20 de abril de 2024
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FIN DE SEMANA

José María Calviño, exdirector de RTVE, fue hombre clave del 'guerrismo' y participó en múltiples operaciones especulativas durante el 'felipismo'

El intento de colocar "a dedo" al marido de Nadia Calviño resucita la figura del padre de la ministra y sus 'pelotazos'

El Cierre Digital en Nadia Calviño y José María Calviño.
Nadia Calviño y José María Calviño.
La reciente renuncia del marido de Nadia Calviño, Ignacio Manrique de Lara, a su cargo por un puesto elegido supuestamente “a dedo”, ha hecho que el PP pida la dimisión de la vicepresidenta. La situación hace recordar la figura del padre de la vicepresidenta, Jose María Calviño, quien fue director de RTVE de 1982 a 1986 y una de las figuras clave en el organigrama de Alfonso Guerra y su cultura del ‘pelotazo’.

El nombre de Nadia Calviño vuelve a estar de actualidad. Y es que la secretaria general del Partido Popular, Cuca Gamarra, ha afirmado que la ministra de Asuntos Económicos y Transformación Digital —y también vicepresidenta primera— debería dimitir. “Creo que esa dimisión hubiera sido la decisión acertada y adecuada ante un escándalo de unas magnitudes mayúsculas”.

El escándalo al que alude es la reciente renuncia del marido de Calviño, Ignacio Manrique de Lara, a su cargo como coordinador de Estrategia Comercial y de Marketing en Patrimonio Nacional. Una dimisión propiciada, según afirmaba la popular, por la investigación de los medios de comunicación sobre su supuesto nombramiento “a dedo”.

“Todos podemos concluir, tras las informaciones de los medios de comunicación, que ese era un puesto de trabajo hecho a la medida del marido de la vicepresidenta y, evidentemente, la renuncia no es por un ejercicio de responsabilidad, sino de investigación por parte de los medios de comunicación”, declaraba Gamarra.

Ignacio Manrique de Lara había obtenido el puesto para el que había otros siete candidatos posibles. Según afirma El País, la comisión de cinco miembros que se encargaba de valorarlos, le otorgó la máxima puntuación al marido de Calviño, que acabó renunciando al cargo debido a la polémica que levantó su nombramiento. Manrique de Lara es licenciado en Economía por la Complutense y actual Director de Marketing en BeeDIGITAL.

Ignacio Manrique de Lara.

Para la popular, la dimisión del marido de Calviño debería haber ido acompañado de “la dimisión de la vicepresidenta, porque no fue por casualidad todo esto”. En sus declaraciones, hacía alusión también a “la relación directísima” entre Ana Cueva —antigua secretaria de Estado de Economía, ahora al frente de Patrimonio Nacional— y Calviño.

Y aunque este tipo de relaciones son conocidas por los medios de comunicación, que el nombre de Calviño salga a relucir saca a la luz, de nuevo, la figura de su padre, José María Calviño, un célebre político de la época de Felipe González.

Nadia Calviño, hija del primer director de la RTVE de Felipe González

Nadia Calviño nació en octubre de 1968 en La Coruña. Por aquel entonces, era la hija de un abogado que acabaría mudándose a Madrid por cuestiones laborales. Sin embargo, en 1982 adquiriría el título de hija del primer director de RTVE de la época de Felipe González en el poder. José María habría estado vinculado al organismo público desde 1970, como representante de la cadena ante la Unión Europea de Radiodifusión y como vocal del Consejo de Administración, entre otros cargos.

Calviño se mantuvo al mando de la cadena pública hasta el año 1986. El PSOE ganó por segunda vez las elecciones y su nombre resonaba para formar parte de alguno de los ministerios. Sin embargo, no continuó en RTVE ni dio el salto a la política. Y a pesar de ello, durante esta etapa se convirtió en uno de los brazos armados de Alfonso Guerra —vicepresidente del Gobierno por aquel entonces— y también en protagonista de la llamada “cultura del pelotazo”.

Los 'pelotazos' de Calviño tras RTVE

Su posición como abogado y su anterior paso por la cadena pública le valieron a Calviño para convertirse en uno de los hombres de confianza del gobierno de González. En junio de 1986, año en el que abandonó RTVE, el PSOE se encontraba en plena elaboración del borrador para la Ley de televisiones privadas. Solo había tres personas conocedoras de su contenido: Felipe González, Alfonso Guerra y Javier Solana, ministro de Cultura.

Sin embargo, José María Calviño también tuvo conocimiento del borrador ya que Alfonso Guerra le consultó para conocer su opinión antes de enviarlo al Consejo del Estado. Calviño hizo entonces anotaciones y mantuvo el secreto de un proyecto que no fue a gusto de todos.

