Rafael Fenoy: 'Al Gobierno no le interesa la línea de Renfe a Algeciras'

La red ferroviaria que conecta Madrid con Algeciras tiene su origen en los principios del siglo XX. Casi 130 años después, las instalaciones, obsoletas, son objeto de las críticas por parte de los ciudadanos de la zona de Campo de Gibraltar, Algeciras y aquellas localidades que se ven afectadas por ella. Unas críticas que se vierten directamente sobre Renfe y Adif —que ya sufrieron recientemente las denuncias por su servicios de Cercanías Madrid—, compañía encargada de la infraestructura y que depende directamente del Gobierno central.

Desde que persiste este problema, los alcaldes de Algeciras han tenido que enfrentarse a una “dejadez” que no para de causar problemas. Sin ir más lejos, el pasado mes de enero un tren sufrió una avería de dos horas cuando “los cuatro motores de la máquina se quemaban cerca de llegar a su destino”, según comunicó el alcalde José Ignacio Landaluce. La solución que ofreció Renfe fue cubrir la ruta entre Madrid y Algeciras con los trenes híbridos que actualmente están funcionando en la línea de alta velocidad de Galicia.

Rafael Fenoy, de 70 años, ha sido maestro durante muchos años y ahora da el salto a la política como candadito a la alcaldía de Algeciras de la mano de Adelante Andalucía. Como aspirante a la alcaldía, y ciudadano de Algeciras, es consciente del problema que supone para la localidad el servicio de la línea entre Madrid y Algeciras.

Según sostiene en una conversación con elcierredigital.com, el problema es que “Renfe, y sobre todo Adif, que es la responsable de la infraestructura, llevan más de 20 años prometiendo que se va a electrificar y modernizar el trazado de la línea de ferrocarril”, a pesar de que todavía no se ha hecho. Según afirma, es “una falta de interés por parte del Gobierno central —que es quien controla Adif— de dar una respuesta a las necesidades de la ciudadanía. Se pone en evidencia que el Gobierno no mira por Andalucía”.

Origen de la línea Algeciras-Madrid y problemas

Tal y como explica el candidato a la alcaldía, para entender la situación actual de la línea ferroviaria de Algeciras hay que remontarse a hace más de 100 años, cuando una compañía inglesa la puso en funcionamiento. La línea, según afirma, está “directamente relacionada con la actividad del peñón de Gibraltar y las conexiones con Madrid. Toda esta idea surge a raíz de la conferencia en Algeciras de 1906, cuando políticamente el Gobierno de la nación da prioridad a este tema. A partir de ahí poco se ha hecho en materia de renovación y mejora del trazado de esta línea”.

A pesar de que no se ha hecho mucho, Fenoy informa de que “hace 5 años había un trazado previsto con dinero aprobado y se tuvo que renovar un trazado que pasa por una laguna cerca de Campillo. Una vía actual que pasa por ahí ahora y que seguirá pasando, no es una obra de mala ejecución”.

Aunque tal y como previene, el trazado no es el único problema. “La propia Renfe, que es la encargada de la maquinaría, tiene máquinas y vagones suficientes adaptados al trazado de nuestra red para que, incluso sin tocar la red, pudiéramos acortar el viaje a Madrid a cinco horas exactas. Por qué esas máquinas nunca llegan y por qué lo que está aquí se está estropeando constantemente… son misterios insondables”, añade.

Actualmente, según informa Fenoy, hay dos horas disponibles para hacer el trayecto Algeciras Madrid: “Un tren que sale a las seis de la mañana y otro a las tres de la tarde”. En total, el trayecto tiene una duración de seis horas, pero Fenoy confirma que llevan “varios años en los que es una aventura subirse al tren. Cuando te subes, ya no sabes cuánto vas a tardar. El otro día llegó una hora tarde y no fue un problema de la maquinaria, sino por el descanso del conductor del tren, que cumple unas horas, tiene que tener unas horas de descanso y debe tener una persona que lo sustituya”.

“Esta dejación absoluta, esta falta de predicción, de control, incluso de los horarios del personal que tiene que servir en la vía, ya es que nos deja sin palabras, porque nos parece una falta de respeto absoluta”, sentencia Fenoy.

Las posibles soluciones al problema ferroviario

Ante todos estos problemas, la primera solución que presenta el candidato a la alcaldía es la modernización del trazado de la línea, pero también llevar a Algeciras los trenes electrificados que funcionan en Galicia. “Que traigan las máquinas que ya tienen y que ya están funcionando. Que las traigan aquí para que las personas de toda la zona tengan un servicio digno y humano a la altura del siglo XXI”, pide.

Además, tal y como explica Rafael Fenoy, “hay otra opción, conectar Algeciras directamente con Fuengirola a través de la Costa del Sol. Esa segunda opción, aparte de darle mucha vida a toda la zona, permitiría tener la alta velocidad a tiro de piedra, porque Málaga se encuentra mucho más cerca que Antequera”.

Fenoy continúa explicando que en el puerto de Algeciras ven “unos 400.000 camiones”, y considera que podrían reducir su impacto medioambiental si tuvieran “la oportunidad de electrificar una red donde la contaminación sería cero” y pudieran “trasladar todo ese volumen intenso de mercancías ahí”. “El volumen de mercancías que transitarían desde la zona del Campo de Gibraltar hacia el interior de Europa pasando por los núcleos de Madrid y Zaragoza sería impresionante. No nos explicamos ese enorme negocio por qué ahora mismo no se está usando”, añade.

El candidato a la alcaldía, además, ha querido poner “de relieve el enorme esfuerzo y dedicación de las personas de la plataforma por el tren —@ndaluciabay20.30—, que todos los viernes se reúnen y se manifiestan en la plaza alta de Algeciras. Son incansables, perseverantes y yo los admiro y les aplaudo ese gesto que tienen”.

“El día 28 de febrero, el día de Andalucía, quieren estar en Madrid y delante del Parlamento decir que el Campo de Gibraltar existe, que existe Algeciras y que hay un tren, a ver si es verdad que nos mandan el tren”, finaliza. Elcierredigital.com ya mantuvo una conversación con el fundador de esta plataforma, Juan María de la Cuesta, en la que pedía que “este lastre de aislamiento ferroviario y de infraestructura en general esté superado para el 2026 de manera moderna, competitiva y eficiente”.