
Polestar 4 (200 kWh): confort y rendimiento en forma de SUV‑ coupé eléctrico
silueta tipo coupé, motor eléctrico, y una experiencia premium
El Polestar 4 aterriza con una propuesta rompedora: silueta tipo coupé, motor eléctrico, y una experiencia cuyo primer objetivo es el confort. Destaca en su interior por un espacio luminoso inspirado en vehículos de alta gama, incluida una viva reminiscencia a la Business Class, y una autonomía que cubre las necesidades cotidianas sin sobresaltos.

1. Diseño exterior: línea fluida y sin luneta trasera
Bajo una carrocería de casi 4,84 m, el Polestar 4 evita la típica luneta trasera. La marca opta por una cámara que transmite la vista posterior en un espejo digital. Al principio sorprende, pero pronto se aprecia la mejora visual nocturna y la eliminación de reflejos molestos.
El frontal incorpora los característicos faros “Dual Blades” con tecnología Pixel‑LED. Este sistema permite modular zonas de iluminación para no deslumbrar al tráfico contrario sin sacrificar visibilidad. En pruebas, el efecto es notable en ciudad, aunque en autopistas con camiones a alta velocidad puede resultar menos preciso que en trayectos urbanos.

2. Motorización y prestaciones: potente y eficiente
La versión analizada monta un motor trasero de 200 kW (272 CV), que permite acelerar de 0 a 100 km/h en 6,8 segundos. Hay también una versión dual‑motor con tracción total y 400 kW (544 CV), que acelera en 3,8 segundos. Su batería de 200 kWh (94 kWh netos) ofrece hasta 620 km de autonomía WLTP, que en ciudad puede ser más que suficiente. En carretera, se han registrado recorridos reales de más de 370 km a velocidades sostenidas.
La recarga rápida permite pasar de 10 a 80 % en aproximadamente 30 minutos, gracias a una potencia de hasta 200 kW. Para carga doméstica, el cargador interno (opcional) de 22 kW completa la recarga en torno a 5 h 30 min.

3. Interior: escandinavo, práctico y premium
El interior es un ejercicio de claridad visual: materiales reciclados, cuero bio‑certificado y tejidos técnicos que recuerdan a ropa deportiva. El amplio techo panorámico aporta mucha luz, acentuando la sensación de espacio.
El salpicadero está dominado por una gran pantalla horizontal con Android Automotive. Esta integra navegación Google, planificación de recarga y apps relevantes. Aunque intuitiva, la interfaz requiere paciencia para encontrar algunas funciones como la apertura del maletero o el frunk. El panel digital sobre el volante y el head‑up display conservan elementos clásicos del conductor.
En la parte trasera hay espacio suficiente para adultos de hasta 1,85 m, aunque el techo con caída rápida limita ligeramente la altura libre. La tapicería combinada con la iluminación instalada crea un ambiente elegante y acogedor.
4. Confort de marcha: firmeza controlada
En ciudad, el Polestar 4 ofrece una suspensión firme pero capaz. La configuración proporciona una ruta tranquila sobre imperfecciones y mantiene la agilidad en curvas. La dirección ajustable ofrece distintos niveles, aunque su tacto puede sentirse algo artificial en modos deportivos. A velocidades elevadas, el coche se comporta con solidez, sin cabeceo excesivo.

5. Tecnología y ayudas a la conducción
El control de crucero adaptativo y el asistente de mantenimiento de carril funcionan, pero activan correcciones algo bruscas en algunos casos. La cámara trasera en el espejo digital elimina completamente los reflejos en condiciones nocturnas y mejora la visión sin deslumbrar. El sonido ambiental en el habitáculo es notablemente bajo, una bienvenida al confort y la recuperación en batería es suave y controlada.
6. Maletero y capacidad de carga
El maletero ofrece 526 L, suficientes para el día a día, y hasta 1 536 L con los asientos plegados (60/40). Sin embargo, su boca de carga es algo estrecha y no diseñada para objetos voluminosos como grandes cochecitos. En la parte delantera se incluye un frunk de 15 L, útil para cables o accesorios, aunque su apertura puede resultar incómoda por el mecanismo.

7. Uso práctico y dinamismo adaptado
La configuración Single‑Motor es perfectamente eficaz en ciudad y autopista. Es eléctrica, silenciosa, y con rendimiento adecuado. La opción dual‑motor añade potencia notable, ideal para adelantamientos rápidos. El Polestar 4 tracciona bien, incluso con remolque: acepta hasta 1,5 t en versión trasera y 2 t en sistema total.

8. Sostenibilidad interior
Polestar mantiene su compromiso ecológico: utiliza materiales reciclados, tapicerías veganas, cuero libre de químicos minerales, y plásticos reciclables. El coche actúa como una alternativa responsable sin prestaciones recortadas.
9. Conexiones y entretenimiento
El sistema de infotainment es completo. Google Maps guía con precisión y permite gestionar rutas con puntos de carga integrados. Además, se puede instalar un equipo de sonido Harman‑Kardon y Apple CarPlay sin cables. La experiencia audiovisual está bien resuelta.

10. Público objetivo y viabilidad
El Polestar 4 atrae a parejas, profesionales, familias sin niños pequeños y usuarios corporativos. Su estética premium, autonomía real y comodidad lo hacen atractivo. No obstante, para familias con cochecitos voluminisosos podría resultar limitado. Su precio base comienza en unos 65 900 €, según versión, con una buena relación calidad‑precio frente a marcas tradicionales alemanas gracias a incentivos fiscales (0,25 %), lo que lo convierte en opción atractiva como vehículo de empresa o particular con beneficios fiscales.
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