El nuevo proyecto reducía a tres el número de canales de televisión autorizados y limitaba a diez años renovables el periodo de la concesión administrativa. Aunque este no fue el aspecto que más irritó a los empresarios periodísticos. Lo fue la limitación que imponía el proyecto en los porcentajes de participación de dichos empresarios: ninguna persona física o jurídica podía ser titular de más de un 25 por ciento de una sociedad concesionaria.

La maniobra fue concebida como una traba para que Jesús Polanco, propietario de El País, no se hiciera con el monopolio televisivo. Sin embargo, en lo referente a Calviño le sirvió para convertirse en la cabeza visible de Canal 10, el primer canal de televisión privado en España. La cadena estaba bajo la marca empresaria de Film Success S.A, en la que Calviño participaba a través de la empresa Lake Wood Enterprises Inc.

Canal 10 empezó a emitir desde Londres en 1988, antes de la convocatoria del concurso público de concesión de canales que tuvo lugar el 23 de mayo de 1989. Se dio a conocer con dos meses iniciales de acceso gratuito a su contenido (películas, series y música sin interrupciones publicitarias) y, posteriormente, se convirtió en un canal de pago. La operación fue un fracaso, ya que solo consiguió 654 abonados.

Calviño asume la dirección de RTVE bajo la atenta mirada de Alfonso Guerra, a la izquierda de la fotografía.

Sin embargo, la experiencia sirvió a Calviño para que, más tarde, Alfonso Guerra le encargase la gestación de Tele 5. Polanco había anunciado que no iba a presentar su candidatura para obtener una plaza de televisión privada y Alfonso Guerra intentó montar un nuevo grupo televisivo. Calviño lo consiguió, poniendo de acuerdo a Germán Sánchez Ruipérez, entonces presidente de la editorial Anaya y propietario del diario El SolSilvio Berlusconi presidente de la italiana Fininvest, actual Mediaset, y Miguel Durán, entonces presidente de la Organización Nacional de Ciegos (ONCE).

Aunque Polanco finalmente decidió acudir, el canal formado por Calviño siguió adelante, dejando fuera de las concesiones al Grupo Z de Antonio Asensio.

Mar de Chiclana, el segundo pelotazo

El 20 de enero de 1989 firmaron la compra de la sociedad Mar de Chiclana el abogado gaditano Jesús Martínez Benítez, con domicilio en Chiclana de la Frontera (Cádiz); el viejo conocido de Calviño, el empresario andorrano Antonio Ubach Montes, director de la Caja de la Seguridad Social de Andorra, y el periodista Enrique Vázquez Domínguez, director general de Informativos hasta 1985 bajo el mandato de Calviño.

Mar de Chiclana era la propietaria de una gran cantidad de terreno en el municipio gaditano de Chiclana de la Frontera, cuyo ayuntamiento socialista se disponía a autorizar la construcción de la segunda urbanización más grande de la zona y uno de los actuales emporios turísticos del país.

La sociedad disponía de 217.584 metros cuadrados, pero se necesitaban casi dos millones de metros cuadrados de superficie para albergar el campo de golf de 18 hoyos, los 2.000 chalets y las 7.000 plazas hoteleras que se pretendían construir con una financiación de 30.000 millones de pesetas.

Vista de las playas de Chiclana de la Frontera.

Los socios y amigos del ex director general de RTVE no tenían ni el dinero ni terreno suficiente para llevar a cabo la operación, pero las dos cosas se solucionaron rápidamente gracias a los contactos que había tejido Calviño a lo largo de su carrera profesional. El exdirector de RTVE contactó con empresarios vinculados al sector turístico mallorquín para que cedieran sus terrenos y también consiguió hacerse con el cuartel de la Guardia Civil de la Loma del Puerco, que se interponía en la operación.

Finalmente, el 24 de junio de 1989, la corporación municipal de Chiclana de la Frontera, presidida por el alcalde socialista José Mier, aprobaba el plan parcial de Mar de Chiclana, alrededor de cuyos terrenos de la Loma del Puerco funcionan hoy día los hoteles más espectaculares del complejo turístico de Sancti Pectri, en Chiclana (Cádiz), como el Royal Hideway, de cinco estrellas, antiguo hotel Barceló, junto a miles de chalets y el campo de golf previsto en tiempos de Calviño.

La operación fue posible gracias a las gestiones realizadas por el despacho de Calviño desde su sede en la calle Marqués de Urquijo de Madrid, que cobró por sus gestiones una cantidad que le permitió mudarse a un chalet de la lujosa urbanización de Puerta de Hierro, donde empezó a codearse con vecinos como Isabel Preysler y Miguel Boyer, un ambiente bastante propicio para que la actual vicepresidenta primera del Gobierno de Pedro Sánchez y ministra de Asuntos Económicos y Transformación Digital de España, Nadia Calviño, preparase su futuro y su carrera profesional.

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