de escudero de su jefe, algo similar a lo que hacían entonces Joan Gaspart en el Barcelona de Núñez, Enrique Cerezo en el Atletico de Gil o Pedro Cortés en el Valencia de Roig. Los cuatro llegaron a ser presidentes pero ninguno tan exitoso como Sanz en el Madrid.

Su oportunidad llegó en noviembre de 1995 y en solo cinco años el Real Madrid alcanzó dos Champions. La primera, en Amsterdam contra la Juve, tras treinta y dos años de sequía. La segunda en París unos años después. 

Le ganó Florentino Pérez

Menos de dos meses después de la consecución, el 24 de mayo de 2000, de su segunda Copa de Europa, convocó elecciones anticipadas el 16 de julio de 2000, creído de que las ganaría tras dos Copas de Europa conseguidas. Pero se equivocó. Perdió ante el rodillo imbatible de Florentino Pérez, que resultó vencedor por 3.167 votos. En julio de 2004 se presentó de nuevo a las elecciones para la presidencia del Real Madrid, obteniendo tan solo el 5,08% de los votos, frente al 91% que consiguió de nuevo el todopoderoso Florentino Pérez, su gran rival.

Lorenzo Sanz Mancebo nació en Madrid, era el mayor de diez hermanos de una familia humilde del barrio de Carabanchel y amante de los caballos donde conoció a Mendoza. Un hombre hecho a sí mismo, que hizo de chófer y guardaespaldas del líder ultraderechista de Fuerza Nueva, Blas Piñar, en su notaría cercana a la plaza de Alonso Martínez. Un empresario demasiado entusiasta del riesgo, que fue el pulmón de una familia repleta de personas también vinculadas al mundo del fútbol. Un deporte, el balompié, que llegó a practicar incluso en su juventud ya que jugó de portero en el C.D. Puerta Bonita. 

Con Florentino Pérez.

Casado con María Luz Durán Muñoz tuvo cinco hijos. Tres varones: Lorenzo, el mayor, que formó parte de la plantilla de baloncesto del club blanco, y que también dio positivo en el coronavirus tras el partido del equipo blanco con los italianos del Olimpia de Milán, la causa de todos los males; Fernando Sanz, que fuera jugador del Real Madrid y del Málaga, luego reconvertido en directivo del fútbol español, donde goza de fuerza y prestigio dentro de La Liga profesional; y Paco, que también fue futbolista en el Mallorca y en el Oviedo. Además de dos féminas, Mari Luz, conocida como Malula, casada con el exfutbolista Michel Salgado; y Diana, la menor, que es esposa de uno de los hombres fuertes del Rayo Vallecano, su director general Luis Yañez Rodríguez.