
Los otros príncipes con hijos 'bastardos': El último, Laurent de Bélgica
El descendiente del rey Alberto II reconoce que tiene un hijo de 25 años y se une a casos como el de Alberto de Mónaco
El príncipe Laurent de Bélgica (Bruselas, 1963) ha protagonizado un nuevo escándalo que ha sembrado la polémica en la Familia Real belga. El hermano del rey Felipe de Bélgica ha reconocido públicamente que tiene un hijo secreto de 25 años.
El joven, llamado Clèment, es uno de los 'hijos extramatrimoniales' de la realeza europea. Pero, ¿cuáles son los otros casos de 'vástagos secretos' de los royals?
El príncipe Laurent de Bélgica reconoce que tiene un hijo secreto
Hay que retroceder hasta la década de los noventa. Por aquel entonces, el príncipe Laurent de Bélgica, uno de los hijos varones de los reyes Alberto II y Paola, inició una relación con la cantante y presentadora Wendy Van Wanten.
Wendy Van Wanten es una de los rostros más célebres de la televisión belga. Durante aquellos años, Wendy participó en diversos realities. También ejerció como presentadora de un programa erótico llamado Le PinUp Club.
Fue entonces cuando los medios hicieron pública su relación con el príncipe Laurent. Aquella confirmación sacudió a la familia real belga. Especialmente a Alberto II y Paola, que no vieron con buenos ojos el noviazgo de su hijo con la presentadora.
Los monarcas no aceptaron aquella historia. Consideraban que Wendy no era una mujer apropiada para su hijo.
Ante este escenario, la ruptura de la pareja tuvo lugar en 1999. El final de aquel noviazgo fue un auténtico mazazo para Laurent de Bélgica.
De hecho, según recogió la prensa de la época, el hijo de los reyes belgas tuvo que ingresar en La Ramée. Este es un hospital psiquiátrico donde se internó para tratar la depresión provocada por la separación.
Un año después de la ruptura, llegó al mundo Clément. Un niño sobre el que, desde su nacimiento, planearon los rumores sobre su gran parecido físico con el hermano del rey Felipe de Bélgica.
Sin embargo, su madre zanjó las especulaciones en una entrevista televisiva. En dicha intervención, negó que Clèment fuera hijo de Laurent de Bélgica.

En 2003, el príncipe belga contrajo matrimonio con la princesa Claire con quien tuvo tres hijos: Louise (2004) y los mellizos Nicolás y Emérico (2005). Después de varias décadas, ha sido el propio Laurent de Bélgica quien ha confirmado la paternidad.
"Por este comunicado, reconozco ser el padre biológico de Clément Vanderkerckhove. Durante los últimos años lo hablamos abierta y honestamente. Este comunicado está guiado por un sentido de buena voluntad, dentro del respeto a las personas implicadas y es el fruto de un camino común. Pido que esta información sea recibida con la discreción que impone la naturaleza de un tema tan íntimo. No haré otras declaraciones ni daré más explicaciones al respecto", reza dicha misiva.
Delphine Boël, la hija 'desconocida' de Alberto II de Bélgica
Curiosamente, este no es el primer 'escándalo' que han protagonizado los miembros de la familia real de Bélgica.
A principios de 2020, después de varios años de lucha en los tribunales, el rey Alberto II de Bélgica reconoció a la escultora belga Delphine Boël como su hija ilegítima.
Aunque en su comunicado oficial manifestó no estar de acuerdo con el proceso judicial, no pudo negar las evidencias científicas. La escultora nació en 1968 y es fruto de la relación del monarca belga con la baronesa Sybille de Selys Longchamps. Una historia que perduró durante dieciocho años.

