18 de abril de 2024
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FIN DE SEMANA

El viejo líder del Cártel de Sinaloa hacía ostentación de su riqueza en público, mientras el actual intenta pasar lo más desapercibido posible

La diferencia entre los narcos: Del exagerado Chapo Guzmán al discreto Mayo Zambada

El Chapo fue capturado por sus alardes de ostentación.
El Chapo fue capturado por sus alardes de ostentación.
Se conocen muchas historias de narcos en las que su ascenso en el mundo del crimen se vio frustrado debido a su propio ego. El ejemplo comparativo perfecto de esto es la relación que había entre los dos líderes del Cártel de Sinaloa, El Chapo Guzmán y El Mayo Zambada. Mientras el primero fue arrestado debido al alarde de sus caros gustos y cumple ahora una cadena perpetua, el otro sigue en libertad evadiendo a las autoridades tanto norteamericanas como mexicanas mientras permanece activo.

Está demostrado que la ostentación y los delirios de grandeza han sido los peores enemigos de los narcos a lo largo de la historia. En España quizá el mayor referente de esta realidad sea “El Nata”, cuya admiración por Pablo Escobar lo hizo intentar replicar su icónica mansión y por ello fue identificado y capturado, pero lo cierto es que los narcos en todo el mundo hacen alardes de poder y riqueza que los ponen inmediatamente en el radar de las autoridades.

Algunos narcos se dan cuenta de que sus excesos los llevan a cometer errores que eventualmente los llevarán a la cárcel, estas personas a día de hoy siguen libres, como es el caso de Ismael “El Mayo” Zambada, quien fue líder del Cártel de Sinaloa junto a “El Chapo Guzmán”. La diferencia es que El Mayo sigue en libertad mientras Guzmán cumple una cadena perpetua.

Los alardes de El Chapo acabaron por llevarlo a prisión.

Se presume que el mando del Cártel de Sinaloa aún se encuentra en manos de Zambada y que las precauciones de este lo mantienen lejos del radar de las autoridades mexicanas y norteamericanas.

La diferencia crucial entre los dos líderes

La gente de México todavía recuerda las pretensiones de El Chapo, quien buscaba notoriedad y fama y no se mostraba cohibido a la hora de hacer alardes de riqueza. Estas acciones no empezaron cuando llegó al liderazgo, sino que empezaron con un Chapo más joven que ponía nerviosos a sus superiores con fiestas y reservas en hoteles lujosos.

Era frecuente que Guzmán reservara pisos enteros del antiguo hotel Sheraton Bugambilias de Puerto Vallarta, en Jalisco. En estas circunstancias se daban muchos episodios de excesos que contribuyeron a ponerle en la mira de las autoridades.

El Chapo intentó convencer al director Sean Penn de hacer una película sobre su vida.

El ex capo del Cártel de Sinaloa no solo deseaba hacer alarde de su poder adquisitivo, sino que además tenía un ego desmesurado que le impulsó a contactar con el director Sean Penn, famoso por películas como La Delgada Línea Roja, para que hiciera una película sobre su vida e inicios en el mundo del narcotráfico.

Mientras que Ismael Zambada gastaba su dinero con sumo cuidado y evitaba hacer saltar las alarmas sobre su poder adquisitivo, Guzmán tenía casas en todas las playas de México, además de una mansión de diez millones de dólares. En una de sus casas de Guadalajara tenía incluso un zoológico. Esta propiedad era tan grande que tenía que ser recorrida en tren. El Chapo también tenía cuatro jets y un barco bautizado “Chapito”.

La contraparte con Zambada es muy evidente sobre todo en el caso de las viviendas. Sus apariciones públicas se cuentan con los dedos de una mano y sus propiedades se localizan siempre en la periferia y zonas rurales.

Al parecer, el menos notorio del duo del Cártel de Sinaloa realiza sus actividades como si de cualquier empresario se tratase, pero toma muchas más precauciones que alguien cuyos negocios son completamente lícitos. Según la Oficina de Control de Activos Extranjeros, El Mayo ha realizado muchas operaciones financieras para el Cártel.

Ismael ha sido reconocido por ser un narcotraficante de naturaleza menos agresiva que el resto de sus compañeros en el Cártel, rara vez usó la violencia para acceder a los mercados que deseaba, su habilidad para los negocios era más que suficiente. Actualmente con 72 años es uno de los pocos narcotraficantes que jamás ha pisado una prisión.

Otro fantasma del narco

Se ha señalado que Zambada ha sido muy cauteloso con la información que se conoce de él. Se sabe que sigue siendo cabeza del Cártel de Jalisco y que padece diabetes. Su avanzada edad y estado de salud hace pensar que no pasará mucho tiempo para que la organización vea un nuevo líder.

Estos hechos no hacen sino alabar aun más las capacidades de El Mayo, quien ha logrado evadir a todas las agencias de seguridad tanto mexicanas como estadounidenses y seguir realizando sus operaciones desde las sombras.

Ismael "El Mayo" Zambada.

Netflix ya se aventuró en el mundo de las series de narcos, después de retratar la vida de Pablo Escobar decidieron hacer lo propio con el mundo del narcotráfico en México. El negocio los ha llevado a realizar una serie más a la que han titulado World’s Most Wanted. El primer capítulo de esta serie fue dedicado a El Mayo y descubrieron cosas muy impresionantes respecto su seguridad.

Zambada no hacía uso del teléfono móvil. A día de hoy no se tiene una sola grabación donde se escuche la voz del narco. Como criminal sabía de las opciones que tenía la policía para atraparle y evitó siempre que la tecnología jugara en su contra.

Además de no usar aparatos electrónicos, se sabe que El Mayo nunca hablaba en las reuniones y los miembros del Cártel de Sinaloa tenían prohibido decir su nombre. Siempre dictaba las órdenes fuera de los espacios cerrados y tan solo a alguno de sus subordinados que luego reproducía las instrucciones.

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