Retrato de la España de la prostitución: Lo último, la captación de clientes menores de catorce años

Tres mujeres han sido liberadas de una trama de explotación sexual. El Grupo VI de la Brigada Provincial de Extranjería de la Policía Nacional ha sido el encargado de su puesta en libertad y de la detención de ocho personas (siete mujeres y un hombre) considerados como cabecillas de la red. La alarma saltó cuando el cuerpo de seguridad recibió la llamada de auxilio de una de las afectadas a través del teléfono habilitado para la trata de seres humanos. Durante la comunicación, denunció las condiciones esclavizadoras en las que se encontraba ella y sus dos compañeras.

Las tres mujeres eran mayores de edad y entraron en el negocio de forma voluntaria. Sin embargo, las condiciones que aceptaron en un primer momento no correspondían con la realidad. Eran obligadas a ejercer la prostitución durante todo el día y a consumir drogas, a veces incluso eran las encargadas de recoger los alijos. Aunque lo más impactante de toda esta trama es la edad de algunos de los clientes que acudían al piso: menores con edades inferiores a los catorce años. Así lo ha dado a conocer el diario El País.

España, el primer país europeo que más demanda la prostitución

Son múltiples los casos de prostitución de menores —en Elcierredigital.com se han denunciado algunos de ellos, como el de ’18 Lovas’—, sin embargo, no es tan común que los clientes sean los que no alcancen la mayoría de edad. Los estudios de este carácter suelen realizarse a partir de los 18 años, como se puede ver reflejado en los realizados en 2003 por el INE, por lo que no se puede cuantificar la cantidad de menores que pagan por prostitución. Sin embargo, sí que se puede saber el porcentaje de adultos que lo hacen: un 27,3% de hombres manifestaron haber pagado por tener relaciones sexuales alguna vez en su vida.

Imagen de los pisos de la trama de explotación sexual de Usera.

Unos datos antiguos, puesto que el estudio realizado por el INE se refire al año 2003. Más recientemente, Rocío Mora, directora de la asociación APRAMP (Asociación para la Prevención, Reinserción y Atención a la Mujer Prostituida), afirmaba al canal 24 horas que España es “el primer país a nivel europeo que más demanda a mujeres y a niñas para ser explotadas y el tercero a nivel mundial”.

Esta misma asociación, en su informe Prostitución, claves básicas para reflexionar sobre un problema, se pregunta la causa de que los hombres acudan a la prostitución. Y establece dos grandes grupos: aquellos que tienen una relación estable y buscan algo distinto, y los que experimentan problemas en su relación con las mujeres.

Vertientes que se pueden aplicar sobre todo a adultos, aunque uno de los perfiles descritos en este mismo informe, elaborado por los sociólogos noruegos Prieur y Taksdal, arroja un poco más de luz sobre esta problemática: los fiddlers, son “habitualmente hombres jóvenes incapaces de mantener una relación estable y que contemplan el sexo como otra forma de consumo, una especie de Mc-sex sin mayor contenido. Su visión de la sexualidad está dominada por la pornografía y la violencia”.

Los jóvenes y la pornografía

El perfil describe a un tipo de hombre dominado por la pornografía y la violencia. Un dato que podría encajar con el perfil del menor que paga por tener relaciones sexuales. Según datos de la ONU, uno de cada tres niños de entre 10 y 14 años visitaban en 2019 páginas de carácter pornográfico. De este modo, el organismo también establecía los 11 años como la edad media en la que los menores comienzan a ver este tipo de contenidos. Datos alarmantes que llevaron a Reino Unido este mismo año a bloquear el acceso a los menores a estas webs.

Elcierredigital.com también publicó en 2019 los resultados de un estudio realizado en institutos de Castilla-La Mancha en el que se desvelaba que un 44% de los chicos consumían pornografía. Un problema que se suma a la escasa educación sexual que hay en España, hecho que ha provocado que se multipliquen las ETS y que se adelante la edad a la que se tiene la primera relación sexual, que ahora está en 15 años.

Este conjunto de factores podría ser el desencadenante de la cada vez menor edad de los clientes de los prostíbulos. José Nieto, inspector jefe del Centro de Inteligencia de Análisis de Riesgo de la Policía Nacional, ya declaró en 2015, según recogía Europa Press, que la edad media de los hombres que compran sexo se había reducido drásticamente: "Nos estamos imaginando al señor de corbata de cincuenta o sesenta años, pero la realidad es que es mucho más joven, estamos hablando de una media de edad de 19 o 20 años", recogía la agencia de noticias.