El polémico negocio del arte de la Fundación Enaire: Señalan a su cúpula por nepotismo

En los últimos años han sido varias las empresas públicas adscritas a algún ministerio que han levantado polémicas de diverso calado. Una de las últimas en situarse bajo el foco fue Enaire, una entidad pública empresarial española encargada de la gestión de la navegación aérea en España. Enaire es dependiente del Ministerio de Transportes, liderado por Óscar Puente, y está certificada para proveer servicios de control de ruta, aproximación y aeródromo, es responsable de garantizar que las aeronaves vuelen de forma segura y ordenada por el espacio aéreo español. 

Aunque la empresa encargada de la gestión del espacio aéreo español se ha visto envuelta en diversas polémicas, la mayoría relacionadas con la privatización progresiva de varias de torres de control que corrían a su cargo y que pasaron a manos de entidades privadas, las más recientes señalan hacia su fundación cultural.

Según reseñan en su web,  la Fundación Enaire, creada en 1994, es responsable de administrar, conservar y promover el patrimonio artístico de Enaire, que incluye alrededor de  1.300 obras de arte contemporáneo  de diversas disciplinas. 

Esta fundación financiada por Enaire, que está adscrita al Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible y es financiada con dinero público -en concreto recibió 2,2 millones en 2022-, ha sido señalada por periodistas como Elena Vozmediano en el medio Fronterad por supuesto nepotismo en la designación de sus cargos directivos. 

Al parecer, todos los responsables de la fundación a lo largo de su existencia han tenido estrechos vínculos con el Partido Popular y el PSOE, partidos en los que han ejercido cargos de diversa responsabilidad. De igual manera, el diario El Confidencial informó en 2019 sobre un caso de supuesto favoritismo endogámico en la empresa AENA, de la que Enaire posee un 51%.

Las polémicas sobre el supuesto nepotismo de la fundación Enaire se habrían visto reforzadas tras el reciente nombramiento de su nueva directora gerente, Margarita Asuar, que ha generado controversia debido a su escasa experiencia curatorial y a sus conexiones políticas. Asuar está casada con Manuel Escudero, que durante las primarias del 2017 elaboró la propuesta política para Pedro Sánchez y posteriormente se unió a la ejecutiva del PSOE, donde se encargó de roles relacionados con la contabilidad hasta que fue designado como embajador de España ante la OCDE en junio de 2018,  cargo que ocupó hasta el pasado mes de febrero.

Además, la figura de Escudero también  está estrechamente ligada al ministro de Transportes, Óscar Puente, quien fue el encargado del nombramiento de Margarita Asuar el pasado 22 de marzo. Al parecer, el ministro y el marido de Asuar escribieron artículos conjuntos y colaboraron cuando Puente se postulaba como portavoz del grupo socialista.

Por su parte,  el actual presidente de la empresa y al mismo tiempo de la fundación cultural es José Antonio Santano Clavero, secretario de Estado de Transportes, que ha ocupado cargos políticos desde joven dentro del PSOE. Durante más de veinte años fue alcalde de Irún y forma parte de la ejecutiva del partido en el País Vasco, lo que ha generado polémicas por supuesto nepotismo dentro de esta entidad financiada con dinero público y adscrita al Ministerio de Transporte de Óscar Puente. 

Los últimos escándalos por supuesto nepotismo en la cúpula de la fundación cultural dependiente de Enaire no han quedado aislados, se suman a otra polémicas sucedidas años atrás. Según informó El Periódico de España, en una licitación del año 2019 para un puesto de administrativo en la Gerencia de la Fundación ENAIRE, la única candidata que se presentó resultó ser la autora de los pliegos del proceso.

Además, se descubrió que esta persona había sido la autora de varios pliegos de la Gerencia antes de obtener la plaza, lo que plantea dudas sobre la transparencia del proceso de contratación. A pesar de esto, la Fundación ENAIRE afirmó que la contratación cumplió con la legalidad y que la persona adjudicataria solo tuvo un papel administrativo en la redacción de los pliegos.

El origen y las polémicas de la Fundación Enaire

La Fundación Enaire, que nació en diciembre de 1994 bajo el nombre de Fundación Aena y está financiada con dinero público, tiene el objetivo de llevar a cabo diversas iniciativas culturales, educativas y científicas relacionadas con los fines de la antigua Aena. También se encarga de preservar, difundir y aumentar el valioso patrimonio artístico de la organización, en particular su colección de arte contemporáneo. Se estima que el número de piezas u obras que preserva la fundación asciende a las 1300, aunque es difícil determinarlo con exactitud.

