20 de abril de 2024
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FIN DE SEMANA

Algunos condenados protestaron ante el Consejo General de Poder Judicial porque el magistrado Julio de Diego parecía dormir durante algunas sesiones

Las dudas e interrogantes del Supremo para resolver los recursos de la sentencia Gürtel

Francisco Correa durante el juicio.
Francisco Correa durante el juicio.
El Tribunal Supremo decidirá en unos días los recursos de casación presentados por los condenados en la causa Gürtel hace casi dos años. Pero el Alto Tribunal no encuentra la unanimidad a la hora de rebajar o mantener las condenas impuestas tras el juicio de la Audiencia Nacional. Éstas son las incógnitas o preguntas que tendrán que hacerse los jueces de la Sala 2 antes de dar su respuesta definitiva.

Han pasado 13 años del inicio de la instrucción del Caso Gürtel y los acusados, condenados por la Pieza Época I, siguen sin tener sentencia firme porque el Tribunal Supremo no ha dictado aun su fallo. Algunos de ellos llevan más de 2 años en prisión provisional esperando que nuestro más alto Tribunal analice sus recursos de casación presentados a finales de 2018. A pesar de haber sobrepasado los plazos habituales e incumplido el artículo 899 de la Ley de Enjuiciamiento Criminal parece que la decisión se va a retrasar hasta finales de este mes de septiembre para sorpresa de las defensas.

Según fuentes próximas al fallo, las deliberaciones que empezaron el 25 de febrero se han complicado porque hay notables diferencias entre los Magistrados de la Sala 2ª del Tribunal Supremo. El ponente de esta sentencia, Juan Ramón Berdugo, no ha sido capaz de conseguir la unanimidad que buscaba cuando empezó la fase de deliberación hace más de 6 meses, a pesar de que la Ley le concede 10 días para dictar sentencia.

  El primer tribunal que juzgó la causa Gürtel.

Desde que se presentaron los Recursos de Casación se evidenció que el Tribunal Supremo no iba a tener una tarea fácil porque los principales despachos españoles alegaron cientos de motivos contra el polémico y controvertido fallo de la Audiencia Nacional. En los mencionados recursos se acreditaron errores, infracciones de preceptos constitucionales, quebrantamientos de forma, infracciones de ley y valoraciones arbitrarias e irracionales de pruebas, entre otras muchas irregularidades. Si a todo esto le unimos todos los acontecimientos que el Tribunal Supremo y la opinión pública española han ido conociendo desde que la Audiencia Nacional dictó en primera instancia su sentencia, podemos concluir que tiene una cierta lógica las discusiones y retrasos motivados por la complejidad de la decisión. Pero, las preguntas son muchas.

- ¿Cómo afectará a la Sentencia del Tribunal Supremo el comportamiento del Magistrado ponente de la Audiencia Nacional que se quedó dormido en multitud de sesiones del juicio del Caso Gürtel?

-¿Cómo afectará al fallo del Tribunal Supremo tener que revisar la sentencia firmada por el Magistrado De Prada, autodenominado progresista radical, apartado de otras Piezas Separadas del Caso Gürtel e impulsor del famoso párrafo que afectaba al Partido Popular y por el que se ejecutó la moción de censura, a pesar de no tener relación con el objeto de la Pieza Separada Época I, tal y como afirmó la propia Audiencia Nacional? 

- ¿Cómo influirá en la Sentencia el hecho de que los policías que investigaron el Caso Gürtel desde su inicio, realizaron los registros y finalmente se convirtieron en los peritos de la acusación estén investigados ante el Juzgado de Instrucción nº 39 de Madrid por el delito continuado de falsedad documental por haber falsificado documentos oficiales de la investigación y que podrían invalidar multitud de pruebas?

¿Influirá la sentencia contra Garzón?

 - ¿Será determinante para el fallo del Tribunal Supremo la condena por prevaricación continuada a Baltasar Garzón que le apartó de la carrera judicial por escuchar ilegal y subrepticiamente a los investigados de Gürtel con sus letrados defensores en los locutorios de prisión? Aquella contundente sentencia condenando a Baltasar Garzón, así como los Autos judiciales a lo largo de la instrucción, llegaron a calificar la conducta del susodicho en relación con esos derechos fundamentales como “cercenamiento”, “profunda injerencia”, “irremediable laminación”, “vaciamiento”, “menoscabo”, “drástica injerencia”, “amputación”, “desmantelamiento”… ¿Influirá en el Tribunal Supremo esos calificativos empleados por ese mismo Tribunal o por el contrario desatenderán a lo dicho por ellos mismos?

En los dos últimos años se ha visto como las distintas sentencias sobre casos de corrupción condenaban a los acusados a penas que oscilaban entre meras inhabilitaciones o los 10 años de prisión como mucho, aunque los importes defraudados fueran muy superiores a los del Caso Gürtel, ¿podrá el Tribunal Supremo ajustar las elevadas penas del Caso Gürtel a su propio criterio?

Cuadro comparativo de las penas de Gürtel con otras causas.

- ¿Cómo afectará la famosa grabación del excomisario Villarejo en la que reconoce que se reunió con Baltasar Garzón “para preparar lo de Gürtel” (sic) días antes de que el caso “cayera” en su Juzgado demostrando una evidente vulneración de las normas de reparto de la Audiencia Nacional y su interés por hacerse con esa causa?

El excomisario Villarejo ha solicitado al Juez García-Castellón, en el marco de la Operación Tándem, acudir a declarar voluntariamente sobre el Caso Gürtel mostrando una gran predisposición para aportar pruebas y testimonios sobre este caso. Si unas grabaciones parecidas están sirviendo para investigar al Rey emérito o al propio Vicepresidente segundo del Gobierno, ¿podría el Tribunal Supremo solicitar al Juez García-Castellón que agilice la declaración del excomisario Villarejo por el posible impacto que podrían tener sus pruebas sobre la sentencia? Todas las respuestas solo las tiene ahora ya el Tribunal Supremo.

El juez ensimismado

El juicio de Gürtel dejó imágenes curiosas y conflictivas entre los jueces como el caso del magistrado Julio de Diego que parecía dormitar durante algunas sesiones del juicio, la última vez cuando se enjuició la visita del Papá a Valencia en el mes de julio. La conducta de De Diego ya fue denunciada por algunas de las partes que se quejaron ante el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ). Tras una laboriosa investigación el máximo órgano de representación de los jueces concluyó que De Diego no dormía sino que estaba "ensimismado en sus reflexiones".

Pero la respuesta no dejó satisfechos a algunos de los imputados que se quejaron de nuevo ante el CGPJ. Incluso el presidente del Tribunal que juzgó la primera época del caso, Ángel Hurtado, llamó la atención en privado al magistrado, aunque no surtió demasiado efecto.

El juicio Gürtel es uno de los más importantes de los últimos años en España, en el que el tribunal dictó una sentencia que condenó, entre otros, al empresario Francisco Correa a 52 años de prisión y al ex tesorero del PP, Luis Bárcenas a 33 años de cárcel. Ahora el Tribunal Supremo deberá ratificar o rebajar esas condenas.

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