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Hombre con barba y gafas usando un gorro tejido y un suéter claro.
INVESTIGACIÓN

Rafa 'El Gitano', el evangelista convertido a la yihad que recluta 'fieles' en España

Mustafá Maya Amaya, el captador terrorista más famoso en nuestro país, vuelve a prisión tras haber pasado ocho años

Agentes de la Policía Nacional, bajo la coordinación de la Audiencia Nacional y la Fiscalía, lanzaron el pasado lunes una operación contra el terrorismo yihadista en la que fueron detenidas al menos dos personas. Fuentes de la investigación confirmaron a diversos medios de comunicación que entre los detenidos se encuentra Mustafá Maya Amaya, un viejo conocido de las fuerzas de seguridad. 

Maya Amaya es un histórico  líder radical y reclutador yihadista de Melilla que ya fue detenido en 2014 y condenado a ocho años de prisión por reclutar y enviar a individuos a hacer la yihad a lugares en conflicto. Ahora se le acusa de nuevo de un presunto delito de adoctrinamiento terrorista y enaltecimiento. 

Las detenciones y el caso corren a cargo de la Comisaría General de Información. Es la segunda operación contra este tipo de perfiles que realiza la Policía en los últimos días,  que tiene lugar al tiempo que la escalada de violencia registrada en Palestina tras el enfrentamiento entre Israel y Hamás no deja de causar bajas civiles entre la población palestina en Gaza. Paralelamente, la semana pasada fue arrestada una célula de cuatro personas de las cuales tres ingresaron en prisión preventiva el viernes. 

En otro orden, la Comisaría General de Información de la Policía Nacional realiza una operación antiterrorista en varios puntos de España en la que se habría detenido al menos a cuatro personas por los delitos de adoctrinamiento yihadista y proselitismo. Según ha comunicado la Policía Nacional, varios agentes han efectuado detenciones en las localidades de Huétor-Tájar (Granada), Cubelles (Barcelona) y Madrid.

Mustafá Maya, un viejo conocido radicalizado

Más conocido como el 'Talibán', su apodo, Mustafá Maya Amaya,  yihadista y gitano de 59 años, que es uno de los detenido este lunes en Melilla, se convirtió al islam para después acabar en la cárcel durante ocho años por ser el promotor, director y coordinador de "una de las mayores redes de captación y envío de radicales para su incorporación a organizaciones terroristas de corte yihadista", según declaró la Audiencia. 

Sobre 'el gitano' se llegó a decir que era el mayor reclutador de terroristas de tipo yihadista de España, de hecho fue detenido exactamente nueve años después de su primer arresto en el operativo. 

Un hombre con barba y gafas hablando en un micrófono durante una reunión.
Mustafá Maya Amaya, declarando en un juicio | El Cierre Digital

En silla de ruedas por una discapacidad de la que no se conocen apenas detalles, el melillense tan solo llevaba un año en libertad tras permanecer 8 encerrado y después de haber llegado a un acuerdo de conformidad con la Fiscalía por el que confesó que ayudó a enviar combatientes a Siria, Libia o Mali para "hacer la yihad"

Con una campaña a la que él mismo denominó La Hégira antes de la Hégira, Mustafá reclutaba a combatientes que provenían de todas las partes del mundo, se estima que Mustafá ayudó a reclutar a jóvenes procedentes de hasta un total de diez países. Fue tanta su actividad que agentes del Federal Bureau of Investigation (FBI) tuvieron que colaborar con la Comisaría General de Información de la Policía en la investigación de la que se consideró como una de las redes de reclutamiento más activas de la yihad a nivel internacional.

Tal y como revelaron los informes de su caso y expusieron diversos medios de comunicación, Maya "no tenía fronteras" ni preferencias a la hora de elegir a sus reclutas. Desde 2012 se convirtió en uno de los captadores más eficaces y eficientes del movimiento yihadista internacional, nutriendo de combatientes dispuestos a morir no solo al Estado Islámico (ISIS)Jabhat al Nusra en Siria e Irak, también a Al Qaeda en el Magreb Islámico (AQMI) y el Movimiento para la Unicidad y la Yihad en África Occidental (MUJAO), según recogieron diversos medios de comunicación internacional.

Según las investigaciones, se sabe que Mustafá Maya empleaba nueve seudónimos diferentes y seis perfiles distintos en sus diversos blogs y cuentas en redes sociales. Sin embargo, el canal principal por el que destacaban sus labores de captación era el blog ansartawhid2.blogspot.com.es.

En este blog publicaba desde las rutas de desplazamiento a Siria hasta consejos para llegar a los campamentos del Estado Islámico sin ser detectado ni detenido. Además se encargaba de coordinar al resto de implicados en la tarea de captación, desde conductores hasta traductores o ayudantes.

Un hombre con barba y gorro es escoltado por la policía.
Mustafá Maya Amaya durante su procesamiento | El Cierre Digital

'El gitano' Maya tiene su origen en Bélgica y es hijo de padres inmigrantes españoles que retornaron a Melilla,  donde se crio. Según las informaciones publicadas por diversos medios de comunicación en 2014, a través de Sharia4Spain, había conseguido reclutar combatientes para grupos como Al Qaeda, Estado Islámico o AQMI (Al Qaeda en el Magreb Islámico). 

Como parte de su proceso de captación, tras seleccionar a los candidatos que más le gustaban, contactaba en privado con ellos y les proporcionaba las relaciones necesarias para que pudieran llegar, a través de otros "pasadores", a la organización terrorista de destino.

Para llevar a cabo sus labores se sabe que Maya Amaya contó con la ayuda de otras cuatro personas  (de nacionalidad belga, tunecina y francesa), que fueron condenados a seis años de prisión y que reconocieron en el juicio que contactaron con el líder de la célula porque tenían interés en viajar a Siria "para luchar contra el régimen de Bashar Al Assad y hacer la yihad".

En 2014, cuando se desarticuló la célula a la que pertenecía el melillense, el ministerio marroquí del Interior (con el que colaboró la Policía española en la investigación) emitió un comunicado sobre el grupo en el que detalló los movimientos del líder español "de tendencia extremista" y que residió en Larui, población a unos 30 kilómetros al sur de Melilla. Posteriormente se trasladó a la ciudad autónoma desde donde continuó organizando y coordinando el envío de voluntarios a diversos grupos yihadistas, según precisaron diversos expertos a los medios de comunicación.

➡️ Investigación

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