Actualmente, Delphine Boël está plenamente integrada en la vida social de la familia real belga. De hecho, ostenta el título de princesa, porta el apellido real y participa en actos institucionales de la familia real belga.
Alberto de Mónaco y sus hijos extramatrimoniales
Los Grimaldi también han saltado al foco por diversos 'líos de faldas'. Igualmente, por la aparición de dos hijos secretos príncipe Alberto de Mónaco tuvo con dos azafatas.
Una de ellas fue Tamara Rotolo. Ambos se conocieron en 1991 cuando la azafata estaba de vacaciones en el sur de Francia. Rotolo y el príncipe Alberto de Mónaco vivieron un amor de verano y fruto de esta historia nació Jazmin Grace, cuyo nombre es un homenaje a Grace Kelly, su abuela paterna.
En un primer momento, Alberto de Mónaco negó ser el padre de la pequeña. Durante años se negó a pagar la pensión alimenticia.
Sin embargo, esta situación dio un giro en 2006. Aquel año, el soberano monegasco reconoció legalmente a Jazmin y le otorgó sus apellidos.
Seis años después de conocer a Tamara Rotolo, Alberto de Mónaco protagonizó otra historia de amor con otra azafata. Hablamos de Nicole Coste, una auxiliar de vuelo togolesa. La relación duró seis años, pero se interrumpió por petición del príncipe Rainiero de Mónaco.

Aquella historia dejó un hijo ilegítimo llamado Alexandre. Aunque Alberto de Mónaco reconoció a aquel niño, su paternidad legal no se formalizó hasta 2005.
Tanto Alexandre como Jazmín Grace cuentan con el apoyo económico de su progenitor. De igual manera, mantienen buena relación con el soberano monegasco. Aunque no están en la línea de sucesión al trono, Jazmín Grace y Alexandre participan en muchos de los eventos oficiales de la familia real de Mónaco.
Los ‘hijos secretos’ de los Borbones
Uno de los 'hijos secretos' más mediáticos de los Borbones fue Leandro de Borbón. Nacido en Madrid en 1929, Leandro fue fruto de la relación entre Alfonso XIII y la actriz Carmen Ruiz Moragas. No conoció a su padre durante su infancia, pero presentó un reconocimiento de paternidad en 2002 y obtuvo el apellido Borbón en 2003.

Posteriormente solicitó el tratamiento de Alteza Real y la condición de infante, que le fueron denegados. Falleció en 2016. Ningún miembro de la familia real asistió a su funeral, aunque los reyes eméritos y Felipe VI con Letizia enviaron una corona.
Leandro de Borbón no ha sido el único hijo ilegítimo de la dinastía Borbón. Juan Carlos I se ha enfrentado a diversas demandas de paternidad.
Una de ellas fue presentada por el escritor Alberto Solá Jiménez. Según el relato de Solá, su madre biológica es la aristócrata catalana Anna Maria Bach Ramon con quien el rey Emérito mantuvo un breve affaire.
Solá interpuso varias demandas para que se reconociera su paternidad. Sin embargo, el Tribunal Supremo las rechazó en 2015. Tres años después, lo hizo el Tribunal Constitucional.

Solá se sometió a pruebas de ADN junto a Ingrid Sartiau, una mujer belga que también afirma ser hija de Juan Carlos I cuya demanda sí fue admitida por el Supremo.
Según el acta notarial presentada en la demanda, la madre de Ingrid, Liliane Ghrislaine Sartiau, mantuvo una breve relación con el rey Emérito. Esta historia tuvo lugar a finales de 1965. Fruto de esa historia nació Ingrid en agosto de 1966.

Las pruebas a las que ambos se sometieron confirmaron una alta probabilidad de parentesco como hermanos. Otra prueba realizada en 2017 por el CNI arrojó un 99,9 % de coincidencia genética con el rey. En 2019, Albert publicó su autobiografía El monarca de La Bisbal.
Tres años después, Albert Solá falleció de manera reptina a los 66 años de edad. Por su parte, Ingrid mantiene su lucha. La demandante no reclama títulos, lugar en la línea de sucesión ni dinero, solo busca reconocimiento como hija de Juan Carlos I.
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