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Un partido de tenis en un estadio con techo retráctil y una multitud de espectadores bajo un cielo azul con nubes.
PIZARRA DEPORTIVA

Lo desconocido de Wimbledon: Las férreas tradiciones del torneo de tenis más antiguo

Es, sin duda, el torneo más especial del mundo por las tradiciones y peculiaridades que marcan este Grand Slam.

Wimbledon es el campeonato más prestigioso disputado en una superficie de hierba natural, y las peculiaridades y tradiciones que se respetan en este circuito lo convierten en el torneo más especial del panorama tenístico. El color blanco impoluto de la vestimenta de los tenistas, la apertura del torneo por parte de el cabeza de serie número 1, la marca de las bolas y el límite nocturno de juego son sus peculiaridades más destacadas. Elcierredigital.com ha recopilado para todos los amantes del deporte las tradiciones del torneo de tenis más antiguo del mundo que se está disputando en la actualidad.

Una de sus peculiaridades, que se mantiene en el Grand Slam, es el código de vestimenta. Todos los tenistas participantes están obligados a vestir de blanco, tanto en los partidos como en los entrenamientos. De esta forma, los jugadores deben comunicar previamente el modelo de ropa que llevaran puesto a la organización para que esta les de el visto bueno antes de competir. Cabe destacar que, a pesar de la gran rigurosidad en el protocolo, levantan la mano para que los logos de las marcas que patrocinan a los tenistas puedan estar presentes discretamente en camisetas y pantalones.

Otra de las tradiciones que se han mantenido año a año, gracias al fervor de los aficionados, es el lleno de las gradas prácticamente durante todos los días que dura la competición. Las entradas para poder disfrutar de Wimbledon se agotan rápidamente, y eso que su precio no es muy asequible.

Cuando la organización saca los tickets a la venta, el público se vuelca para no quedarse sin su asiento, ya sean para un día, para el fin de semana o para toda la competición. El día que salen a la venta, muchos los aficionados acampan en las taquillas del estadio para conseguir una localidad. Wimbledon se vive de una forma muy especial, su magia lo hace incomparable, por lo que nadie quiere perderse esta cita histórica.

Un estadio de tenis lleno de espectadores durante un partido en una cancha de césped.
Pista central de Wimbledon. | Reuters

Sin embargo, la edición de este año también ha acabado con algunas tradiciones del torneo londinense. Una de ellas es la emisión abierta para el partido del número 1 del mundo, el responsable de inaugurar el torneo. Este año, debido a la invasión rusa a Ucrania, no se ha permitido ni a rusos ni a bielorrusos participar lo que se ha traducido en que el número 1 del ranking ATP, Daniil Medvéded, no ha abierto el torneo. En esta edición, el responsable de dar comienzo a uno de los torneos más esperados del mundo ha sido el serbio Novak Djokovic, que levantó el trofeo el año pasado.

Otra de las costumbres que se rompen este año será la del MiddleSunday, uan tradición que fija un partido diario, con la excepción del primer domingo de torneo. A este pequeño descanso se le conoce como el Middle Sunday y en los más de 130 años de historia de Wimbledon, solo se ha jugado en cuatro ocasiones en las que se ha roto ese descaso dominical y siempre con el fin de recuperar alguna jornada que se tuvo que suspender o que no se pudo jugar por culpa del tiempo. 

Por otra parte, en Wimbledon hay establecida una hora límite para la finalización del juego. Si a las 23:00 horas no se ha acabado el encuentro, los jugadores tendrán que irse a descansar debido a las normas municipales de Londres, y retomarán el juego al día siguiente. Esta tradición seguirá cumpliéndose durante esta edición al mantenerse la normativa municipal. 

Partido de tenis de Wimbledon.

Otras de las curiosidades más reseñables de este torneo son: la tradición de mantener la marca de bolas,  Slazenger, desde hace más de 100 años; la inexistencia de vallas publicitarias en las pistas; la predominancia de los colores que identifican al torneo; la presencia del halcón Rufus, que lleva más de 20 años custodiando y protegiendo las instalaciones para que las palomas no causen estragos en la hierba y que, para ser recogepelotas, hay que ser alumno de un colegio del sudeste de Londres y superar duras pruebas.

Por último, este año también será especial porque durante el torneo no habrá puntos en juego para la clasificación de la ATP. La decisión de la organización de Wimbledon 2022 de vetar a los tenistas rusos y bielorrusos ha sido la causante de que la ATP y la WTA hayan tomado la decisión de no poner puntos en juego en esta edición del torneo británico al considerar que los deportistas no competirían por el liderazgo de estas competiciones en las mismas condiciones.

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