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Mujer de cabello oscuro y largo sonriendo, con la mano apoyada en la mejilla, en un entorno verde y natural.
PIZARRA DEPORTIVA

Hazañas de Edurne Pasaban: 'Altos y bajos' en la vida de la eterna alpinista española

Primera mujer en las 14 cumbres más altas del mundo se aparta de la escalada para inspirar con charlas.

En el grupo de las personas célebres en la historia de nuestro país por sus hazañas en su trayectoria profesional, sin duda alguna, debemos destacar a Edurne Pasaban. Se trata de una de las alpinistas más destacadas en la historia del deporte de todo el mundo, además de ser ingeniera especializada en técnica industrial y empresaria de éxito.

Aunque en un principio realizaba escapadas a la montaña como hobby, lo que parecía simplemente un entretenimiento  se convirtió en su modo de vida  durante muchos años y destacó sobremanera, grabando su nombre a fuego en la historia del montañismo y del alpinismo profesional.

Pero, ¿quién es Edurne Pasaban?

Aunque su nombre es relevante y bastante conocido para muchas personas, queremos empezar haciendo un poco de memoria sobre la trayectoria profesional y personal de la primera mujer en completar la ascensión de los 14 ochomiles de la tierra, es decir, las 14 montañas del mundo que superan los 8.000 metros de altura con respecto al nivel del mar.

Edurne Pasaban, que nació en 1973 en Guipúzcoa, España, es licenciada en Ingeniería Industrial, empresaria y conferenciante en MT Consulting. No obstante, en sus ratos libres empezó a practicar el alpinismo y el montañismo como hobbie. Sin embargo, este hobby acabó siendo mucho más que una simple actividad de entretenimiento y se convirtió en su pasión principal.

Por este motivo,  decidió dedicarse a ello de forma profesional, escalando montañas en los Pirineos, en los Alpes, en los Andes y, por último, se atrevió a escalar en el Himalaya, donde se encuentran algunas de las montañas de mayor altura en todo el planeta. De hecho, en el año 1998 intentó escalar su primer “ochomil” en esta cordillera, el Dhahulagiri, de 8.167 metros de altura, sin éxito.

Sin embargo, le dio la fuerza necesaria para tratar de superarse a sí misma y en el año 2001 volvió al Himalaya para escalar el Everest, reto que consiguió con éxito, llamando la atención en un mundo dominado por hombres. Por ello, también se considera un ejemplo de empoderamiento femenino y un icono feminista que creció a pesar de las adversidades.

Conseguidos los 14 ochomiles del mundo

Entre 2002 y 2003 Edurne fue escalando las catorce montañas más grandes del mundo: el monte Makalu, el Lhotse, el Gashebrum I y el Gashebrum II. Un punto de inflexión en su carrera fue la expedición al monte K2, de más de 8.600 metros de altura, en 2004.

La montaña más peligrosa del mundo hizo gala de su título y,  tras sufrir las consecuencias físicas y psicológicas de este ascenso, Edurne estuvo a punto de dejar el montañismo y fue uno de los retos más complicados de su vida. Sin embargo, a lo largo de estos años se había ganado un renombre y un reconocimiento y, tras pensarlo detenidamente, comprendió que debía seguir, ya que era en estas montañas donde realmente se sentía feliz.

Por ello, no sin esfuerzo, en  2007, tras escalar el Broad Peak, de 8.051 metros, decidió que intentaría convertirse en la primera mujer en escalar todos los ochomiles, ya que era, en ese momento, una de las principales candidatas para lograrlo. Y lo consiguió poco tiempo después, tras escalar el Shisha Pangma, de 8.027 metros de altitud. Por esta hazaña, Edurne Pasaban ha pasado a la historia como una de las mejores deportistas de todo el mundo y, por supuesto, en el alpinismo español y mundial.

Una persona con equipo de montañismo de color naranja levanta los brazos en señal de victoria en la cima de una montaña nevada bajo un cielo despejado.
Edurne Pasaban coronando la cumbre de una montaña. | El Cierre Digital

Gracias a ello recibió numerosos premios y reconocimientos dentro y fuera de España, como la  Medalla de Oro al Mérito Deportivo y el Premio Reina Sofía a la Mejor Deportista del Año en 2011, entre muchos otros. Aquí queremos hacer un inciso y, si quieres consultar cuáles son los 14 ochomiles y quiénes los han conquistado al margen de Edurne Pasaban, puedes conocerlos a través de este enlace de Geoviajeros.

Después de convertirse en leyenda

Como hemos dicho, el nombre de Edurne Pasaban está escrito en oro en la historia del alpinismo y del montañismo, tanto a nivel nacional como internacional y, por supuesto, en la historia del deporte en general. Ahora bien, después de realizar tal hazaña legendaria y habiendo abierto el camino a otras mujeres, se ha apartado del mundo de la escalada y de las grandes cumbres para centrarse en la realización de conferencias, charlas y ponencias a nivel nacional e internacional.

En estas  charlas y conferencias  utiliza sus hazañas más destacadas, los récords que rompió frente a las adversidades y los desafíos para destacar  la importancia de la motivación, de la superación y del crecimiento a nivel personal y profesional. De hecho, destaca que hay que mantener una buena actitud y tratar de creer en uno mismo para ir superando las adversidades y alcanzar tus objetivos.

Estos no necesariamente tienen que ser los catorce ochomiles del planeta, sino otros mucho más pequeños, como, por ejemplo, hacer que tu empresa experimente un crecimiento. Además, a esto añade que cada proyecto en la vida se debe hacer con pasión para poder lograrlo con éxito.

Asimismo, también se centra en el hecho de cómo mantener la motivación cuando ya has superado todos los retos que te habías propuesto en la vida. Pasaban mantiene que es posible recoger todo lo aprendido y tratar de aplicarlo en otros campos de la vida con altas dosis de humildad y compromiso para tratar de proponerse nuevos retos a alcanzar. Por ello, debemos decir que, sin lugar a dudas, es una de las figuras más importantes que deben tenerse en cuenta en la actualidad.

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