El Ferrari más admirado del Salón Privé.

En la reciente edición del Concours de Salon Privé, se destacó la presencia de algunos de los vehículos más emblemáticos en la historia del automovilismo, y entre ellos, el Ferrari 335 S by Scaglietti se coronó como Best of Show. Este Ferrari, con el chasis número 0674, cuenta con una trayectoria impresionante en competiciones de alto nivel y ha sido pilotado por figuras icónicas del automovilismo durante la temporada de 1957.

Uno de los eventos más notables en los que participó fue la Mille Miglia, donde Wolfgang von Trips lo llevó al segundo lugar, una hazaña relevante en una carrera que forma parte del imaginario popular y ha sido incluso inmortalizada en la reciente película Ferrari, dirigida por Michael Mann. Asimismo, este chasis estuvo presente en las 24 Horas de Le Mans, donde, a pesar de no haber terminado la carrera, registró la vuelta más rápida, un detalle que habla de su capacidad técnica y rendimiento. Más tarde, en las 1000 km de Caracas, el coche aseguró un segundo puesto, y poco después, bajo la dirección del North American Racing Team de Luigi Chinetti, Stirling Moss lo condujo a la victoria en el Gran Premio de Cuba en 1958.

El Ferrari 335 S ha pasado por manos de varios coleccionistas prominentes, incluido Pierre Bardinon, conocido por su devoción a la marca y su extensa colección de Ferraris históricos. Este legado competitivo y el cuidado por preservar su historia hacen que el 335 S sea una pieza clave para los entusiastas de los autos clásicos y de la competición.

En el Concours de Salon Privé también se reconocieron otros vehículos notables, como el Rolls-Royce Phantom II Sport Saloon de Lord Bamford, carrozado por Freestone & Webb, que obtuvo el segundo lugar general. Este automóvil fue originalmente encargado por Sir John Leigh, quien lo utilizó para largos viajes por el Reino Unido y Europa. Su historia también incluye una restauración completa por parte de Lord Bamford, que devolvió al vehículo su esplendor original, incluyendo su esquema de pintura en dos tonos. Este Phantom II es un habitual en los concursos de elegancia, ganando premios por su diseño clásico y su imponente presencia.

El tercer lugar fue para el Isotta Fraschini Tipo 8AS Fleetwood Roadster de 1927, una pieza histórica vinculada al actor de cine mudo Rudolph Valentino. Este automóvil fue diseñado con una carrocería personalizada por LeBaron y, aunque Valentino falleció antes de que el coche fuera completado, su legado quedó impreso en la historia del vehículo, que fue exhibido en el Salón del Automóvil de Nueva York y más tarde atrajo la atención de los fanáticos en Isotta Motors.

El evento de este año, presentado por Aviva Private Clients, logró reunir una colección excepcional de 72 vehículos, distribuidos en 14 categorías distintas que iban desde coches pre-guerra hasta modelos icónicos de Bugatti, Rolls-Royce y Ferrari. Uno de los aspectos más destacados fue la categoría de "Legendary Liveries", que rindió homenaje a los esquemas de colores más representativos en la historia del automovilismo, incluyendo el Jaguar XJR 8/9 con los colores de Silk Cut, el Lancia Stratos HF con los de Alitalia, y el Subaru Impreza WRC97 con la icónica librea 555.

Este año, el Concours también celebró el 60 aniversario del Ferrari 275 con una nueva categoría especial, que atrajo la atención de los asistentes y aficionados de la marca. La reunión de estos autos clásicos tuvo lugar en los jardines del Palacio de Blenheim, atrayendo vehículos desde lugares tan lejanos como Nueva Zelanda, Tailandia y Estados Unidos, reafirmando la relevancia internacional del evento. Además, el Concours de Salon Privé es uno de los pocos eventos a nivel mundial designado como ICJAG Plus, lo que lo coloca en un selecto grupo de exhibiciones de automóviles clásicas de prestigio global.

Los autos presentados fueron evaluados por un panel de jueces internacionales altamente reconocidos, asegurando que cada detalle fuera considerado. Este nivel de escrutinio y la calidad de los vehículos participantes hacen de Salon Privé uno de los eventos más importantes del calendario de coleccionistas y entusiastas de automóviles clásicos.

El Ferrari 335 S, con su combinación de historia deportiva, diseño y restauración meticulosa, se destaca entre los demás vehículos, capturando no solo la atención del público, sino también el reconocimiento de los expertos. Su participación en el Peninsula Classics Best of the Best Award será sin duda una de las más esperadas, ya que continúa su legado como uno de los vehículos más importantes en la historia del automovilismo.