Roberto Brasero ya lo está avisando: esto puede pasar en España en enero y febrero
Temperaturas inusualmente cálidas marcarán el inicio del año según los últimos análisis meteorológicos
El invierno que está por llegar tiene características muy particulares según Roberto Brasero, uno de los meteorólogos más reconocidos del país. Las últimas previsiones apuntan a que este invierno podría ser menos frío de lo que estamos acostumbrados. Siguiendo la línea de un otoño que ha destacado por su calor inusual y su alta pluviometría.
¿Qué nos espera este fin de semana?
En el corto plazo, Roberto Brasero detalla que las heladas matinales seguirán siendo protagonistas en muchas zonas del interior. Especialmente en la mitad norte peninsular, el este de la meseta Sur y las sierras del sureste.
Por la tarde, las temperaturas máximas se mantendrán estables. Aunque en el este y sur de la Península se prevé un leve ascenso gracias a la retirada progresiva de las nubes y lluvias. Además de las heladas, las nieblas serán un fenómeno notable, especialmente en la madrugada y primeras horas del día.
Sin embargo, la estabilidad atmosférica será predominante en la mayor parte del territorio peninsular. Con excepciones en el extremo oeste y el Cantábrico oriental, donde podrían registrarse lluvias aisladas.
Por otro lado, Canarias vivirá un escenario diferente debido a la influencia de una borrasca. Durante el sábado, los vientos del sur elevarán significativamente las temperaturas. Para el domingo, las lluvias ganarán protagonismo.
Un invierno más cálido según AEMET: ¿Y las lluvias?
Además de las previsiones a corto plazo, la Agencia Estatal de Meteorología ha compartido su análisis para los meses de diciembre, enero, febrero. Roberto Brasero se ha hecho eco de ellas, explicando lo que puede pasar este invierno meteorológico.
Según sus datos, las temperaturas estarán por encima de lo habitual en toda España. Con probabilidades de entre un 60% y un 70% en la mayoría de las regiones. Este aumento de las temperaturas será más notable en el noroeste, el sur peninsular y en ambos archipiélagos, donde las posibilidades superan el 70%.
En cuanto a las precipitaciones, las perspectivas son menos claras. Aunque hay una ligera tendencia hacia un invierno más seco, las probabilidades no son tan contundentes como en el caso de las temperaturas. Se estima que habrá un 40% a 50% de posibilidades de lluvias por debajo de la media, salvo en el este peninsular y Baleares, donde no se observa una tendencia definida.
Esta combinación de temperaturas más cálidas y posibles déficits de lluvias podría influir en sectores como la agricultura y el turismo, haciendo de este invierno un período atípico que merece atención. Roberto Brasero invita a seguir de cerca estas variaciones, recordando que la meteorología siempre puede sorprender.
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