Tras la transformación de la entidad pública y el cambio de nombre a Enaire,  la Fundación siguió dependiendo de la entidad matriz, adoptando en 2016 la denominación oficial de Fundación Enaire. 

Su colección de arte contemporáneo y su programación abordan principalmente la aeronáutica, con exposiciones parciales en aeropuertos españoles y subvenciones para la conservación del patrimonio histórico aeronáutico español. La fundación ha colaborado estrechamente con 'La Fábrica' y otras entidades, pero su gestión se ha visto criticada por supuesta falta de transparencia y planificación en lo referente a sus obras y exposiciones.

En la actualidad, el equipo directivo de la Fundación Enaire está compuesto por; La mencionada Margarita Asuar Jiménez como Directora Gerente, Ángeles Imaña Marcos como Directora de Conservación y Proyectos Culturales, Enrique Torres Arranz como Director de Administración, Irene Sánchez Morante como coordinadora del Departamento de Administración, Lucía Serrano Muñoz junto con Natalia de la Torre Serradilla y Gabriela Pinto Cáceres como responsables de coordinar Proyectos Culturales y Paloma Gómez de Terán y Alejandra Martín-Maestro García como Secretarias de Dirección.

Por su parte, el actual presidente de la empresa y al mismo tiempo de la fundación es José Antonio Santano Clavero, secretario de Estado de Transportes, que ha ocupado cargos políticos desde joven dentro del PSOE. Durante más de veinte años fue alcalde de Irún y forma parte de la ejecutiva del partido en el País Vasco.

El pasado año la gestora del espacio aéreo español batió su propio récord con casi 2,2 millones de vuelos gestionados durante 2023. En este sentido, según los datos de Enaire,  la fundación tuvo un gasto total de 2,2 millones de euros de dinero público en 2022, de los cuales casi medio millón correspondería a gastos de personal. En este sentido, algunas voces señalan que las retribuciones del personal, especialmente de la directora gerente y de la directora de conservación, son elevadas y equiparables a las de museos de gran importancia.

Al mismo tiempo inciden que las actividades y exposiciones que promueve la fundación no se corresponderían con los proyectos que presentan otros museos de mayor reconocimiento que cuentan con un presupuesto similar. Aunque la oferta de actividades de la fundación no es tan amplia como algunos lo desearían,  Fundación Enaire anunció el pasado mes de enero una convocatoria de subvenciones por valor de 168.000 euros destinados a coleccionistas que conserven al menos cuatro aeronaves de escala 1:1. De igual manera, la fundación entrega anualmente su propio premio de fotografía, retribuyendo al ganador con hasta 12.000 euros

Según revela la revista digital Fronterad, la Fundación Enaire ha tenido acceso a dos espacios para exhibir su colección y presentar exposiciones a través de cesiones en los últimos años. En julio de 2021, el entonces ministro de Transportes, José Luis Ábalos, inauguró la renovación de las Naves de Gamazo en Santander, propiedad de la Autoridad Portuaria de la ciudad y dependiente del ministerio. Se estima que el coste de la rehabilitación superó los 2 millones de euros de dinero público.

Esta iniciativa se originó durante el mandato de  Íñigo de la Serna  como alcalde de Santander, quien luego se convirtió en ministro de Fomento. Según el citado medio, su objetivo era convertir la ciudad en un importante centro cultural. A pesar de algunos obstáculos, se logró firmar un convenio de cesión de las Naves de Gamazo a la Fundación Enaire por veinte años, prorrogables a cincuenta, y se llevaron a cabo trabajos de renovación con fondos del 1’5% cultural.

Sobre esto último, se trata de una disposición incluida en la legislación del Patrimonio Histórico Español, que establece que en los contratos de obras públicas se debe destinar al menos el 1% del presupuesto a trabajos de conservación o enriquecimiento del Patrimonio Cultural Español, o al apoyo de la creatividad artística.

Al parecer, la Fundación Enaire también tuvo la oportunidad de utilizar la Arquería de Nuevos Ministerios en Madrid como sede para sus exposiciones. Sin embargo, las reformas necesarias para este espacio no se iniciaron hasta 2019. A pesar de los planes de convertirlo en la sede permanente de la colección de la fundación nunca se llegó a oficializar ni concretar. 

Solo se realizó una exposición en este lugar, bajo el nombre "El tragaluz democrático" en 2023, antes de que la Arquería pasara a ser ‘La Casa de la Arquitectura’ bajo la responsabilidad del Ministerio de Vivienda y Agenda Urbana. Tras esto, la Fundación Enaire perdió la cesión de uso del lugar sin una explicación oficial, tal y como resalta la revista Fronterad, lo que generó discrepancias y polémica alrededor de la gestión de la fundación y el interés real de sus directivos en ella.