Mario Picazo pone a España bajo aviso y confirma lo que pasará con el calor ya mismo

El arranque de esta primera semana del otoño meteorológico ha traído consigo un cambio notable en el clima, Mario Picazo lo había advertido. Las temperaturas han empezado a descender, especialmente en el norte de España. Donde el frío ha llegado antes de lo que esperábamos, con mínimas que ya rondan los valores de un solo dígito en algunas capitales.

Este descenso térmico ha sido percibido por muchos como un abrupto adiós al calor, aunque en ciertas zonas todavía se mantienen temperaturas moderadas.

Este fenómeno marca una transición clave, ya que el calor que caracterizó los meses de verano está cediendo lentamente ante la llegada del otoño. Mientras las máximas en algunas ciudades aún alcanzan los 25 °C, el hecho de que cada vez sean menos las que superen los 30 °C refleja un enfriamiento progresivo. El cual podría permanecer con nosotros durante las próximas semanas.

Mario Picazo avisa: otoño antes de tiempo

Los meteorólogos, entre ellos el popular Mario Picazo, coinciden en que este descenso en las temperaturas mínimas es un claro indicativo del cambio de estación. A pesar de que aún faltan algunas semanas para que el otoño astronómico comience oficialmente, el otoño meteorológico ya se ha hecho sentir.

Si bien las temperaturas máximas aún no han bajado tanto, el contraste con las noches frescas y las primeras horas del día es evidente. Este patrón térmico nos da una idea de lo que podría ser el resto del mes. Ya que parece que este cambio ha venido para quedarse.

Lo que podemos esperar para el resto de la semana

Mario Picazo asegura que en los próximos días podríamos ver un leve repunte en las temperaturas en algunas zonas. Pero los modelos meteorológicos no indican que vayamos a experimentar un aumento significativo.

El calor intenso que en semanas pasadas aún persistía en algunas áreas ha ido disminuyendo. Y el enfriamiento que ha comenzado a notarse parece consolidarse en los días venideros. De hecho, es probable que a medida que nos acerquemos a la segunda mitad de septiembre, el contraste entre el día y la noche se haga más marcado.

Un adiós gradual al calor veraniego

En muchas ciudades españolas, especialmente en las del norte, las máximas ya no superan los 25 °C. Las jornadas cálidas que marcaron gran parte del verano han quedado atrás, y no se puede descartar que algunas zonas del sur todavía experimenten algún pico de calor. Pero todo apunta a que esos días serán cada vez más escasos.

Mario Picazo ha explicado que este patrón es normal en el cambio de estación. Con el avance de septiembre, el calor va perdiendo fuerza, mientras las masas de aire más frías empiezan a ganar terreno. Si bien habrá días puntuales en los que las temperaturas puedan subir ligeramente, no se prevé que vuelvan los intensos calores que marcaron el verano.