El veto a Miguel Ángel Sacaluga desata una guerra interna en los Informativos de RTVE, tras dos meses de tregua

La paz en RTVE ha saltado por los aires tras dos meses de tregua. La razón está motivada porque la que iba a ser nueva directora de Contenidos Informativos de la Corporación pública, Mamen del Cerro, evidenció que no ha sabido leer el momento de consenso y transversalidad al intentar designar como su mano derecha a, según fuentes sindicales consultadas por este diario, "un comisario político del PSOE".

Miguel Ángel Sacaluga, cuya carrera está íntimamente ligada al partido que lidera Pedro Sánchez, podría haberse convertido en uno de los nuevos máximos responsables de los 'Telediarios'. Pero el presidente José Manuel Pérez Tornero, consciente del lógico enfado del PP, ha salido al quite y ha vetado el nombramiento aun a costa de que le puedan criticar por 'censor'.

Este hecho provocó la renuncia de Mamen del Cerro, que había sido aceptada como directora de Contenidos Informativos de RTVE "sin demasiado convencimiento para los consejeros designados por el PP, que a cambio pedían que su mano derecha tuviera un perfil conservador", señalan las mismas fuentes.

No formalizar

Pérez Tornero ha anunciado que, de mutuo acuerdo con De Cerro (que seguirá al frente de los informativos de RNE), ha decidido "no formalizar el nombramiento" de la periodista "como directora de Contenidos Informativos ante las diferencias surgidas en la confección del organigrama de los Servicios Informativos de Radio Televisión Española".

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"La decisión se ha adoptado de mutuo acuerdo para preservar el proyecto de renovación impulsado por la Corporación. El presidente José Manuel Pérez Tornero agradece la colaboración y el ejercicio de responsabilidad que Mamen del Cerro, que continuará por ahora al frente de los Informativos de Radio Nacional de España, ha mantenido en todo momento. El presidente de RTVE tiene previsto anunciar en los próximos días el equipo que liderará los Servicios Informativos y reafirma su compromiso y confianza en los trabajadores de la Corporación", añade.

Miguel Ángel Sacaluga

Miguel Ángel Sacaluga, de 63 años, entró por oposición en la plantilla de RTVE en 1983 y desde entonces no dejó de escalar: su carrera en la pública arrancó como redactor de RNE en Málaga, prosiguió como director de informativos de la emisora en Zaragoza y en 1986 se convirtió en director de Informativos del Centro Territorial de TVE en Galicia bajo el paraguas del PSOE.

El 'felipismo', que manipuló los informativos de TVE bajo el liderazgo de la fallecida María Antonia Iglesias, lo designó subdirector de Informativos de la tele pública en 1990. Pero el triunfo de Aznar en el 96 le dejó sin cargo y a cambio tuvo un deseado premio de recompensa: la corresponsalía de TVE en París.

Tras la caída del 'aznarismo' llegó el 'zapaterismo', que no olvidó a Sacaluga: en enero de 2007 fue elegido como miembro del Consejo de Administración de la Corporación RTVE, elegido por el Congreso de los Diputados a propuesta del PSOE. En el cargo se mantuvo hasta 2018, cuando la administradora única eliminaba el Consejo como tal y, entre medias, fue el autor de un espacio panegírico en favor de la monarquía española llamado 'Audiencia abierta' en TVE.

Las polémicas de Sacaluga

Miguel Ángel Sacaluga, hermano de un mito de TVE (Juan Antonio, estrella en el área Internacional de la casa durante tres décadas), fue perdiendo pegada en los últimos tiempos. Y es que el PSOE no lo eligió en el nuevo Consejo de Administración a pesar de que se postuló en 2018 como presidente de la Corporación.

Pero aquello acabó como el Rosario de la Aurora: los expertos tildaron su plan para RTVE de "pobre, cargado de documentación y carente de propuestas". Este hecho motivó que el candidato registrase en el Tribunal Constitucional un recurso de amparo al entender que se había vulnerado su derecho de acceder a un cargo público en igualdad de condiciones, recogido en el artículo 23.2 de la Constitución española.

No parecía sentirse agraviado Sacaluga cuando varios medios insinuaban que su mujer había entrado en la plantilla de RTVE sin haber hecho oposición o cuando otros apuntaban que se embolsaba 120.000 euros anuales por una exclusividad que no cumplía.

Y es que el periodista no disimulaba su cercanía con el PSOE ya que fue miembro del equipo de Comunicación de Rafa Simancas en las autonómicas madrileñas de 2007 y de Jaime Lissavetzky en las municipales de la capital en 2011.

"Desconcierto"

Los Consejos de Informativos de RTVE han hecho constar su "absoluto desconcierto con la marcha atrás en la formalización del nombramiento de Mamen del Cerro, máxime cuando hace apenas 15 días recibió el respaldo unánime del Consejo de Administración. Según el comunicado de la dirección, esta decisión se produce 'de mutuo acuerdo'".

"Sin embargo, no deja de parecernos preocupante que se justifique en 'las diferencias surgidas en la confección del organigrama de los Servicios Informativos de Radio Televisión Española'. A estas horas, desconocemos el grado de independencia con el que han podido actuar ambas partes, pero es nuestra obligación recordar que cualquier profesional de esta casa debe trabajar, siempre, bajo esta premisa", añaden.

Este organismo opina que es "imprescindible que se aporten explicaciones más detalladas, no solo a los Consejos de Informativos (que nos hemos dirigido oficialmente a Tornero y Del Cerro), sino al conjunto de trabajadores de RTVE, que contemplan con gran estupor los vaivenes de esta empresa a la hora de confeccionar su organigrama. Con estos hechos, el prestigio y la credibilidad de uno de los principales grupos de comunicación públicos de Europa quedan gravemente afectados".

Y añaden: "Ni los trabajadores de la Corporación ni la ciudadanía en general merecen presenciar este tipo de situaciones, que suponen un menosprecio a la prestación del servicio público que tenemos encomendada y que, además, van en dirección contraria a los planes expresados por José Manuel Pérez Tornero de profesionalizar el desempeño en la Corporación. Estos movimientos en falso nos parecen una consecuencia del ya denunciado reparto de puestos en el Consejo de Administración, resuelto a través de un acuerdo entre los grupos parlamentarios, saltándose el proceso del concurso público que siempre hemos defendido como vía para renovar la cúpula de RTVE".